Entrevista > Isabel Martí Chuliá / Directora artística del Grup de Danses del Portixol (Xàtiva, 3-junio-1961)
Los tiempos cambian y las modas también. Sin embargo, la tradición no es sólo nostalgia, es una pasión muy arraigada en nuestras raíces como pueblo, a nivel local, regional o incluso nacional. El Grup de Danses del Portixol es un vivo ejemplo de cómo mantener vivas las tradiciones. Isabel Martí, nos cuenta de qué forma se mantiene viva una actividad que desarrollan desde la década de 1940.
¿Cómo definirías al Grup de Danses del Portixol?
Está consolidado como una asociación que se dedica a la música, a la cultura y, en general, a todo lo relacionado con las tradiciones de Xàbia, la comarca y la Comunitat Valenciana.
Se funda en 1989, pero sus raíces son mucho más antiguas. ¿Cuándo se sitúan los orígenes del grupo y qué tipo de actividades realizaban entonces?
Oficialmente nos formamos en 1989, pero ya existíamos como Coros y Danzas de Xàbia. Marcamos 1982 como fecha de inicio, aunque hay documentación gráfica y oral que demuestra que en 1940 ya se bailaban danzas aquí. Incluso anteriormente, los bailes rituales ya se practicaban. Hablo del baile de vetes, la danza de pastorets, folies del Portitxol y baile de contes de Xàbia.
¿De qué forma habéis trabajado para recuperar bailes y melodías tradicionales?
Empezamos con nuestros bailes y, a través de entrevistas, conversaciones y visitas a antiguos miembros del grupo y músicos, hemos recuperado otros bailes de Xàbia y la comarca. Esto se plasmó en un disco hace unos años, entre 2018 y 2019, para preservar ese legado.
«Hemos ido guardando información para reconstruir y distribuir nuestras tradiciones»
En sus inicios, el grupo no tenía la intención de mantener tradiciones, sino que simplemente practicaba los bailes de moda. ¿Cómo era ese ambiente en los años 40 y 50C?
Durante los años 40 no había que mantener nada, eran las tradiciones del momento. Era un grupo de baile, sin más. La moda, el entretenimiento de la época, como ahora existen otros estilos musicales.
¿Dónde solían bailar en aquellos tiempos y cómo habéis recuperado esa tradición en les danses al Carrer Nou?
No bailaban les danses al Carrer Nou. Bailaban en la calle, en el Carrer dels Oms. Gracias a la información de músicos como Juan Bautista Bou y antiguos bailadores, pudimos restaurar los pasos y melodías para bailar este baile también. A partir de 1989, empezamos a investigar y restaurar.
Aún contáis con miembros que formaban parte del grupo antes de la fundación estatutaria. ¿Cómo contribuyen estas personas al grupo?
Tenemos personas que han estado en el grupo desde los años 40, 50 y 60. Aunque la edad a veces no les permite participar en todas las actividades, siguen activos. Por ejemplo, Gaspar, nuestro percusionista de instrumentos tradicionales, tiene más de ochenta años y sigue ensayando con nosotros.
«Hay documentación gráfica y oral que demuestra que en 1940 aquí ya se bailaban danzas»
Además de preservar las tradiciones, también se difunden fuera de Xàbia. ¿Qué os impulsa a viajar y mostrar el folclore local en otros lugares?
Hemos ido guardando información para reconstruir y distribuir nuestras tradiciones. Nos hemos dado cuenta de que toda la información es valiosa. Restauramos dichas tradiciones a nuestra manera, ya que no hemos vivido lo que vivieron las generaciones anteriores.
¿Cómo se logra atraer a los jóvenes a participar en actividades que pueden parecer anticuadas en comparación con las tendencias modernas?
No es fácil atraer a los jóvenes. Hay que trabajarlo como un juego y explicarles que, si no conservamos lo nuestro, no seremos nada. Vamos a los colegios para incluir estas actividades en el programa curricular. Les explicamos que junto con nuestros bailes va la lengua, la música, el juego, la tradición y la indumentaria.
¿Qué tipo de actividades realizáis con ellos?
La fiesta más grande es Les Danses del Corpus. Vamos a las reuniones de las familias para explicar lo que vamos a hacer en el último trimestre. Este año, participaron casi trescientos niños de cuatro colegios. El objetivo es que todos los niños conozcan, respeten y valoren la tradición.
«Nuestro percusionista de instrumentos tradicionales tiene más de ochenta años y sigue ensayando con nosotros»
¿Crees que este mensaje de mantener las tradiciones está calando también en los adultos?
Cuesta, pero vemos que las familias reconocen el trabajo laborioso que hay detrás de actividades como el Corpus. Muchos tutores, que ya bailaron estos bailes en su día, animan a los alumnos a participar.
Además del 9 de octubre, ¿qué otras fechas son importantes para la transmisión de la tradición en Xàbia?
En Xàbia, la Pascua es muy importante. Hacemos una muestra de bailes en la Fira d’artesania. También organizamos unas jornadas en septiembre llamadas Tradidances, con conferencias y talleres de baile, percusión y dolçaina. Y, por supuesto, les Danses del Carrer Nou son una cita ineludible.
¿De qué forma animarías a conectar con las tradiciones locales?
El baile saca lo mejor de ti, muestra tus capacidades interiores y ofrece salud. Bailamos en grupo, nos ayudamos unos a los otros y trabajamos valores importantes para la vida diaria. Si alguien quiere potenciar estos valores en su vida, el Grup de Danses del Portitxol está abierto a todo el mundo y a todas las edades.