Entrevista > Judith Samper Albero / Especialista en Realidad Virtual (Villena, 29-abril-1980)
Hace siete años se trasladó a Estados Unidos para buscar un mayor reconocimiento de su trabajo. Desde entonces Judith Samper, especialista en realidad virtual, ha realizado más de sesenta proyectos.
Entre ellos se encuentra el documental ‘Ecos de Fuego y Vida. Moros y cristianos: una tradición centenaria’ rodado hace tres años en las fiestas de Moros y Cristianos de Biar y con el que ha sido galardonada en el Festival Internacional de Cine de Chelsea de Nueva York. Además, ha sido seleccionado en el Festival FIVARS de Canadá y en el Golden Valley Global Cinefest de India.
El documental acaba de ser seleccionado en el Golden Valley Global Cinefest de India
¿Cómo valoras todos estos reconocimientos?
Estoy muy contenta de los resultados y atención que el documental está teniendo en estos festivales y en los medios de comunicación. Tuvo una gran acogida en su estreno en España en mayo, pero este premio ha conseguido que más personas se interesen en él. El documental está disponible en español en la web morosycristianos360.com y en Youtube.
«Las fiestas de Moros y Cristianos es algo que llevamos en la sangre y es difícil expresar lo que se siente»
Cuéntanos cómo surgió ‘Ecos de Fuego y Vida’
Como festera de nacimiento que soy, tanto en Villena donde crecí y en Biar de donde son mis padres, las fiestas de Moros y Cristianos es algo que llevamos en la sangre, es una tradición que vivimos desde muy dentro y siempre es difícil expresar lo que se siente y cómo se vive a gente de otras culturas.
De este modo inmersivo, y con la guía de la voz en off en la que yo misma hablo desde un punto de vista muy personal, el espectador es capaz de convertirse en visitante y experimentarla desde dentro.
Un documental rodado hace tres años en 360º… ¿cómo fue el proceso de grabación?
Fue muy interesante porque hasta ese momento las grabaciones en 360º no podían ser tan espontáneas, ya que llevaban un considerable trabajo utilizando seis cámaras u otros formatos de estructuras hechas manualmente. La cámara Samsung Gear VR fue una de las primeras que salió al mercado que permitía una mínima invasión e independencia sin necesidad de llevar un equipo de personas detrás para poder realizar la grabación.
Hay que tener en cuenta que el formato 360º al verlo todo no tiene una opción de zoom como en el formato tradicional, así que el modo de estar ahí es algo invasivo y significa que la cámara tiene que estar justo delante de la acción, sino todo parece muy lejano. Eso me costó la queja de alguno de los cámaras habituales porque mi cámara estaba en su plano, lo cual es de entender, pero al final todos conseguimos nuestra imagen. Todo el pueblo estuvo durante días expectante de qué era esa bola blanca que llevaba en lo alto de un palo.
Samper ha colaborado en proyectos para Disney, Google y la NASA
Especialista en realidad virtual, ¿por qué te iniciaste en este mundo?
Estudiando Bellas Artes descubrí el vídeo arte y esto me llevó a profundizar más en el mundo audiovisual. Tras estudiar posproducción en Londres estuve trabajando varios años en televisión, en Lanzarote. Al llegar a Estados Unidos comencé a interesarme por la fotografía panorámica y al poco tiempo descubrí que podía utilizar mis conocimientos de vídeo junto con los de fotografía panorámica en el vídeo 360º.
Tuve la suerte de que la empresa Koncept VR me contratara en sus inicios, cuando no había expertos en vídeo 360º, porque apenas se estaba empezando. El CEO de esta empresa fue uno de los creadores de las primeras cámaras de vídeo 360º, así que fue un honor y aprendí muchísimo de las construcciones de cámara propias que él inventaba y de todos los trabajos en los que pude colaborar durante esos tres años, donde trabajamos para Disney, Google, la NASA, el Metropolitan Museum, The New York Times y otras conocidas empresas americanas e internacionales.
En la actualidad
Judith Samper está trabajando en la postproducción de una pieza para Embodied Labs, empresa que elabora historias interactivas en vídeos en 360º donde se puede tomar el cuerpo de otra persona para generar empatía. Historias enfocadas a profesionales de la salud porque les permite ponerse, por ejemplo, en el cuerpo de una persona con alzheimer o con parkinson.
También trabaja en una pieza personal basada en una obra de teatro de la directora Lili Whitsitt, sobre Gertrude Stein. Esta obra se presentó hace dos años en Nueva York y los espectadores llevaban auriculares donde podían experimentar una cuarta dimensión de la obra oyendo los pensamientos de la autora mientras escribía, entre otros muchos efectos. Este formato le impresionó tanto que decidió hablar con la directora y juntas crear una versión reducida para la creación de una pieza de 360 grados.