El Plan de Mejora de Aceras ha llegado a su obra número 1.000, realizadas en los dos últimos años con la actuación que está en desarrollo en la calle Rulda. Este proyecto parte de una contrata específica por periodos bianuales que tiene como objetivo las reparaciones menores de aquellas aceras que presentan alguna deficiencia o rotura, además de ir realizando obras para mejorar la accesibilidad de todas las aceras del casco urbano.
En la calle Rula, la número 1.000 que se ve beneficiada de este Plan, se está actuando en un doble sentido: primero, se han realizado las obras de accesibilidad para atender a toda la población, en especial a aquellos con movilidad reducida. Y, por otra parte, acometer las obras en el acerado en aquellos puntos más deteriorados y hundidos.
El Ayuntamiento cuenta con una partida de 291.000 euros destinada exclusivamente al Plan Mejora de Aceras, uno de los elementos que requiere actuaciones constantes en muchos puntos de la ciudad y que es necesario renovar para mejorar la accesibilidad.
La concejala de Servicios, Maite Gandía, considera que “estas pequeñas actuaciones tienen un enorme impacto en la vida cotidiana de nuestros vecinos y vecinas. Mejoramos los barrios y mejoramos el entorno urbano”. Para la edil, este tipo de acciones de pequeño presupuesto son tan necesarias como las grandes obras que se están acometiendo y que tienen que ver con la renovación de las infraestructuras subterráneas para poner fin a los problemas de filtraciones que sufre la ciudad ante la obsolescencia de la red.