Entrevista > Jorge García / Presidente del Rotary Club Villena (Villena, 13-noviembre-1966)
A finales de mayo se formalizó el primer Rotary Club en Villena, una red internacional que trabaja para mejorar el entorno donde actúa desde lo local hasta lo global. Un colectivo altruista con más de 110 años de historia al que pertenecen más de 1.400.000 personas en todo el planeta.
Su objetivo principal a nivel mundial es acabar con la polio, además de dar solución a problemas tangibles de cada ciudad donde actúa. Su presidente, Jorge García Ferre, nos cuanta más sobre este interesante club.
¿Qué es eso de un Rotary Club?
Es una unión de personas a nivel mundial que trabajamos por mejorar el mundo, empezando por nuestro entorno más cercano, con cosas tangibles y reales que vemos que pueden hacer falta a nuestro alrededor, desde acciones pequeñitas a propuestas comunitarias mucho más grandes.
¿Quiénes forman parte de esta red mundial?
Puede pertenecer cualquier persona implicada que quiera trabajar, y cualquier persona que pueda destinar algo de su tiempo a colaborar para mejorar nuestro entorno.
El Rotary Club Villena, ¿qué objetivos persigue?
Lo primero es consolidarnos como club. Ya por fin tenemos la carta constitutiva y somos rotarios de pleno derecho a nivel internacional, y como tal nos toca empezar a trabajar por Villena y nuestra comarca.
«Puede pertenecer cualquier persona implicada que quiera trabajar y pueda destinar algo de su tiempo para mejorar nuestro entorno»
Esta idea, ¿cómo surge en nuestra ciudad?
Me invitaron a una comida porque se estaba montando un club en una población cercana. Empecé a asistir a comidas, pero éramos como cinco o seis personas y aquello no arrancaba ni terminaba de cuajar.
Conociendo un poco más en profundidad lo que es Rotary, les dije a las personas que estaban allí que sabiendo a qué se dedica este club, sería capaz de buscar a personas en Villena que estuviesen comprometidas con esta forma de trabajar. Aquello que se estaba montando en otra población, conseguí que viniese a Villena.
Por lo tanto, sois pioneros en la ciudad.
Sí, somos el primer Rotary Club en Villena, aunque hace poco me enteré que hace veinte años ya estuvo uno a punto de formarse. Finalmente se cayó, pero ya estaban los socios y todo, aunque nunca llegó a materializarse.
¿Cuál es el funcionamiento de un club rotario?
Nosotros hemos fijado reunirnos cada 15 días. Hacemos una comida y antes de la comida exponemos la situación actual de las propuestas, así como si alguien tiene algún proyecto que quiera compartir o tiene a alguna persona a la que le gustaría añadir al club. Allí se habla todo y a continuación nos vamos a comer.
«Hay algunas reglas no escritas para que esto funcione, que es no hablar de política ni de religión»
¿Cómo pueden las personas interesadas formar parte del club?
Poniéndose en contacto con cualquiera de los integrantes. Creo que aquí en Villena a los que pertenecemos al club la mayoría nos conoce de una u otra cosa. Exponemos el interés de esa persona en formar parte de Rotary y esto se le traslada a un señor que es el encargado de la membresía, que llamamos.
Este señor es el que recibe las informaciones positivas o negativas, si las hubiera, sobre la persona interesada en entrar a formar parte del club. Si nadie se opone a esta persona, entraría; solo que una se oponga por cualquier motivo, directamente se descarta. No sé si es justo o no, pero aquí lo que se pretende es que no haya ningún mal rollo.
En una sociedad tan competitiva y egoísta, ¿qué hace especial a este colectivo?
No es más especial que cualquier otro. Hay muchos colectivos que están trabajando por y para la sociedad de manera altruista, somos uno más. Lo bueno que tiene este es la red internacional, ya que somos capaces de entendernos gente con religiones e ideas distintas, porque perseguimos un mismo bien comunitario con amplias miras.
Con tantas sensibilidades y personalidades, ¿cómo define el club las metas a alcanzar?
Simplemente se exponen y se votan. Se analiza lo que puede ser prioritario, y cuando se aprueba se cuantifica la propuesta y a continuación vemos cómo podemos conseguir el dinero, las ayudas o los patrocinios necesarios para que eso se lleve a cabo.
«La empatía, el sentido común y la lógica deberíamos trabajarlas más y hacérnoslo mirar a nivel personal»
¿Existen líneas rojas o temas que no se puedan abordar en vuestras reuniones?
Realmente no, podemos hablar de todo. Aunque sí que hay algunas reglas no escritas que algunos de los más veteranos nos han propuesto tener en cuenta para que esto funcione, como no hablar de política ni religión.
En el considerado primer mundo que vivimos, ¿qué áreas crees que debe potenciar más nuestra sociedad?
La empatía, el sentido común y la lógica deberíamos trabajarlas más y hacérnoslo mirar a nivel personal. Muchas veces hablamos de los demás y no nos miramos a nosotros mismos, es un mal muy humano.
Como primer presidente del Rotary Club Villena, ¿qué logro te gustaría alcanzar?
La presidencia, como el resto de los cargos, cada año rota y me gustaría cohesionar este grupo para que se mantenga en el tiempo y crezca en la medida justa y así poder materializar algunos de los proyectos que tenemos en mente, que están muy bien y vamos a agradecer todos.