Puro arte, Pepa, María y Gemma García Maciá son tres hermanas sopranos lírico que hace alrededor de trece años quisieron unirse todavía más para “hacer lo que llevábamos toda la vida haciendo, ¡cantar juntas!”. Crearon entonces ‘Unbeldí Música, Sopranos & Sisters’, en honor a la famosísima aria de la ópera ‘Madama Butterfly’ de Giacomo Puccini.
“Con ella, que se podría traducir como ‘un bello día’, nuestra madre nos mecía, para que nos durmiéramos”, rememoran, melancólicas. No había mejor nombre para escoger en este proyecto artístico en común, del que nos cuentan, con cierto tono de humor, numerosos detalles, incluidas anécdotas propias de la actuación.
Sobre el escenario, siempre que es posible, les gusta hacer disfrutar al público, ‘jugar’ con esa mencionada comicidad, tan propia de las hermanas. “Somos tragicómicas, diría”, apunta María. “Lo tenemos muy ensayado”, matizan las otras dos, “incluso el disimulo de nuestros enfados”.
El canto, su pasión
Sus voces, dulces y potentes, nos transmiten todo lo que la música conmueve, es decir, serenidad, alegría, melancolía o pasión, pues el canto es su profesión, pero igualmente su vida. “La música es el lenguaje universal”, manifiestan.
Ya su abuelo materno, Fausto Maciá, tocaba como pocos la guitarra, enseñando a manejarla a la gente de Crevillent. Mientras, su padre (Demetrio García Miralles) cantaba el Septenario en Semana Santa con su voz blanca.
Sin duda, remarcan, “en casa la música formaba parte de nuestra vida cotidiana: en cada reunión, en cada fiesta, cantábamos todos…” Ahora, nos avanzan, ofrecen espectáculos a medida de lo que les soliciten, aunque su punto fuerte es la zarzuela y, por supuesto, la ópera.
¿Cómo fue vuestra infancia, tan musical?
Pepa García Maciá (PG) – Para nosotras fue muy normal, pues vivimos la música casi antes de nacer, al descender de una familia de cantantes amateurs, en el seno del coro. Nuestros padres cantaban, así como nuestros tíos, primos y demás familiares.
Lo habitual era que se cantase en casa, no comprendíamos del todo que no se hiciera en otros hogares.
María García Maciá (MG) – Recuerdo que pasábamos infinidad de horas en los ensayos, ya fueran nuestros -en la coral- o de nuestra madre, miembro destacadísimo de la Coral Crevillentina.
Sin olvidarnos de Deme, vuestro hermano.
PG – Por supuesto, él ha cantado toda la vida con nosotras, cuando comenzábamos de la mano de nuestros abuelos, en casa y en los coros. Sigue tocando la guitarra, con muchísimo talento.
¿Cuándo y por qué surgió ‘Unbeldí Música, Sopranos & Sisters’?
Gemma García Maciá (GG) – Fue un poco poner un nombre formal a lo que veníamos haciendo desde años atrás, o sea, cantar juntas. También lo hacíamos por separado, como ahora, pero quisimos poner en marcha un proyecto entre las tres, aproximadamente a lo largo de 2012.
MG – Quisimos igualmente sacarle partido a algo que era común entre nosotras, pues ya cantábamos de un modo espontáneo siempre que nos requerían.
«Gemma nos da ese punto de frescura, no solo por ser la más joven, sino porque estudió una disciplina diferente» P. García
Vuestras actuaciones tienen su parte cómica.
PG – Depende, obviamente, porque hay estilos musicales que dan pie a un tipo de show más humorístico, mientras otros -los más religiosos, por ejemplo-, no. Sí es verdad que nos gusta esa vis cómica, siempre que la podamos demostrar. Nos sale sola, no la buscamos, está relacionada con nuestra manera de ser.
GG – La ensayamos, claro está, aportando nuestro toque en la interpretación.
¿Qué aporta cada una de vosotras a Unbeldí?
PG – Somos una familia de echarnos pocas flores, dicho queda. No obstante, Gemma nos da ese punto de frescura, no únicamente por ser la más joven, sino porque estudió una disciplina diferente, Arte Dramático Musical. Debido a que María y yo somos de conservatorio clásico (canto lírico), el suyo es un punto distinto, más singular.
GG – María posiblemente es la más tirada para delante de las tres, como se suele decir. Se le ocurren las ideas más ‘locas’ -para lo bueno y lo malo-, que luego consensuamos las tres.
MG – Pepa, la más mayor de las tres, es la más moderada, en todos los aspectos, dándonos desde la calma ese punto de equilibrio y templanza.
«A María posiblemente se le ocurren las ideas más ‘locas’, para lo bueno y lo malo, que luego consensuamos las tres» G. García
¿Pepa ejerce de hermana mayor, de líder, u os deja igualmente brillar?
MG – Cada una de nosotras es líder en nuestra manera de ser. Somos las tres voces cantantes, y en según qué momentos manda más una u otra. Y como buenas hermanas, nos enfadamos y desenfadamos continuamente, es nuestro día a día.
¿Cuáles son las dificultades de empastar tres voces tan parecidas?
PG – La de Gemma es la más diferente, sobre todo por su formación. Pero al ser hermanas tenemos una virtud que otros no poseen, pues no hemos tenido que trabajar para que nuestras voces empasten.
Asimismo, en ocasiones personas que nos conocen mucho nos escuchan cantar y no saben descifrar quién está haciendo cada una de las tres voces. Nos mimetizamos tanto, son tan parecidas y empastan tan bien, que son incapaces de identificarnos.
GG – La genética hace que nuestras voces sean muy similares, nos viene de nacimiento. Hablando a veces también nos confunden.
Sin embargo, cuando cantamos siempre hay una voz que es la primera, que debe sonar más que las demás. Eso se ensaya, y mucho, por supuesto.
«Pepa es la más moderada, en todos los aspectos, dándonos desde la calma ese punto de equilibrio y templanza» M. García
Precisamente, con una agenda tan apretada, ¿cuándo ensayáis?
GG – ¡Nos adaptamos y apañamos! Nuestra profesión va de eso, de encajar ensayos, como le pasa a los actores y actrices.
MG – Ahora, además, debemos llevar nuestros hijos a los ensayos y todo se complica un poco más. Unbeldí nació también un poco con la idea de inventarnos el trabajo, para poder vivir de lo nuestro, de un proyecto propio, diferente, porque son mínimos los cantantes o artistas que reciben propuestas continuamente.
La precariedad en el mundo artístico es inaceptable. Somos nosotras las que nos producimos, las que nos buscamos las actuaciones, el repertorio, el vestuario…
Un orgullo más para vuestros familiares.
GG – No lo hacemos por eso, ni mucho menos, porque como avanzaba Pepa, en casa no somos de halagarnos. Mi madre claro que es fan nuestro, sin manifestarlo a veces. Pero es normal, son generaciones muy distintas a las actuales.
«Personas que nos conocen mucho nos escuchan cantar y desconocen quién está haciendo cada una de las tres voces» P. García
¿Con el paso de los años varía el tono de voz?
PG – Se supone que, con la edad, cambia, igual que lo hace el cuerpo. Lo iremos comprobamos con el tiempo -debería ir hacía un tono más grave, bajando de tesitura- pero todavía no ha sucedido.
Todo depende del repertorio que puedas abarcar. Gemma es más ligera que María o yo, cuenta con una voz un poco más fina, aunque igualmente es lírico ligera. Además, a ella, por donde estudió, no se le encasilló en los términos clásicos: trabaja la voz desde otra técnica.
MG – Cada vez soy más lirico, por una cuestión de edad, como expresaba Pepa. Antes, hace veinte años, era más lírico ligera.
Anécdotas os habrán pasado muchas.
PG – Uff, infinidad (ríen). Siempre pasan cosas, como olvidarnos de una parte, sufrir lo que se dice un ‘blanco’: es muy común, ensayes el tiempo que ensayes.
GG – Recientemente, durante una actuación en Petrer, en un momento simulamos que María y yo -nuestros personajes- se pelean, mientras el de Pepa hace de mediadora. En un instante me eché a llorar, abrazada a ella, y nos quedamos enganchadas, ¡mi pelo con su micrófono!
Nos reímos, igual que el resto de los espectadores. Es hasta bonito, brinda naturalidad y frescura al show. Como cuando te emocionas y te rompes un poco…
«Unbeldí nació un poco con la idea de inventarnos el trabajo, para poder vivir de lo nuestro, de un proyecto propio» M. García
¿El público se dio cuenta?
PG – Claro, tuvimos que parar incluso, porque luego me tocaba cantar. Pero en muchas ocasiones no aprecian nada, o lo intentamos resolver por medio del humor.
Otra vez teníamos una coreografía, de girar a la derecha o izquierda, y María hizo lo opuesto a nosotras. O momentos de risa ‘tonta’, de no poder parar, y realmente lo pasas mal, porque no podíamos cantar.
¿Tienes alguna más, María?
MG – Teníamos una grabación y literalmente me había quedado sin voz, estaba afónica. No era posible cancelarlo y Pepa -cuya voz es tan similar a la mía- tuvo que cantar por mí.
En los posteriores montajes de vídeo estamos las tres, pero realmente sonaron dos voces, conmigo simulando el playback. Los más conocidos lo descubrieron al momento y todavía nos lo recuerdan.
«El primer concierto en Dinamarca fue muy especial, también por el público, era distinto, hasta tenían otra manera de aplaudir» G. García
¿Consideráis alguno como vuestro mejor concierto?
PG – Nuestro primer viaje y concierto a Dinamarca, en el año 2019, fue el más especial, por todo, cómo nos trataron, lo que representó para las tres, el concierto en sí, maravilloso.
GG – No fue solo porque fuera en el extranjero. También el público era distinto, con otro carácter y hasta otra manera de aplaudir, un ritmo diferente. Cantamos canciones de ópera, muy populares, pero después música más española, y les fascinó.
MG – Desde hace unos años, sobre todo tras la pandemia, solemos ensayar -siempre que tenemos un concierto nuevo- en la residencia de ancianos. Ese instante sí es especial de verdad, porque ellos, con una vida tan rutinaria, lo viven con una emoción tan grande…
Hemos ido dos veces, la primera con repertorio de zarzuela, y cantaban fuerte, a viva voz, con nosotras encantadísimas. ¡Fue sumamente emotivo!
¿Cuándo serán vuestras próximas citas?
PG – Una vez finalizadas las vacaciones de agosto, en septiembre empezaremos a preparar la próxima temporada y tendremos varios eventos privados, para ceremonias como conmemoraciones, bodas o presentaciones de libros.
Seguidamente, el 3 de octubre cantaremos Unbeldí de Fetén ‘Zarzuela a tres voces’, en el Auditorio Municipal de La Alberca (Murcia). Se trata del mismo concierto que tanto gustó en Petrer. Están también en marcha otros proyectos secretos, sin fecha todavía de estreno, previstos para antes de finalizar el año.