El Conservatorio Profesional de Música de Altea ha dejado ya de ser de titularidad municipal y ha pasado a formar parte de la Red de Conservatorios Profesionales de la Comunitat Valenciana y, por lo tanto, a ser gestionado directamente por la Conselleria de Educación, Cultura y Deportes junto a otros cuatro centros en la provincia de Alicante (más otro de danza), dos en Castellón (con uno más de danza) y diez en València (con otro dedicado también a la danza).
Este nuevo paso ha supuesto la culminación de casi una década de negociaciones y que, aunque pasaron por algunas fases de estancamiento o, al menos, de muy pocos avances, experimentaron un avance muy importante a partir de una reunión mantenida entre responsables municipales y autonómicos hace ahora justo un año, a finales de 2021.
El impulso final
Fue entonces cuando el ayuntamiento de la Villa Blanca mostró, ya de manera definitiva, su firme intención de traspasar esa importante infraestructura educativa a manos del Consell. Para ello, el propio alcalde alteano, Jaume Llinares, mantuvo una reunión con la dirección general de Enseñanza Profesional para tratar de desencallar las conversaciones, y darles ese impulso definitivo que se ha convertido en una realidad antes de finalizar 2022.
Desde aquel momento y durante casi doce meses, se ha trabajado en preparar las instalaciones del Conservatorio Profesional de Música de Altea para que pudieran entrar a formar parte de esa Red de Conservatorios Profesionales de la Comunitat Valenciana ya que, como se especificó en su momento, se tenían que realizar una serie de reformas e intervenciones para que el edificio reuniera las condiciones establecidas en términos de accesibilidad o la distribución de espacios.
El Ayuntamiento se ahorrará los 1,1 millones de euros que suponen los gastos de funcionamiento y del profesorado del centro
Mejoras en las instalaciones
Echando la vista atrás, fuentes del consistorio alteano han explicado que durante los últimos años “hemos mantenido con la Generalitat muchas y constantes reuniones” y que, de manera paralela a las mismas, se han ido realizando “las mejoras pertinentes en las instalaciones para poder cumplir con las condiciones impuestas”.
Aunque el convenio, que tiene una duración inicial de cuatro años prorrogables a otros cuatro, haya entrado en vigor con el curso escolar ya iniciado, desde el ayuntamiento de la Villa Blanca se ha aclarado que, a todos los efectos, las consecuencias de ese traspaso de poderes serán una realidad ya “en este curso 2022-2023”.
Las negociaciones para dar este paso se han alargado durante casi una década
Un ahorro de 1,1 millones de euros
Pero, ¿qué significa este paso en términos prácticos? Como siempre que se dan este tipo de acuerdos, las consecuencias del mismo se pueden resumir en dos grandes áreas: la afectación a la gestión de la instalación y a aquello que notarán los alumnos del centro.
Así, desde el Consistorio se ha subrayado que con la firma de este acuerdo lo que se ha cedido es “el uso exclusivo de las instalaciones del Conservatorio Profesional de Música de Altea “a la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte de la Generalitat”. Lo mismo sucede, han añadido, con todo “el material inventariado del mismo”. Así, desde ahora será la Conselleria la que se haga cargo, por ejemplo, de los 1,1 millones de euros que suman “los gastos de funcionamiento y del profesorado del centro”.
«Depender de la Conselleria facilitará la igualdad de oportunidades en el acceso a la enseñanza musical» A. Serrat
Un alivio económico para los alumnos
Pero no serán sólo las arcas municipales las que sientan un importante alivio, sino que también se beneficiarán de esta medida los bolsillos de los cerca de 250 alumnos que se forman en el centro alteano. Así, la responsable del área de Cultura, Aurora Serrat, explica que al depender ahora de la Red de Conservatorios Profesionales de la Comunitat Valenciana, los estudiantes “se ahorrarán el 90% de las tasas municipales” algo que, a su juicio, “facilitará la igualdad de oportunidades en el acceso a la enseñanza musical”.
Y todo ello, ha insistido Aurora Serrat, sin que el Consistorio Profesional de Música de Altea pierda su vital función como enseña de la música local en la Villa Blanca. En ese sentido, Serrat ha asegurado que el centro “seguirá poniendo a Altea en el foco cultural valenciano, como un pueblo que ama y trabaja por su cultura y tradición, siendo la música uno de nuestros ejes, además de garantizar el mejor futuro para el centro y potenciar su oferta educativa”.
Ampliación de plantilla
Por último, otra de las consecuencias de este salto desde el ámbito municipal al autonómico será “la ampliación de la plantilla del profesorado”, así como “la consolidación de los quince puestos de trabajo actuales”.
Y todo ello, tal y como reafirmó el primer edil, con el objetivo de que el Consistorio Profesional de Música de Altea pueda “seguir desarrollando su excelencia formativa bajo el amparo de la Generalitat, con todas las ventajas que ello comporta tanto para los 250 alumnos y sus familias, como para el propio Ayuntamiento, que tendrá un importante ahorro para las arcas municipales”.