Entrevista > Alejandro Párraga / Abogado y novelista (Málaga, 30-septiembre-1979)
Alejandro Párraga nació en Málaga, pero ha pasado su infancia, adolescencia y juventud en Orihuela. Actualmente, las obligaciones profesionales le mantienen gran parte del año fuera, pero afirma que siempre la considerará su ciudad, identificándose plenamente con ella y sus habitantes.
Recientemente ha sido distinguido por la Real Orden de San Antón de Orihuela, por este motivo y por su exitosa trayectoria profesional, le hemos entrevistado.
Abogado de profesión, pero artista en el corazón con dos novelas publicadas. ¿Qué le animó a publicar estas obras?
Desde siempre he sentido una especie de dicotomía vocacional: por un lado, siento pasión por el Derecho y, de otro, la necesidad imperiosa de escribir historias…
Haber tenido la oportunidad de conseguir compaginar lo uno y lo otro, resulta maravilloso; actualmente, dirijo el departamento jurídico de un importante fondo de inversión privado, mientras compagino mi tiempo trabajando en mi próxima novela.
«Siempre he sentido una especie de dicotomía vocacional, tanto por el Derecho como por la escritura»
Háblenos de su primera novela, ‘Meando en la puerta del vecino’ de 2004.
Como bien indicas es mi opera prima, y, como suele pasar en estos casos, es la más sincera literariamente hablando, pues nacida desde las tripas supo mantenerse ajena a todo convencionalismo posible.
Puede que, por primigenia, le guarde un cariño especial. Supuso, o al menos la crítica coincidió en ello, la aportación de algo diferente frente a los géneros que en ese momento despuntaban en el panorama literario, y eso me enorgullece, aunque reconozca que adolece de los defectos propios de la edad con la que la escribí.
Bautizan su estilo como cotidianismo poético, háblenos sobre esta nueva forma literaria.
Es un método creativo donde el lenguaje se acomoda a las necesidades de la narración, valiéndose de la combinación entre planteamientos directos, ajenos de eufemismos y tabúes, con una manera muy cuidada de contar la historia, casi poética, que consigue o pretende armonizar con el todo creado.
Dicho de otro modo, es un intento por demostrar que, prácticamente cualquier cosa, por pequeña o aparentemente insignificante que parezca, puede ser hermosa. Sólo hace falta encontrar las palabras adecuadas.
No es hasta diez años más tarde, en 2014, cuando publica su segundo proyecto literario, ‘La orden Voynich’. ¿Qué nos puede contar de él?
Es bien distinta a la primera, se trata de una novela mucho más estudiada, donde cada una de sus líneas nace de la meditación y el trabajo, buscando la perfección del lenguaje…
Como es de imaginar, eso no se consigue de un día para otro. A mí me llevó diez años, pero eso sí, me siento muy satisfecho con el resultado.
«La nueva novela que preparo está siendo sometida previamente a examen por los lectores»
Nos resultan conocidas las portadas de sus libros…
Las portadas de las dos novelas son obras de la gran artista Amalia Navarro. Son ‘Interpretación I y III’, precursoras de ese realismo mágico con el que después se definió su pintura.
Tengo la suerte, y el orgullo, de que le permitiese a la editorial utilizarlas, porque no podría imaginar mejor carta de presentación ante los lectores… Aunque reconozco que ser su hijo facilitó bastante las cosas.
Ha sido columnista, escritor de artículos y cuentos, y vemos que trabaja en un nuevo proyecto literario en el que hace muy partícipes a los lectores. ¿Cómo está trabajando en esta nueva novela?
‘Quién se quedará nuestros libros cuando hayamos muerto» es el proyecto literario con el que he sometido, capítulo a capítulo, mi nueva novela al examen previo de los lectores. Ha sido muy divertido y la participación abrumadora. Ello me ha servido para modificar la trama, los tiempos, y hasta la propia manera de construir la historia.
Gracias a eso, `No todo iban a ser cuentos de princesas´, que será su título, está prácticamente lista para ver la luz.
«‘No todo iban a ser cuentos de princesas’ está prácticamente lista para ver la luz»
Recientemente, la Real Orden de San Antón de la ciudad de Orihuela le ha nombrado uno de sus caballeros 2022. ¿Cómo recibió esta noticia?
Tuve el honor de recibir el anuncio de esta distinción a través de Julio Calvet Botella, Caballero de San Antón, Secretario-Canciller de dicha Real Institución, lo que supuso una gran sorpresa que me llenó de emoción.
¿Cómo fue la ceremonia de investidura?
La Real Orden fue extremadamente cuidadosa en las medidas de seguridad y en llevarla a cabo sin incurrir en el más mínimo riesgo para la salud.
Finalmente, fue una ceremonia muy emocionante, tanto por su belleza como por la concurrencia que hubo, un día que recordaré siempre con un cariño muy especial.
¿Qué significado tiene obtener esta distinción?
Supone para mí todo un honor haber ingresado en la Real Orden de San Antón, cuyos caballeros y damas que la conforman son personas dignas de admiración, habida cuenta de lo extraordinario de los méritos derivado de sus trayectorias profesionales.
Además, compartir el día del nombramiento con Andrés Pedreño Muñoz, Amadeo Valoria Martínez, Gonzalo Damián Montoya Alcocer y María Jesús Poveda Rodríguez lo ha convertido, si cabe, en todavía más especial.