Las estadísticas indican que la pérdida de audición vinculada con la edad y el envejecimiento afecta a más del 40% de las personas con más de 50 años, llegando al 71% en el caso de los mayores de 70.
Los profesionales del Centro Auditivo Audika Elche advierten, en ese sentido, que la pérdida auditiva no tratada de una forma adecuada puede triplicar el riesgo de sufrir demencia, además de poder desarrollar otras enfermedades como Alzheimer o depresión.
Sin duda, la pérdida auditiva provoca una disminución de la estimulación mental, aislamiento y deterioro cognitivo. Por ello, desde Audika insisten en la necesidad de revisiones auditivas periódicas y en la búsqueda de una solución para los problemas de audición.
Menos estímulos al cerebro
La comúnmente llamada sordera provoca que el cerebro de la persona perciba menos información, es decir, no le llegan correctamente los estímulos auditivos. La consecuencia inmediata es un deterioro prematuro y atrofia de las células, reflejado en la aparición de diferentes enfermedades cognitivas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) nos aporta un dato gravísimo, pues un 90% de los problemas auditivos no están recibiendo tratamiento. Acudir a tiempo a un especialista para frenar esta patología permitirá que la solución -mediante audífonos- sea determinante para estimular a nuestro oído y el cerebro se mantenga activo y sano.
La pérdida auditiva provoca una menor estimulación mental, aislamiento y deterioro cognitivo
Otras enfermedades
Rosa Tejado Córdoba, especialista en Audiología Protésica de Audika, sostiene que la pérdida auditiva abre la puerta a otras enfermedades e insiste mucho en el tema, “porque tiene consecuencias muy graves, tanto para las personas que sufren esa pérdida auditiva como para sus familiares”.
“Al encontrarnos antes una pérdida de audición con una enfermedad cognitiva como resultado, en el caso de que la patología esté muy avanzada, podemos recuperar la audición a través del uso de audífonos, pero la enfermedad cognitiva puede no ser reversible en la misma proporción”, argumenta, antes de matizar que debemos tener especial cuidado para no llegar a este punto.
Para la experta, «una mayor concienciación sobre la importancia de la salud auditiva y de las revisiones auditivas periódicas es determinante”. Del mismo modo, agrega, los familiares o seres queridos también juegan un papel fundamental, “ya que en muchas ocasiones son ellos quienes detectan en primer lugar esta pérdida de audición».
Desde la OMS se lamenta de que un 90% de los problemas auditivos no están recibiendo ningún tratamiento
Revisión periódica
Tal y como revisamos otras partes del cuerpo de forma periódica, con ejemplos claros -acudir al dentista o al oculista-, “la audición es también un aspecto clave a tener en cuenta, no solo por su relación con el desarrollo de enfermedades cognitivas, sino como un elemento fundamental de algo tan básico como es la relación social del individuo, el habla y la escucha”.
Conectar con otras personas es, por supuesto, lo que mueve nuestra vida y nos hace parte del mundo. Además, aseguran los profesionales, la mayoría de pérdidas auditivas pueden ser tratadas con el uso diario de audífonos, dispositivos que cada vez cuentan con mejores avances tecnológicos y capacidad de solventar las necesidades de cada persona.
Una detección a tiempo facilita tratar esta pérdida auditiva, redundando no únicamente en un bienestar físico del paciente sino también neurológico y personal. Su cerebro no tendrá que esforzarse tanto por detectar sonidos que debería percibir, mejorando su labor cognitiva.
Las consecuencias son muy graves, tanto para los que sufren problemas auditivos como para sus familiares
Mejores relaciones sociales
“Tratar esa pérdida auditiva a tiempo nos permitirá mantener mejores relaciones sociales, vivir con mayor confianza, aumentar la calidad de vida del paciente y sus seres queridos y, por supuesto, conservar más joven el cerebro”, remarca Tejado.
Evitaremos de la misma manera, añade acto seguido, otros problemas que pueden estar relacionados, aparte de la comentada demencia, como la depresión, la desconfianza o el aislamiento.
Hoy en día existen diferentes tipos de soluciones auditivas que posibilitan tratar la mayoría de los casos de pérdida. La solución más recurrente son los audífonos, que se adaptan a todo tipo de problemas auditivos, desde pérdidas leves a moderadas y profundas.
Más pequeños y avanzados
Los expertos de Audika recalcan que los audífonos son cada vez más pequeños y avanzados tecnológicamente, pasando a ser unos dispositivos muy discretos que aportan grandes funcionalidades a la ayuda de escucha del paciente.
Apuntan que la tecnología de los audífonos ha avanzado tanto que, actualmente, “disponemos de audífonos prácticamente invisibles, con conectividad bluetooth e, incluso, entrenados con inteligencia artificial para ofrecer una mejor experiencia de escucha y simular la forma como el cerebro procesa el sonido”.
Estos avances permiten optimizar exponencialmente la experiencia auditiva del usuario y conectarle de nuevo con el mundo exterior. Ya no hay duda: ¡cuidar la audición y tratar estos problemas a tiempo mejorará no solo nuestra salud, también nuestra calidad de vida!