Entrevista > Sandra Ferrández Penalva / Cantante
Tras más de tres meses de cierre por la pandemia, este verano el Teatro Real de Madrid alzó el telón con la función La Traviata de Giuseppe Verdi de la que formó parte la mezzosoprano crevillentina Sandra Ferrández, quien interpretó a Flora Bervoix.
Destacada por la crítica, durante su trayectoria profesional ha recibido numerosos premios. Entre ellos el Premio Ópera Actual junto a Jaume Aragall o el Primer premio de Juventudes Musicales de España.
«Volver a pisar el escenario fue volver a sentirme ‘artista’»
¿Cómo fue volver a pisar el escenario tras los meses de parón por la pandemia?
Con una emoción inexplicable, cada noche fue mágica. Fue volver a sentirme ‘artista’. Es muy importante para nosotros sentir el apoyo del público. Por ello, incidimos en que el teatro es un lugar seguro, donde se respetan todas y cada una de las medidas de seguridad, antes, durante y después de la función.
«Tengo grabaciones desde que tenía dos años y medio»
¿Cuándo te diste cuenta de tu vocación por la música?
Lo tuve muy claro desde siempre, desde que era muy pequeña. Tengo grabaciones desde que tenía dos años y medio. Recuerdo que en verano, cuando no había colegio por la tarde, me las pasaba enteras cantando en el portal de casa de mis padres, pensando que alguien me iba a contratar. Lo mío es muy vocacional.
La lírica no es precisamente uno de los géneros musicales más frecuentes en la actualidad, ¿por qué este género?
No lo es porque no se educa desde ahí, pero debería serlo. Tenemos que empezar desde ya a diferenciar la cultura del entretenimiento. Es necesario que nuestro género se lleve a los colegios.
En mi caso fue porque desde pequeña canté en el Orfeón Euterpe, que luego fue Voces Crevillentinas. Crevillent es una ciudad con una cantera de voces maravillosas que tenemos que seguir cuidando y ayudando siempre.
Tras tu paso por el Conservatorio Superior de Música Joaquín Rodrigo de Valencia llegó tu debut artístico con Giulietta de Los Cuentos de Hoffmann, ¿qué queda de aquella joven?
Esta oportunidad fue en Valencia en uno de los talleres que se organizaban en el Palau de la Música. Nos formaban en todos los ámbitos los mejores profesores: vocalmente, musical y actoral. Aprendí muchísimo, como a caminar por un escenario, por ejemplo.
En Valencia me di a conocer con ese título y de ahí me surgieron varias oportunidades de trabajo. De aquella Sandra queda el amor por mi trabajo, la pasión y el deseo de seguir aprendiendo.
Y avanzas hasta que llegas a sustituir nada más que a Montserrat Caballé…
Sí, fue en la ópera Le Roy d’ys que se organizó en el Palacio de los Reyes de Mallorca, en Perpiñán, haciendo el rol de Margared. Me dejó su partitura con muchos trucos que guardo con muchísimo cariño. Es una ópera maravillosa, que canté junto a unos compañeros estupendos. Nunca lo olvidaré.
«He disfrutado cada derrota y cada éxito»
Desde entonces posees una brillante trayectoria llena de premios y distinciones. ¿Te ha sido fácil?
No me ha sido fácil, pero lo he disfrutado. He disfrutado cada derrota y cada éxito, intentando aprender cada día los ‘por qué’ de esta profesión y a día de hoy aún no los he encontrado. Las dificultades las sigo teniendo cada día y van cambiando según cambian las circunstancias.
En nuestra profesión existe la parte técnica, donde hemos de ser atletas y estar preparados cada día para salir a correr, y después está la parte del trabajo, la parte práctica en la que me ayuda mi agente.
Un momento a destacar.
Sin duda, este es el momento de mi carrera porque me siento plena, me siento bien, conozco mi voz, mi instrumento y mi cuerpo. Sé lo que quiero hacer y cómo quiero hacerlo, sin dejar de buscar y de intentar llevarlo a cabo cada día de mi vida. Sigo descubriendo cosas nuevas de mi voz y mejores maneras de hacer.
¿En qué proyectos estás trabajando actualmente?
Debido a la covid-19 he sufrido cancelaciones, entonces preparo mis próximos proyectos: Maddalena de Rigoletto en el Teatro Cervantes de Málaga y Paloma del Barberillo de Lavapiés en el Palau de les Arts Reina Sofía de Valencia. A la vez estoy trabajando varias de otros títulos, oratorios y disfrutando mucho la parte actoral con actores y cursos de arte dramático.
Sindicato de Artistas Líricos de España (ALE)
Impulsado por Luis Cansino, Sandra Ferrández, Javier Franco, Federico Figueroa y Emilio López surge ALE, con el objetivo de solicitar medidas básicas de choque que ayuden a compensar el daño económico que los artistas están sufriendo por el cierre de los escenarios, medio natural de trabajo de miles de personas que representan la cuarta industria de nuestro país.
Por ahora, entre sus diferentes logros se encuentra la declaración de la cultura como Bien Esencial ante el Senado, sin abandonar su objetivo de conseguir que el Congreso lo declare Bien de Primera Necesidad.