El Castillo Fortaleza de Petrer, la mayor y más importante joya arquitectónica, patrimonial y arqueológica de la ciudad, acaba de estrenar imagen renovada. Por espacio de tres meses, este icónico monumento de nuestra localidad declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 1983, ha sido objeto de un proceso de rehabilitación para consolidar y reparar la huella que el paso del tiempo va dejando en su estructura.
Durante las semanas que han durado las obras, la fortaleza construida en el siglo XII ha estado cerrada al público y se ha suprimido cualquier tipo de actividad cultural, turística o social entre sus muros. Ahora, una vez abiertas sus puertas de nuevo, ha recuperado a pleno rendimiento sus actividades habituales e incluso ha estrenado una interesante exposición en torno al mundo de los Playmobil.
Rehabilitar un emblema local
El objetivo de la intervención ha sido conservar y garantizar la estabilidad del edificio, y para ello se ha contado con un presupuesto total de 207.305 euros, de los cuales, algo más de la mitad, han sido subvencionados por la Conselleria de Cultura de la Generalitat Valenciana, mientras el resto del coste se ha asumido con fondos propios municipales.
La actuación ha sido coordinada conjuntamente por las concejalías de Patrimonio y Urbanismo, y ha abordado diferentes problemas estructurales y de conservación que habían sido detectados en visitas técnicas previas. Los trabajos se han centrado en la reparación de grietas en muros exteriores e interiores, y en la estabilización tanto de la torre como de la muralla. También, se ha realizado un sondeo arqueológico que ha permitido identificar restos históricos de la época andalusí.
Los trabajos han durado tres meses
Consolidación de la estructura
Concretamente, se han reforzado los lienzos de la muralla y de la torre, eliminando partes degradadas y consolidando grietas con morteros de cal y varillas de refuerzo. Para proteger los materiales originales, se han aplicado diferentes tratamientos de conservación.
También se han reparado diversas grietas que habían aparecido en el interior de la torre, para lo cual se ha retirado el mortero deteriorado y se ha aplicado un nuevo acabado compatible con los materiales históricos, capaz de adaptarse a los movimientos estructurales del edificio.
Patrimonio y Urbanismo han coordinado conjuntamente las obras
Excavaciones arqueológicas
Por otra parte, se han llevado a cabo trabajos de impermeabilización de las cubiertas de la torre y en la sala de ceremonias, donde se han sellado las grietas. Asimismo, se ha mejorado el sistema de evacuación de aguas y se ha aplicado un tratamiento impermeabilizante para evitar filtraciones y humedades.
En la zona ajardinada situada entre la torre y la muralla se ha pavimentado la zona, se ha eliminado la vegetación existente y se han realizado trabajos de impermeabilización para evitar la entrada de agua al subsuelo del Castillo.
Finalmente, con el objetivo de identificar posibles elementos históricos ocultos bajo el suelo, se han efectuado excavaciones arqueológicas.
Es la tercera intervención en menos de cuatro años
Tercera reforma desde 2022
A pesar de que goce de un relativo buen estado de salud, el Castillo, dada su antigüedad, debe someterse a periódicas revisiones y puestas a punto. En los últimos tres años y medio, por ejemplo, ha sido objeto de dos intervenciones.
La primera de ellas se tuvo que acometer de urgencia en abril de 2022 tras el desprendimiento de varias rocas de una de las laderas, y la segunda se realizó en el verano de 2023 para reparar todas las grietas existentes en la cara norte y sur de la muralla y actuar en la bóveda de la sala capitular.
Pero si nos vamos más atrás en el tiempo, en el año 2018 se llevaron a cabo obras de restauración de los pavimentos originales del patio de armas, datados entre los siglos XVI y XVII. Y algo antes, entre los años 2008 y 2009, el edificio fue objeto de una profunda reforma que se centró en la rehabilitación de la alcazaba, del calabozo, la urbanización de la explanada, y la recuperación de las casas-cueva situadas en el interior de la muralla.
Aunque, la intervención más completa que ha experimentado el complejo fortificado se realizó en los años setenta del siglo pasado, cuando fue rescatado del estado de ruina en el que se encontraba y se le dio la imagen que actualmente podemos ver.
Orgullo de Petrer
El Castillo Fortaleza, construido sobre un enclave estratégico en el siglo XII durante la época de dominación musulmana, es la construcción urbana más alta de la localidad y el monumento más emblemático de la villa. Visible desde muchos puntos de la ciudad, representa una de nuestras principales atracciones turísticas y señas de identidad.
Su inconfundible estampa de postal permite contemplar desde sus alturas unas vistas únicas que dominan todo el valle del Vinalopó, siendo una visita más que recomendable tanto para vecinos como para forasteros.





















