Entrevista > Joan Piera / Presidente de la Junta Rectora del Parc Natural de la Serra Gelada
Joan Piera todavía conserva ademanes del profesor que fue, si es que a un maestro vocacional como él se le puede retirar ese adjetivo sólo por estar jubilado. Lo echa de menos y eso se nota.
Al sentarse, estudia al interlocutor con sus ojos azules como uno imagina que lo haría el primer día de clase en un curso cualquiera, escudriñando qué tiene delante y, sobre todo, cómo llegar a los cerebros de sus alumnos.
Capilla Sixtina de la geología
Este alteano de adopción atesora unos conocimientos tan vastos en el ámbito de nuestro entorno natural más cercano -lo que ha servido para que ocupe el cargo de Presidente de la Junta Rectora del Parc Natural de la Serra Gelada-, que en ocasiones cuesta seguir su ritmo. En su discurso se entrelazan anécdotas, bibliografía para llenar páginas enteras, terminología científica y, sobre todo, pasión. Hablar con Joan Piera es un placer porque siempre se aprende algo, pero como todos los grandes placeres, también exige un esfuerzo.
Tras la declaración como Monumento Natural del afloramiento volcánico de la Cala del Soio, una de las mayores maravillas naturales de la Costa Blanca, AQUÍ en Altea ha recurrido a Piera para entender mejor los motivos de la misma y, sobre todo, qué es aquello que, en la zona del Cap Negret, él mismo califica casi como la Capilla Sixtina de la geología mediterránea.
¿Desde cuando se tiene constancia de la existencia de ese afloramiento volcánico de la Cala del Soio?
Cuando en 1797 José Antonio Cavanilles publica su libro se convierte en el primer informe de esa zona. En él dice que existe un cabo, llamado Negret por el color negro de sus rocas, existiendo cristales de feldespato, de origen volcánico, engastados en una pasta de piedra córnea. Es muy importante porque, insisto, se trata del primer informe de algo que, geológicamente hablando, es único en el Mediterráneo valenciano y español. Es equiparable a ciertos puntos de Cofrentes y a las Islas Columbretes.
«El afloramiento volcánico representa la historia geológica de la ruptura de Pangea hace 225 millones de años»
Además de por ese carácter único, ¿por qué es tan importante?
Representa la historia geológica de la ruptura de Pangea hace 225 millones de años. En ese momento se produjeron fuertes corrientes de convección en sentido opuesto y se separan las placas. Hay podemos datar el origen del Cap Negret. Fue entonces cuando ascendió el magma basáltico que, interaccionando con los iones de la sal marina, formaron una serie de minerales que lo convierten en un lugar, mineralógicamente hablando, único.
Y todo ello, en un área muy pequeña.
Jamás ha habido en tan poco espacio una concentración tan alta de nivel geológico. Estamos hablando, aproximadamente, de 10,2 hectáreas, pero el afloramiento volcánico queda reducido a la Cala del Soio, el Portet, que se edificó, como puede ver cualquier observador, sobre las rocas basálticas negras, y el extremo sur, que es donde todavía queda algún resto.
¿Hablamos únicamente de un afloramiento volcánico o de un conjunto más extenso de muestras de ese pasado tan remoto?
En el mismo sitio encontramos playas fósiles de unos cien mil años en las que se observa claramente la estructura de una playa, con su zona de batida, su zona de fondo. Eso viene a demostrar cambios climáticos naturales.
También sabemos de la existencia de una cueva que, con el paso del tiempo y el efecto de la erosión marina, ya desapareció. Todo este conjunto es, insisto, único.
«En los años 20 se empezaron a sacar adoquines del Cap Negret que se utilizaron en la calle La Mar y en Valencia»
¿Llega muy tarde esta declaración de Monumento Natural en términos de destrucción del entorno?
Si hubiera sido posible la declaración de Monumento Natural en el momento en el que Cavanilles lo describe, se hubiese podido mantener. He podido leer artículos de Luis Fuster en los que relata como en los años 20 del siglo pasado se empezaron a sacar adoquines del Cap Negret que se utilizaron en la calle La Mar y también en Valencia. Adoquines que, con el tiempo, han sido cubiertos por el asfalto.
«Si no se hubiese construido el Portet esto sería la joya de la corona a nivel español y mundial»
Si no se hubiesen retirado esos adoquines y no se hubiese construido ese puerto, con muy poco aprovechamiento, esto sería la joya de la corona a nivel español y mundial. Menos mal que ha llegado esta declaración.
¿Qué efectos inmediatos supondrá la declaración de Monumento Natural?
En primer lugar, que se tendrá que crear un organismo similar a una Junta Rectora. Además, un plan con las guías que marquen a qué nos tenemos que atener y, de esa forma, poder comenzar a gestionar y, en la medida de lo posible, recuperar todo el valor científico y geológico que atesora.
Dado su pequeño tamaño, ¿cree que todo eso será suficiente para proteger de forma adecuada este rincón?
Por si eso fuera poco, también hay restos arqueológicos, supuestamente ibéricos. Tampoco podemos olvidar la pradera de posidonia oceánica a un paso de la desembocadura del río Algar y su ubicación entre dos Parques Naturales, como son el del Peñón d’Ifach y la Serra Gelada, con su sistema dunar fósil. Nunca hubo tanto en tan poco espacio.
«Es el momento de apostar por un desarrollo sostenible y no en la destrucción del medio»
En otras palabras, me está diciendo que si existe altura de miras por parte de los responsables políticos, estamos ante una gran oportunidad para todos.
Esto debería de convertirse en una verdadera apuesta de futuro. En este caso, del futuro de Altea. De esta forma, se podría enfocar ese futuro hacia la salud, el arte y por la calidad ambiental.
Este Monumento Natural enriquece a toda la zona y especialmente a los dos municipios vecinos afectados por el Parc Natural de la Serra Gelada, como son Benidorm y l’Alfàs del Pi. Es el momento de apostar por un desarrollo sostenible. El desarrollo no debe basarse en la destrucción del medio. El hombre no es el propietario de la Tierra, es sólo un inquilino.
Partiendo de la realidad de que lo que ya se ha destruido es irrecuperable y que el Portet seguirá ahí. Si finalmente se consigue revertir la concesión y planteándolo desde un punto de vista meramente ambiental, ¿qué cree que se debería hacer con él?
Como ya he dicho, para cualquier observador ese puerto apenas tiene tráfico. Esto se ha reconvertido en una concesión enfocada al ocio y al turismo generando una serie de molestias a los vecinos de la Cala del Soio por ruidos y demás. Yo no me considero nadie para decir si la concesión es correcta o no, pero me alegra que ahora mismo, por una precaución arqueológica, esté detenida la obra de ampliación.
Su utilidad como puerto es poca, porque da servicio a pocas embarcaciones y de muy pequeño volumen. No sé lo que haría, pero, en la medida de lo posible, trataría de recuperar todo lo que sea roca negra junto a la playa fosil.
«Se ha propuesto una especie de centro para estudio del cambio climático y me parece que puede ser algo adecuado»
Insisto en la pregunta. ¿Qué se podría hacer con lo ya existente?
En esta playa también encontramos fósiles de un caracol llamado ‘Strombus Bubonius’, prácticamente desaparecido. A lo largo de cada 100.000 años se produce un cambio climático natural por oscilaciones de la órbita terrestre en torno al sol que permite ir a glaciaciones o a épocas de sequía. Es algo natural.
Esta playa, con esos fósiles, sería una clara muestra de ese cambio climático. El Ayuntamiento ha propuesto una especie de centro para estudio del cambio climático y me parece que puede ser algo adecuado.
Volviendo al origen del afloramiento, me ha dicho que nos tenemos que remontar a la rotura de Pangea. ¿No hay, por lo tanto, ningún volcán como lo solemos entender en este lugar?
En la cara norte del Cap Negret hay unas formaciones no muy grandes, no esperes ver el Vesubio. Es un volcán fósil. Para que se pueda entender, hay que pensar en los dinosaurios fósiles: queda poco de aquello.
Por proximidad uno podría deducir que este afloramiento natural puede formar un todo con el Parc Natural de la Serra Gelada. ¿No tendría sentido incluirlo en el mismo?
Se ha pedido en repetidas ocasiones. Es curioso: si me voy al Cap Negret y lanzo una piedra al agua, donde cae esa piedra es Parc Natural, pero desde donde la he lanzado, es, ahora, Monumento Natural. A mi, efectivamente, me gustaría que estuviera integrado en el Parc Natural de la Serra Gelada tal y como pide Altea desde hace cuatro lustros.
Puestos a pedir, ¿qué hacemos con la zona de la desembocadura del Algar?
Es que ahí tenemos un catálogo ornitológico con más de 130 especies catalogadas por SEO Birdlife. Es algo único. Un corredor que comunica con 1.600 metros de altitud en la Sierra de Ferrer, Aitana o Xortá. Además, es un río que poco a poco vamos recuperado, después de que en los años 80 se convirtiera en una zona de aguas negras y fecales y donde iban a parar todos los escombros de las obras.
«Creo que unir el Parc Natural de la Serra Gelada y del Peñón d’Ifach es el futuro y que dentro de poco se empezará a hablar de esa idea»
Siguiendo con este mismo razonamiento, ¿tendría sentido unir el Parc Natural del Peñón d’Ifach, el de la Serra Gelada y este Monumento Natural en un único espacio protegido?
Es una pregunta muy interesante. Efectivamente, la pradera de posidonia oceánica no acaba donde terminan los límites del Parc Natural. La geografía es mucho más amplia que el criterio humano y que en esta unidad, separado por apenas ocho kilómetros, esté el Peñón d’Ifach y la Serra Gelada es, evidentemente, una buena lógica. Que no lo sea a nivel de gestión es otra cosa.
Pero también podríamos hablar de las salinas de Calp, que es otro espacio de enorme interés e integrar en ese parque todo lo que sea interesante de la zona litoral. Creo que ese es el futuro y creo que dentro de poco se empezará a hablar de esa idea.
Siempre que hablamos de este afloramiento me nombra a Cavanilles. ¿Nadie se ha ocupado de esto en todo este tiempo?
Es importante reconocer la labor del gran geólogo e íntimo amigo Alfonso Yébenes, compañero de mil batallas, que ha dado a conocer toda esta geología con informes científicos veraces. Tanto es así que en el Parc Natural de la Serra Gelada se levantó un observatorio con su nombre. No tanto por haberlo explicado a nivel universitario, sino por haberlo sabido trasladar a la educación inferior.
Aprovecho que hace esta inflexión para preguntarle qué puede aportar este afloramiento a los niños en edad escolar.
Es un laboratorio abierto al que pueden ir a aprender. Los centros de enseñanza de la zona pueden venir aquí a ver el propio afloramiento, los minerales, la playa fósil… ¡a tocarlo todo!.