Entrevista> Enrique Pacheco / Speaker del Valencia, actor de doblaje y locutor de radio (Valencia, 24-junio-1983)
Intrépido, polifacético y gran profesional, en ocasiones incansable, Enrique Pacheco es, entre otras muchas cosas, el actual speaker del Valencia CF, y desarrolla esta función con enorme pasión, pues se considera un aficionado más. También ha sido a lo largo de más de veinte años locutor de Canals Ràdio, presentador de televisión y músico de banda.
En la actualidad, junto a esta labor en el equipo valencianista, ocupa la mayor parte de su tiempo en el doblaje de películas, series y documentales. Son infinidad los proyectos que le surgen, gracias a un talento innato y a una voz singular que no deja indiferente a nadie.
«Soy un aficionado más y me alegro enormemente con las victorias, y también me entristezco con las derrotas»
¿Qué representa para un valencianista ser el speaker de su equipo?
Sobre todo, un privilegio, porque tengo la fortuna, desde mi posición, a través de mi voz, de representar a millones de valencianistas y como aficionado de mi equipo, no es una profesión sino una vocación, una devoción. Es un lujo y un privilegio poder ser la voz de la afición en Mestalla.
¿Cómo recuerdas tus inicios en Canals Ràdio?
Empecé yendo de invitado a un programa llamado ‘La Batuta’, protagonizado por la banda de música. Un día los presentadores no acudieron y fui yo mismo el que lo comandé. Tenía quince años y a partir de ahí ya me quedé presentándolo. Esos fueron mis orígenes.
Combinabas incluso la radio con la televisión local.
En la radio comencé a trabajar, no ya como colaborador, sino en plantilla en abril de 1999. Unos años después presenté un programa que se llama ‘La Banqueta’, en la TV Comarcal, entre 2008 y 2018. Asimismo, estuve un año, en 2019, como reportero en À Punt, siguiendo la Primera División, la Segunda y la Segunda B, además de al Valencia en la Champions League.
Fueron en total once años apasionantes en los que tuve la oportunidad de narrar partidos de fútbol para la propia TV Comarcal y vivir, por ejemplo, una eliminatoria de Copa del Rey del Olímpic de Xàtiva en el Santiago Bernabéu.
Han sido muchos años en una radio local, muchos programas.
Primeramente debo agradecer a la radio local ser la mejor escuela de radio que hay y donde se hace de todo: magacines, musicales, entrevistas, informativos, de técnico de sonido…
Guardo muy buen recuerdo del programa musical de las dedicatorias, en el que la audiencia telefoneaba y enviaba mensajes, porque tenías un contacto directo con el público. Era muy especial y conocí a mucha gente a través de ese espacio.
También me han gustado los deportes en la radio, los he disfrutado mucho. Pero igualmente concursos o magazines. Realmente me ha agradado todo.
Conservarás numerosas anécdotas.
Una vez no sé en qué estaría pensando, que, en lugar de dar el teléfono de la radio, dije el de mi casa. La gente telefoneaba a mi domicilio para pedir canciones y mi madre decía, “esto no es la radio, ¿qué está pasando aquí?”. O dejarme el micrófono abierto y ponerme a cantar.
Incluso conocí a mi pareja por medio de la radio: hacíamos un programa de bromas llamando a un número de la guía telefónica al azar y marqué su teléfono de Bufali.
Su pasión por los colores valencianistas le ha ocasionado incluso algún momento de tensión con equipos rivales
Estando en la radio comienzas a hacer anuncios, doblajes, presentaciones…
Primero comencé a hacer publicidad a un nivel muy reducido y después he ido realizando miles y miles de anuncios, cada vez de clientes más importantes, por ejemplo de Bwin, Vueling, Consum, Meliá e incluso la Generalitat Valenciana o el Gobierno de España.
Los actores de doblaje actuales vienen del teatro o a través de los cursos. Yo ni de un lado ni de otro, sino que aprendí desde la base, la sala, escuchando cómo interpretan los actores y las actrices, haciendo algún texto de personajes muy secundarios y cada vez haciendo más y más.
He presentado también conciertos, he sido animador de fiestas y corresponsal durante un tiempo del diario ‘Las Provincias’. He podido ir tocando muchísimos palos y he tenido la suerte de poder hacer prácticamente de todo en el mundo de la comunicación.
Eres un muy buen periodista sin haber estudiado esa carrera.
Siempre indico que no soy periodista, porque debo respetar a los que han estudiado esa carrera, les ha costado un dinero y han invertido un tiempo. Sin embargo, también es cierto que he recibido invitaciones de diferentes universidades para ir a hablar de cómo se hace radio, doblaje y televisión.
Desde las propias universidades han tenido en cuenta que no únicamente la formación es determinante, sino la propia experiencia. Pese a todo, siempre que he comenzado en una nueva empresa, lo primero que digo es que soy una especie de intruso y que no soy periodista.
¿De qué forma empieza para ti el mundo del speaker?
Muy joven, con apenas diecisiete años, haciendo las presentaciones de la Unió Esportiva Canals, el equipo de fútbol de mi pueblo. Después he hecho trabajos similares en otros conjuntos, speaker en medias maratones, vueltas a pie, trails, duathlones…
Volvamos al Valencia, ¿cuál es la primera vinculación con el equipo de futbol?
Hace unos seis o siete años el Valencia toma la decisión de montar una radio oficial y al director, Josep Rovira, le conocía de su etapa en Ràdio 9, en la que yo hacía alguna publicidad. Me pidieron si podía grabar algunos anuncios para esa radio oficial.
A partir de ahí empiezo a preparar todas las promociones de VCF Radio y desde el club quieren mi voz para vídeos en redes sociales. Llega entonces el Centenario del Valencia, en 2019, en el que me dicen si puedo ser co-speaker del acto del partido de las leyendas en Mestalla. El hasta entonces speaker, Manolo Mas, hablaba en castellano y desde la entidad se pensó que el valenciano no podía faltar.
«Para mí es muy importante hacer la función de speaker en valenciano», recalca Enrique Pacheco
¿Y cómo fue ese acto?
Estuvo dividido en dos partes: una primera un poco más distendida, donde los presentadores fueron Santi Cañizares y Enrique Arce -Arturito en ‘La Casa de Papel’-, y ya la parte puramente de presentación de los jugadores, que la llevé yo junto a Manolo Mas.
Después me pidieron volver a ser co-speaker en un Trofeu Taronja contra el Inter de Milán y presente muchos actos con patrocinadores en Mestalla. El club decide poco después prescindir del speaker que había, veníamos de una pandemia, y me dicen que soy el elegido.
Le has querido dar un toque más personal.
Para mí muy importante era poder hacerlo en valenciano y el público, en ese aspecto, está muy contento. Después, dentro de los márgenes en los que no me puedo salir, era clave que los presentes en Mestalla se sintieran identificados conmigo, porque soy un aficionado más.
La diferencia es que no estoy en la grada, sino junto al banquillo, y dispongo de un micro. Pero los aficionados deben notar que soy tan valencianista como ellos, que siento los colores tanto como ellos y me alegro o entristezco con las victorias o derrotas.
Ahí está el secreto, pienso. Soy natural, sin filtros, me gusta improvisar y que diez minutos antes del inicio del partido el público ya esté metido en él, que la caldera de Mestalla ya esté encendida. Creo que lo estamos consiguiendo.
Tu pasión te ha ocasionado incluso conflictos con equipos rivales…
Algún rifirrafe con el anterior entrenador del Mallorca, Luis García Plaza; con Unay Emery, cuando estaba en el Villarreal; pero sobre todo con los jugadores del Getafe.
En el partido de esta temporada, 5-1 a favor del Valencia, el quinto gol lo anota Hugo Duro y cuando concretamente ese delantero marca gol, siempre grito ‘tocó en Hugo Duro’, frase que ya se ha hecho habitual en la grada y que el propio jugador así celebra.
A los componentes del banquillo del Getafe nos les hizo ni pizca de gracia, ya que estoy prácticamente pegado a su zona. Recordemos que Jaime Mata y Damián Suárez vivieron ese partido de cuartos de final en la que el balón tocó en Hugo Duro, imposibilitando que el Getafe pasara de ronda.
«Viví un momento mágico durante la final de la Copa del Rey, pero también en semis y en el Centenario del Valencia»
¿Cómo reaccionaron?
Salieron ambos del banquillo, algo molestos. Son jugadores profesionales, y yo simplemente el speaker, pero todos debemos guardar las formas, porque además en las gradas hay niños viéndonos y tenemos que dar ejemplo.
Les dije que su actitud no era del todo correcta, hubo algún momento de tensión y al final la cosa quedó ahí. Posteriormente con el delegado del Getafe aclaramos la situación.
¿El momento más especial fue la final de la Copa del Rey frente al Betis?
Para mí, antes de nada, cada vez que entro a Mestalla es una experiencia brutal. Si tuviera que escoger momentos espectaculares vividos, el primero sería el partido de las leyendas, porque supuso debutar en el campo delante de 46.000 espectadores.
En el número dos estaría la vuelta de las semifinales de copa, frente al Athletic Club de Bilbao. Estábamos a punto de clasificarnos para una final, el ambiente era fantástico ya desde la previa y después lo celebramos en el balcón.
El tercer momento sería la final, donde antes del partido amenicé la fiesta en la ‘fun zone’ frente a más de 15.000 personas. Después, ya en la Cartuja, me presentaron en las pantallas gigantes, interactué con los aficionados… Fue una experiencia muy potente, aunque el resultado no acompañó.
Dobla a uno de los protagonistas de ‘Don Matteo’ y tiene previsto intervenir en diversas series turcas
Ahora mismo estás focalizado en el doblaje de películas.
Sí, en mayo me llegó un proyecto de cien capítulos de un programa de viajes en tren para À Punt, en el que doblaba a Philippe Gougler, persona muy popular en Francia. Fue una maravilla porque me apasiona también viajar.
A raíz de este documental me surgió la posibilidad de dar el salto al doblaje nacional, interpretando al capitán Anceschi en la serie ‘Don Matteo’, un clásico italiano que en España está funcionando muy bien, en Trece y Nova.
De igual modo estoy haciendo varias series turcas, ahora tan de moda, y mucho doblaje en valenciano del que estoy muy satisfecho, porque poder contar historias en mi propio idioma es un lujo.