El Ayuntamiento de Altea, a través de su concejalía de Bienestar Animal, lleva ya varios años promoviendo acciones concretas que lo han colocado, en no pocos casos, como uno de los consistorios pioneros en este tipo de medidas.
De forma paralela a sus propias iniciativas y esfuerzos, ha llegado el momento de reforzar los mensajes que apelen a la responsabilidad de los propietarios de esas mascotas para garantizar una convivencia social adecuada.
Tal y como explica a AQUÍ en Altea el edil responsable del área, José Luis León Gascón, “como bien es sabido, tener un animal en nuestra familia supone también adquirir una serie de responsabilidades. No todas esas responsabilidades deben ser cubiertas por terceros y, en este caso, por el Ayuntamiento”.
Obligaciones individuales
Gascón insiste en que “tener un animal conlleva la responsabilidad de proporcionarle una buena alimentación, una buena higiene y una buena salud. Además, a la hora de salir de nuestra vivienda, debemos seguir con todo ello. No nos vale con pensar que cuando salimos a la calle dejemos sus restos porque pagamos impuestos”.
Por ello, el político de la Villa Blanca subraya que los propietarios de mascotas “tenemos que ser responsables a la hora de que nuestro animal, que forma parte de nuestra familia y que, desde 2022, está considerado por Ley como un ser sintiente, no se convierta en una responsabilidad del municipio o del resto de ciudadanos”.
«Aunque hagamos un montón de campañas, no llegamos a concienciar del todo a la ciudadanía» J. L. León
Un problema generalizado
León Gascón lamenta que “aunque hagamos un montón de campañas, que cada una de ellas supone una inversión de dinero público, no llegamos a concienciar del todo a la ciudadanía”, y matiza que este “no es un problema local de Altea, sino que está generalizado”.
El edil alteano es consciente del problema y afirma que para comprobarlo “sólo hay que levantar la vista. Altea es un municipio con muchas columnas que tienen delante un comercio y, aunque los comercios traten de cuidarlas y limpiarlas, cada cierto tiempo acaban estando sucias y con desconchones en su pintura. Lo mismo sucede con las farolas, los bancos o muchas esquinas de edificios”.
Altea será, en 2023, uno de los primeros municipios en contar con un veterinario en su plantilla municipal
Sanciones para los irresponsables
Ante esa problemática que no termina de erradicarse en Altea y en otros muchos municipios, el departamento de Bienestar Animal ha vuelto a poner en marcha una campaña “de concienciación para pedir a la gente que sea más respetuosa y responsable. Y no se trata de no pasear a nuestra mascota, porque la calle es para disfrutarla con ellos, pero también para mantener un mínimo de higiene”.
José Luis León Gascón niega que estas campañas tengan un afán recaudatorio. “Hay quien puede decir que funcionamos a través de las sanciones, pero no es así. Las sanciones tienen que aparecer porque, por mucho que repitamos el mensaje a través de todos los medios posibles, acaban apareciendo aquellos que no van a escuchar esos llamamientos y consejos, por lo que se convierten en una herramienta para que no repercuta en el resto de ciudadanos ya que hay que recordar que la limpieza viaria se paga entre todos”.
La Villa Blanca ha invertido este año cerca de 20.000 euros en el cuidado de las colonias de gatos
Colonias de gatos
Un ámbito, el de la higiene de las calles alteanas en relación a los animales, en el que el Ayuntamiento ha realizado una inversión total cercana a los 20.000 euros en lo que va de año, y eso únicamente en lo que se refiere a las colinas de gatos callejeros.
Según los datos aportados por el Consistorio, en los primeros diez meses de 2022 se han esterilizado 191 ejemplares, se han tratado a otros 67 por heridas o enfermedades (en todos esos casos también se han desparasitado a los animales) y se ha procedido a practicar una eutanasia en once casos.
Municipio pionero
Para todo ello, el Ayuntamiento de Altea apostó “hace un año” por contratar a una veterinaria que pudiera hacer un seguimiento de todas las problemáticas, que se pudieran detectar a nivel municipal, relacionadas con la tenencia de animales. Una apuesta decidida que convirtió a la Villa Blanca en un ejemplo pionero en este ámbito que ahora se pretende mejorar todavía más.
En ese sentido, el edil de Bienestar Animal explica que “si todo va bien, en 2023 vamos a convertir ese puesto en una plaza fija, es decir, en un funcionario o funcionaria del ayuntamiento. Con ello, habremos conseguido que el de Altea sea uno de los primeros municipios que tenga ese puesto dentro de su organigrama. Eso fue un reto que asumí a nivel personal y ahora es muy satisfactorio que eso se va a convertir en una realidad”.