El Ayuntamiento de Petrer, a través de la concejalía de Medio Ambiente, ha querido poner en valor el tronco del emblemático pino de Ferrusa que se desplomó a principios de verano del pasado año.
El objetivo de esta actuación es que, una vez desaparecido el árbol, permanezca in situ el tronco de un árbol que ha sido emblemático para la población de Petrer, tanto por su longevidad como por la cantidad de generaciones que han disfrutado al cobijo de su sombra en los días de Pascua.
Cabe recordar que se trataba de un árbol con más de 150 años de antigüedad, más de 20 metros de altura y más de 3,5 metros de diámetro de tronco, un ejemplar que formaba parte del Catálogo Municipal de Árboles Monumentales de Interés Local. Este pino era uno de los ejemplares más reconocidos y con mayor historia de Petrer. Además, tenía un gran valor sentimental para los vecinos de la comarca, siendo un punto de reunión tradicional para comer la típica “mona” de Pascua.
Para su puesta en valor y recuerdo, se ha ubicado el fuste principal del tronco sobre una plataforma elevada situada a escasos metros de donde estaba ubicado el árbol, llevándose a cabo, posteriormente, labores de descortezado del fuste para dotarle de mayor vistosidad. Este trabajo de desplazamiento ha requerido de la participación de dos grúas de gran tonelaje por el peso y dimensiones del tronco.
Está previsto que, en el mismo lugar donde antes estaba plantado el pino, se lleve a cabo la plantación de un nuevo árbol de una especie adecuada al entorno.