Este lunes 11 de octubre ha comenzado oficialmente la temporada de la Denominación de Origen Protegida (DOP) de la Granada Mollar de Elche con el acto simbólico del primer corte que ha corrido a cargo del periodista José Ribagorda, editor y presentador del informativo del fin de semana de Telecinco. Al evento, celebrado en una finca de la pedanía de La Baia, han acudido el alcalde de Elche, Carlos González, el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, y el presidente de la DOP, Francisco Oliva, junto a los ediles Felip Sànchez, Carles Molina, Esther Díez y Marga Antón, amén de otros miembros de la Corporación Municipal y demás autoridades, así como diversos representantes de la sociedad civil y de las asociaciones agrarias.
En el acto, que ha puesto de manifiesto las buenas perspectivas del sector para la campaña 2021/2022 en cuanto a calidad y producción, González ha destacado las virtudes del fruto por excelencia del Camp d’Elx: “Es un producto único, exquisito, excelente y de extraordinaria calidad, como acredita la Denominación de Origen Protegida”, ha señalado, deseando a los productores “una magnífica temporada y campaña de comercialización en mercados nacionales e internacionales” y recomendar su consumo. “La granada mollar es esencial desde el punto de vista socioeconómico para el Camp d’Elx”.
“Las aplicaciones culinarias de la Granada Mollar son enormes”, ha subrayado Rigaborda. “A cualquier tipo de ensalada, a cualquier tipo de plato no solo le proporciona ese toque aromático y dulce, sino que, además, me parece una fruta muy estética; tremendamente estética y bonita al embellecer cualquier plato”, ha explicado. “Cada día más, la variedad Granada Mollar de Elche se está imponiendo. Tiene un prestigio especial que el consumidor lo valora de una manera especial; que cuando vas a comprarlo o adquirirlo, ya sabe qué significa una denominación de origen”, ha indicado Mazón.
Francisco Oliva, presidente de la DOP de la Granada Mollar de Elche, ha señalado que en la zona geográfica de la DOP se espera recolectar unas 50.000 toneladas, una cantidad similar a la de otros años ya que, pese a que ha habido pérdidas en la producción por las lluvias registradas en primavera durante la floración, se ha logrado compensar con la incorporación de los granados jóvenes que se plantaron hace años y que cada vez son más productivos.