Alcoy ha difundido sus principales proyectos innovadores en sendos actos celebrados esta semana en Reus y Valencia, que han girado en torno a energía y soluciones sostenibles en entornos urbanos.
En primer lugar, el técnico de Innovación del Ayuntamiento, Joan Gisbert, ha participado en la Jornada de Innovación Urbana organizada por el Ayuntamiento de Reus y Reus Desenvolupament Econòmic en el recinto ferial de la localidad. En concreto, ha estado presente en la mesa redonda dedicada a “Espacios de Experimentación Urbana e Innovación” para dar a conocer el Sandbox Urbano de Alcoy, pionero en la Comunidad Valenciana y uno de los primeros de estas características en toda España.
El Sandbox Urbano de Alcoy es un proyecto que abarca a todo el término municipal, con el objetivo de convertirlo en un laboratorio de innovación en el que empresas e instituciones puedan desarrollar propuestas o testar soluciones relacionadas con cualquier ámbito en el que exista un desafío urbano específico. En este momento, el consistorio ha firmado ya una docena de convenios marco, la mitad de los cuales se ha materializado en adhesiones para llevar a cabo proyectos específicos.
Por su parte, el alcalde de Alcoy, Toni Francés, ha estado presente en el IV Congreso Nacional de Energías Renovables que ha organizado AVAESEN los días 28 y 29 de enero en el Museo Príncipe Felipe de la Ciudad de Las Artes y de Las Ciencias.
Francés ha participado en la mesa redonda sobre “Retos para la reactivación del mercado de autoconsumo y comunidades energéticas”, en la que ha explicado cómo se están implementando en la ciudad los Pactos Verdes Locales en el contexto del programa europeo Intelligent Cities Challenge. En concreto, el alcalde ha destacado el proyecto de la Comunidad Energética Local del Polígono Cotes Altes y cómo esta se ha convertido en una herramienta para impulsar la competitividad empresarial y contribuir, al mismo tiempo, a mejorar la sostenibilidad social y ambiental.
El alcalde ha recordado que las empresas que forman parte de la CEL se han comprometido a destinar un porcentaje del excedente de energía producida a famílias en situación de pobreza energética y ha manifestado que “no podemos hablar de sostenibilidad sin atender el componente social, y esta iniciativa demuestra que es posible combinar desarrollo económico con justicia energética, asegurando que nadie se quede atrás.»