Entrevista > Cristóbal Llorens / Concejal de Fiestas de La Nucía (La Nucía, 25-octubre-1966)
Aunque el calendario festero de La Nucía se extiende durante todo el año, es en agosto cuando el municipio se transforma y estalla en celebración. Les Festes d’Agost, aunque no son las patronales, se han consolidado como las más esperadas, multitudinarias y dinámicas del año.
La Nucía tiene un amplísimo calendario festero que abarca todo el año, pero es en estas fiestas donde todo el colectivo, incluida la propia concejalía, echa el resto.
Así es. Estas fiestas, aunque no son las patronales, son las fiestas más grandes y populares y las que todas las peñas y peñistas están esperando a que lleguen para poder disfrutar de ellas.
Los mayorales de la Peña El Cuc han hecho eventos durante el año para recoger dinero y ya lo tienen todo cerrado y organizado para que puedan empezar las fiestas… de hecho, ya hemos empezado, porque aquí, a partir del mes de julio, todas las semanas tenemos algún evento.
Empezamos con el Mercado Medieval y a partir de ahí fueron llegando la cena de la reina, la presentación del libro, la presentación de la reina con su corte de honor, la coronación…
«Cada año viene más gente y las fiestas crecen en participación»
Comenta Rosa Cano en este mismo número de AQUÍ en La Nucía que está muy satisfecha con la respuesta que han tenido los mayorales en todas esas actividades organizadas a lo largo del año no sólo por parte de los nucieros, sino también de vecinos de otros municipios de la zona. ¿Crees que eso es también un síntoma del crecimiento de las fiestas?
Es verdad que cada año viene más gente a las fiestas de La Nucía. Cada vez son más grandes y nos vamos superando. Pero eso también depende de los mayorales y este año, la peña El Cuc ha hecho un grandísimo trabajo.
Además, han nombrado muchos mayorales de honor y es una peña que se relaciona con mucha gente de otros municipios. Eso ha hecho que todos los eventos que han organizado hayan ido de maravilla.
Hace ya algunos veranos que no se puede lanzar el castillo de fuegos artificiales por el riesgo de incendio. ¿Habéis renunciado ya para siempre a ese acto?
Todo depende de la climatología. Hay años que hemos tenido que prescindir de las mascletàs y del castillo porque había decretada alguna emergencia y no se podían disparar.
Pero las fiestas de La Nucía tienen muchísimas más cosas más allá de la pólvora como puede ser la cabalgata multicolor, la ofrenda, la entrada de peñas…
También parece que cada año los veranos son un poco más calurosos. ¿Te preocupa que a la larga eso pueda acabar provocando que la gente deje de participar en algunos actos concretos?
Es verdad que cada año hace más calor y hay eventos en los que se participa con mayor dificultad porque ese calor tan intenso es molesto. En todo caso, te tengo que decir que desde que está la Asociación de Peñas en marcha, la gente participa muchísimo más en los actos.
Habíamos llegado a un punto en el que los peñistas ‘pasaban’ un poco de los actos y se había generado otra cultura de la fiesta que no era la de antaño. Eso provocó que la participación en la cabalgata o en la entrada de peñas se quedase un poco corta.
Pero desde que está la asociación, como es una entidad formada por los propios peñistas, se ha incentivado la participación en todos los actos.
«Ya somos casi 1.200 festeros inscritos en la Asociación»
¿Y eso se ha traducido también en un aumento del colectivo festero?
Este año, gracias de nuevo al gran trabajo de la Asociación de Peñas, hemos crecido en más de un centenar de asociados. Ya somos casi 1.200 festeros inscritos.
Gran parte de ese crecimiento ha llegado, además, porque habéis conseguido involucrar a los vecinos de las urbanizaciones, que antes veían les Festes d’Agost como algo muy del pueblo. Este año, por ejemplo, volvéis a poner en marcha el Tramabús.
Siempre que se organiza un evento por parte de los mayorales se pone ese transporte a disposición de toda la gente que venga a la fiesta, para poder después trasladarlos a sus domicilios y que no tengan que coger ningún vehículo. Todo eso la gente lo agradece y el autobús suele bajar lleno.
Como concejal de Fiestas, ¿unas fiestas se sufren o se disfrutan?
A ver, las fiestas siempre se disfrutan. Lo que pasa que estando de concejal tienes una responsabilidad y no las disfrutas igual. Estás pendiente de todos los actos, de que no pase nada y claro, todo eso hace que tengas que frenar un poco el ritmo de festejo.
«El Casal Fester estará listo para las fiestas de 2027»
¿Qué acto te hace sufrir más y, a la vez, el que más te permite disfrutar?
Cuando hay algún riesgo de por medio, como es la pólvora, siempre se sufre un poco. También por las noches, en los conciertos.
Después, por supuesto, hay muchos en los que disfrutas. La cabalgata, por ejemplo, es un acto donde toda la gente que participa, como no es un desfile serio, disfruta muchísimo, yo incluido. Y después, el día a día de las fiestas, por la mañana, la cervecita, la peña, los actos que hay por el día, todo eso, indudablemente, lo disfrutas.
¿Cuál es tu primer recuerdo de unas fiestas?
Soy festero desde que nací. Tengo 59 años y he salido todos los años a las fiestas. Los recuerdos de antes son más bonitos porque la gente tenía otra cultura de la fiesta. Nosotros, dos meses antes, ya estábamos juntándonos en la peña, haciendo carrozas, mirando con quién salíamos a la ofrenda.
Disfrutábamos la fiesta de otra manera. Ahora mismo la gente joven quiere música y divertirse y la tradición la dejan un poco de lado. Por eso se creó la Asociación de Peñas.
¿En qué fase está ese proyecto de creación del Casal Fester y Museo Etnológico?
Justamente ahora estamos en ello. Ya se han empezado a hacer los proyectos y tenemos la subvención desde Diputación y, si no pasa nada, cuando pase el verano empezarán ya las obras. Así, para las fiestas de 2027 estarán acabadas seguro.