La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.
La Universidad de Alicante (UA) y PreZero, empresa que explota como concesionaria el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos del Consorcio Terra, han renovado recientemente el convenio con para el seguimiento de la avifauna de la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Riu Montnegre.
Esta protección abarca especialmente del camachuelo trompetero, ya que la zona alberga uno de los escasos núcleos reproductores de esta especie en la Comunitat Valenciana. En el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas está clasificado como en peligro de extinción.
Este convenio se renueva cada año con el objetivo de conocer la evolución de diferentes especies de aves con poblaciones reducidas o un estado de conservación desfavorable que habitan en el territorio comprendido en la mencionada ZEPA, que se extiende por los términos municipales de Jijona, Tibi, San Vicente del Raspeig, Mutxamel y Alicante, y que abarca una superficie de 3.844 ha, por lo que el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos se encuentra ubicado en este espacio natural protegido.
De hecho, el seguimiento de una de las especies más escasas, el camachuelo trompetero, se viene realizando desde el inicio de la actividad de las instalaciones de tratamiento y valorización de residuos de Jijona, en el año 2003, por requisito de la Declaración de Impacto Ambiental vinculada a la autorización ambiental de la planta, es decir, seis años antes de la declaración de la ZEPA Riu Montnegre, en junio de 2009.
Por lo tanto, el reconocimiento de este territorio como ZEPA es en gran parte gracias al seguimiento realizado desde el principio de forma conjunta entre los anteriores titulares de la planta y la Universidad de Alicante. Y es en 2009, cuando se declara la ZEPA, y también por estas fechas se formaliza el convenio de colaboración con el Departamento de Ecología de la UA, que se mantiene a día de hoy con el actual propietario, el Consorcio Terra, y el concesionario de la explotación, PreZero, tras resultar adjudicatario.
Esta declaración de impacto ambiental estableció que dentro del Programa de Vigilancia Ambiental “deberá realizarse un seguimiento del impacto ambiental del proyecto sobre las comunidades vegetales gipsícolas que constituyen el hábitat del camachuelo trompetero, así como la evolución de la población de dicha especie en la zona tomando si fuese necesario medidas correctoras o compensatorias adicionales”. Asimismo, recientemente la Conselleria indica la necesidad de incorporar nuevas medidas correctoras y compensatorias que permitan recuperar la población de camachuelo trompetero y evaluar la afección a otros paseriformes.
En el marco de las sucesivas directivas europeas relativas a la conservación de aves silvestres se han de declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen una fracción del territorio necesaria para preservar, mantener o restablecer una diversidad y una superficie suficiente de hábitat para todas las especies de aves contempladas en el Anexo I de la Directiva Aves 2009/147/CE.
Tal como explica el director del proyecto, Germán López, profesor de la UA, “antes de construirse la planta ya nos empezaron a financiar el seguimiento de la población de camachuelo trompetero, especie que se desconocía que criaba en Alicante y cuya presencia en la provincia descubrió nuestro equipo. Cuando se declara la ZEPA la planta ya llevaba funcionando seis años”.
“En un principio, se hacía solo seguimiento del camachuelo trompetero pero, en 2022, la Conselleria pide ampliar el seguimiento a otras especies de interés como el roquero solitario, la curruca rabilarga, la collalba negra, la collalba rubia o el alzacola rojizo, este último también catalogado en peligro de extinción a nivel autonómico. A estas especies hemos añadido el alcaudón común debido al importante declive que ha experimentado”, puntualiza el investigador principal del proyecto.
“Gracias a estas medidas se ha mitigado el descenso del número de individuos de camachuelo trompetero y estamos logrando su conservación, haciendo un seguimiento especialmente en la época reproductora. Asimismo, estudiamos la floración y la fructificación de las plantas de la que se alimenta, como el esparto, lo que nos ha permitido comprobar el mencionado impacto de las sequías sobre la especie, ya que en esos episodios se quedan prácticamente sin comida. Por ello, aseguramos también su nutrición con la alimentación suplementaria que les procuramos con los comederos instalados en la ZEPA”, matiza López.