Petrer continúa profundizando en el conocimiento de su pasado histórico, con la realización de unas excavaciones que tratan de sacar a la luz los restos de una alquería medieval en la zona de la rambla de Puça.
En este lugar, desde hace un año, la concejalía de Patrimonio está desarrollando un plan de recuperación llamado “El territorio de Bitrir/Petrer (siglos X-XV). Hacia los orígenes de un paisaje medieval”, cuyas investigaciones buscan localizar con precisión una antigua finca agrícola situada extramuros del núcleo del Bitrir musulmán, en cuya época de esplendor habría una pequeña comunidad rural.
El Petrer medieval
Gracias a las investigaciones realizadas en el pasado por el Grupo Arqueológico de Petrer y la arqueóloga Concha Navarro, se han hallado y documentado interesantes vestigios que han permitido ampliar el conocimiento sobre la ocupación en nuestro municipio en la Edad Media.
El descubrimiento, a finales de los años sesenta, en la rambla de Puça, de unos paneles de yeso del siglo XII, únicos en la provincia de Alicante y que se pueden visitar en el Museo Arqueológico, han revelado la existencia en este mismo lugar de antiguos asentamientos islámicos estables dedicados a la agricultura alrededor de una alquería o casa de campo.
El proyecto forma parte de un plan más amplio con cuatro fases
Comienzan los sondeos arqueológicos
Según nos ha informado el director del Museo Dámaso Navarro, Fernando Tendero, entre el 9 y el 21 de agosto pasados se llevó a cabo la fase II de este proyecto de investigación, que consistió en la realización de tres sondeos definidos a partir de las conclusiones obtenidas en la fase I, cuyo objetivo era localizar las zonas con mayor potencial arqueológico a través de las técnicas de prospección.
Durante estas labores, llevadas a cabo entre los meses de noviembre de 2020 y febrero de 2021, se documentó mediante GPS el material arqueológico presente en superficie en la rambla de Puça, así como los restos de posibles estructuras.
Una vez finalizados los trabajos de campo se procedió a generar un mapa del terreno -con los puntos marcados también con GPS-, en el que se podían identificar las zonas con mayor concentración de elementos arqueológicos, siendo estas las seleccionadas para realizar sobre las mismas los trabajos de la segunda fase.
Marcas de arado
Además, en uno de los perfiles de los bancales de olivos incluidos en las zonas prospectadas, se detectaron varias piedras y restos constructivos que podrían corresponder a muros de las habitaciones de la alquería.
Los sondeos realizados en uno de los bancales de la rambla de Puça, según Fernando Tendero, han presentado hallazgos “muy interesantes”, detectándose bajo la capa agrícola actual otra de suelo agrícola con marcas de los surcos del arado, que corresponde, posiblemente, “a la explotación de ese mismo terreno durante la primera mitad del siglo XX”.
Se han realizado tres sondeos arqueológicos
Hallados dos muros
Una vez levantado este nivel comenzaron a evidenciarse los restos de posibles estructuras, que acabaron definiéndose como dos muros de mampostería pertenecientes a algún tipo de edificio, aún no definido, de la alquería andalusí de Puça.
Cada estructura ha aparecido en las dos primeras prospecciones. Tras el desmonte del derrumbe se ha podido localizar, en el sondeo 1, un banco de mampostería adosado al propio muro.
Un posible silo
En el sondeo 2 se ha localizado un recorte en el terreno de forma cilíndrica, a modo de fosa, rellena con material de construcción y carbones cuya funcionalidad, aún desconocida, podría tratarse de un posible silo.
El número 3 fue más pequeño y se realizó para determinar si un muro que se intuía en el perfil del bancal seguía prolongándose en el terreno, pero se comprobó que “seguramente se trate de un amontonamiento de piedras y restos depositados cuando se realizaron las labores de abancalamiento”.
Petrer tuvo un importante asentamiento islámico en la época medieval
Restos de época medieval
En cuanto al material arqueológico hallado, predominan los fragmentos cerámicos de los siglos XII y XIII, con restos de vajilla andalusí como una jarrita con decoración esgrafiada, fragmentos de jarras, tinajas y candiles, permitiendo así establecer una cronología de abandono situada a mediados del XIII, con la llegada de los conquistadores cristianos.
Además de las cerámicas, cabe destacar una varilla de bronce identificada como un huso relacionado con las actividades textiles, un enlucido decorado con círculos concéntricos y parte de una yesería, con una cenefa con una decoración de cuerdas entrelazadas.
El proyecto tiene prevista su continuación con una tercera fase a realizar a partir del año que viene, con la excavación de una zona más amplia según las conclusiones obtenidas.
Colaboración arqueológica
En estos trabajos ha participado un equipo formado por personal del Museo Arqueológico Dámaso Navarro, de la Universidad de Alicante, arqueólogos profesionales y estudiantes voluntarios de diversas universidades españolas.
El proyecto “El Territorio de Bitrir/Petrer (siglos X-XV)” está financiado por el ayuntamiento y cuenta con la autorización técnica de la conselleria de Educación, Cultura y Deporte y con el permiso de las propietarias del bancal, a quienes los responsables de la investigación han querido agradecer las facilidades dadas para llevar a cabo la intervención.