Entrevista > Saray Cerro / Humorista (Alcoy, 18-septiembre-1994)
TVE realizó el pasado otoño una fuerte apuesta por su prime time al fichar a David Broncano y su equipo de ‘La Resistencia’, rebautizándola a partir de entonces como ‘La Revuelta’. El resultado fue más que satisfactorio, como constataron las buenas audiencias.
Una alcoyana, la polifacética Saray Cerro, gozó de cierto protagonismo. “Hacía de inquilina de un zulo, un reflejo de lo que sucede en miles de ocasiones”, lamenta. Todavía no ha aparecido en esta segunda temporada, “esperemos lo haga pronto”.
Auténtica todoterreno, Saray también colabora en ‘Todo es mentira’, de Cuatro, y ha participado en dos videoclips de ‘La Fúmiga’. Sin duda, está en un excelente momento, “no el mejor, porque ése todavía tiene que llegar”.
¿Cómo se produjo tu fichaje por ‘La Revuelta’?
Pablo Irarburu, cómico habitual del programa, centró parte de su sección sobre el problema de la vivienda en España y quiso introducir a una inquilina.
Se plantearon varios nombres de actrices cómicas y entre ellos surgió el mío, también porque hemos actuado juntos y me han visto sobre el escenario.
Explícanos cuál era tu papel.
De una forma sátira hacemos una denuncia sobre la situación de la vivienda, desproporcionada en ciudades como Madrid, Barcelona o València. Soy una chica que intenta vivir en la capital, pagando mucho por un sitio pequeño, en malas condiciones…
«’La Revuelta’ es un programa fresco, divertido, en el que hay muchísima complicidad entre todos»
¿Un reflejo de la realidad?
Sin duda, es verdaderamente preocupante, sobre todo porque es un asunto que se está normalizando ya en otras zonas.
¿Qué nos puedes desvelar del propio programa?
Es tal cual lo vemos. Se trata de un programa fresco, divertido, en el que hay muchísima complicidad entre todos, estamos ‘jugando’ constantemente, siempre a favor. Dentro hay un grandísimo equipo, con ganas de pasárselo bien, como se transmite en pantalla.
Hay mucha naturalidad, algo que por otro lado es arriesgado, porque puede salir muy mal… Afortunadamente casi siempre sale bien.
¿Quién o qué te ha sorprendido más?
Todo, eso es lo guay, porque a veces cuando trabajas en este sector tienes miedo que no sean iguales, que haya muchos egos. En ‘La Revuelta’ eso no pasa y cada vez que he salido (actuado) ha sido un regalo, todos son super amables y es un sueño.
¿Cómo son Grison, el propio David Broncano y los demás?
Igual como los vemos en televisión, repito. A todos les tengo un cariño enorme; Lala Chus me ha confirmado que es una compañera increíble. Conecto mucho con ella, porque lo hace todo super sencillo.
David es extremadamente divertido, siempre quiere ‘jugar’ y darme la oportunidad durante varias semanas, demuestra su generosidad.
«Les tengo un cariño enorme a todos; Lala Chus me ha confirmado que es una compañera increíble»
¿Improvisabais entre vosotros?
Tenemos una base de lo que queremos contar, pero después nunca sabes por dónde puede salir David (Broncano). Es divertirte en directo, a ver hasta dónde te llevan.
Gusta muchísimo su rapidez mental.
¡Es espectacular!, la de Marcos (Grison), Ricardo Castella, David y el resto. Al final todos son excelentes cómicos y se nota, muchísimo. Si alguien hace que algo tan difícil parezca tan fácil…
¿Vas salir en esta segunda temporada?
Todavía no lo sé, espero que sí. Es una aventura y siempre que me llamen acudiré, lo tengo clarísimo. Hay, no obstante, muchos factores, como el contenido del programa y los invitados. Pasa muchísima gente por ‘La Revuelta’ y resulta complicado armar un programa así.
Además, tu papel depende de Pablo Irarburu.
Mis primeras apariciones sí, porque él me había alquilado la estancia, pero después ya no, pensaron que la inquilina podía tener más autonomía o recorrido. Salí entonces con Lala o algún invitado, como Javier Coronas.
«Mi casa la tengo en València, pero son tantos los trenes que tomo semanalmente que parece que viva en Renfe»
¿Qué más has hecho en el último año?
Además de estar en ‘Todo es mentira’, he comenzado en ‘Està passant’, de TV3, empleando por el momento mi acento, aunque imagino que se me acabará pegando (ríe).
También he actuado en dos videoclips de ‘La Fúmiga’, -‘La casa plena’ y ‘La penúltima’-, locuto audiolibros, hago publicidad, continúo formándome en doblaje y sigo girando con mi monólogo ‘Qué desastre’. Quiero empezar a preparar el siguiente pronto.
¿Tienes más horas que los demás?
(Ríe). La cuestión es que soy autónoma, es decir, debo sacar tiempo de debajo las piedras. Sí tomo muchísimos trenes, entre Barcelona, Madrid y València.
Esta profesión es tan inestable que cuando hay trabajo no podemos desaprovecharlo, luego hay temporadas de parón.
¿Te has instalado en Madrid?
Mi casa, con mi perro, mi pareja y mis cosas está en València, aunque tengo una habitación en Madrid y cojo tantos trenes que parece que vivo en Renfe.
Estás en un momento magnífico.
Si hace un año me dicen que iba a trabajar con gente a la que tanto admiro no me lo hubiera creído. Soy muy currante y la vida también da muchas vueltas.