Entrevista > Pablo Carbonell / Cantante, actor y humorista (Cádiz, 1962)
Pablo Carbonell es un artista versátil, que destaca por su ingenio y la polivalencia de sus registros. Su carrera artística la inició junto al humorista Pedro Reyes, en 1980, y pronto daría el salto a la televisión en el programa infantil ‘La Bola de Cristal’. En 1985 formó el grupo ‘Los Toreros Muertos’ y posteriormente colaboró en numerosos programas de televisión y como reportero en el popular ‘Caiga Quien Caiga’.
A día de hoy sigue compaginando proyectos de diferentes disciplinas, entre las que encontramos el teatro, las series o películas, como actor, guionista y director. Y todo ello no le impide colgarse la guitarra y amenizar veladas mezclando monólogos con canciones.
¿Cómo recuerdas tus inicios actuando junto a Pedro Reyes o colaborando en ‘La Bola de Cristal’?
Pedro Reyes tenía un don tremendo, una comicidad apabullante. Si no hubiera sido por él yo no habría podido salir de mi casa y empezar mi carrera. Aprendí mucho con él, lo más importante es que el mayor espectáculo del mundo es la mirada.
Nos permitió entrar en el programa más innovador de la época, ‘La bola de cristal’, y trabajar con Alaska, algo inaudito y que ninguno supimos valorar. Pensábamos que era natural hacer programas infantiles con bombas atómicas, canciones incitando al absentismo escolar y que el malo fuese Ronald Reagan.
Tu trayectoria, a lo largo de más de 30 años, es de lo más prolífica.
Siempre fui una esponja; todo lo que podía ver de teatro, actuaciones callejeras, museos, películas o literatura, no lo dejaba de analizar. Mi mundo era la expresión. Si iba a un bar y había un grupo tocando me subía a improvisar. Si necesitaba dinero sabía hacer de mimo callejero. Si quería beber gratis me subía a un escenario a cantar. Me sabía de memoria todas las canciones de Los Beatles.
Pero yo quería ser pintor, con 22 años la primera vez que ‘Los toreros muertos’ actuamos en Barcelona durante cuatro noches seguidas, dos mañanas las pasé en el Museo Picasso.
«El principal censor está en las redes sociales»
¿En qué se diferencian los tiempos actuales a cuando empezaste?
La juventud éramos mayoría, la calle era nuestra y teníamos un peso social tremendo. Teníamos un peso acarreado de falta de libertades que queríamos recuperar. La represión sexual estalló por los aires y el tema de los escenarios era un acto de seducción. No necesitábamos tantas cosas para divertirnos.
El que tiene un teléfono inteligente necesita también un enchufe y una puerta para que no se lo roben. Cuando empecé, el eco hippy aún coleaba y la idea de que todo era de todos era ley. Ahora el principal censor está en las redes sociales.
«Vamos a hacer un espectáculo junto a ‘No me pises que llevo chanclas’»
Estás preparando nueva gira con ‘Los toreros muertos’ junto a ‘No me pises que llevo chanclas.
Pepe Begines me ha reconocido que ‘Los toreros muertos’ fuimos inspiradores en la carrera de ‘No me pises que llevo chanclas’. Yo le he reconocido que para mí fue ‘Siniestro Total’, así que vamos a hacer un espectáculo intentando rizar nuestras canciones con temáticas similares para crear un espectáculo divertido y teatral.
Ambos soñamos con llevar como artista invitado a Miguel Costas, la mejor manera de devolverle tanta diversión que recibimos de su lucidez, su obra inmortal. Se está preparando una buena.
El 14 de mayo actuarás en Elda interpretando la obra ‘Bla bla coche’, una comedia con tintes de trhiller.
Nuestro coche hace una parada, junto a Soledad Mallol, Víctor Ullate Roche y Ania Hernández. La obra es una reflexión sobre la necesidad de tirar para adelante. De que volver al pasado sólo nos puede llevar a la frustración. El fracaso o no cumplir las expectativas no te pueden obligar a dar marcha atrás. A mí me divirtió de la obra el hecho de que cuatro desconocidos compartan un coche para hacer un viaje, cada uno con su mundo y sus intenciones.
Acabas de terminar de escribir una biografía falsa del mundo del espectáculo. ¿Qué te ha llevado a escribirla?
Hace casi treinta años tuve un delirio por algo que me había pasado por la cabeza y que no se concretó. Sabía que algún día tendría que escribir aquello. Cuando llegó el confinamiento aquella historia se plantó ante mí y me dijo: ahora me escribes. Eso sí, me alegro de haber escrito antes ‘El mundo de la tarántula’, mi biografía, porque esta novela tiene mucho que ver con aquella, ésta es el Mister Hide de aquel Doctor Jekyll.
¿Qué nos puedes adelantar de tu nuevo libro?
El título, ‘El nombre de los tontos está escrito en todas partes’, que nos remite a esas novelas negras de Boris Vian. En las primeras páginas conocemos a una persona que está en el corredor de la muerte y que recuerda su vida en el mundo de la música y la interpretación. La primera pregunta es obvia: ¿qué habrá hecho una estrella infantil para que la hayan condenado a muerte? Y hasta aquí voy a leer…
¿Crees que nuestra televisión pública es de calidad?
Creo que es mejorable. La televisión de todos debe de servir para educar e informar con veracidad, y no es admisible ninguna manipulación por parte del Estado. El contenido que difama o entra en la vida privada de las personas debe ser exhibido en otras cadenas.
No encuentro justificado que nuestra cadena corte los títulos de créditos de las películas. ¿Se está intentando convencer de que las películas no las hacen solamente los que se ponen delante de la cámara y se ningunea al resto de profesionales? Es de paleto y una injusticia.
El sector de actores e interpretación no ha entrado todavía en los planes de vacunación. ¿Es un indicador de la poca atención hacia el mismo?
No me quiero quejar, pero ciertamente somos el único colectivo que no puede trabajar con mascarilla. Estamos desnudos en los rodajes, en los platós y los escenarios. Pero los cajeros de supermercado tampoco están vacunados, y su riesgo es evidente. Nosotros nos hacemos la prueba cada vez que saltamos a escena, pero respiramos las miasmas de cientos de personas que pasan por delante en un sitio cerrado.
«Mi estilo pictórico pretende ser el eslabón perdido entre las señoritas de Avignon y Mortadelo»
¿Cuáles son tus referentes culturales de siempre y de ahora?
En arquitectura Frank Lloyd Wright. En música The Beatles, y lo digo sin complejos. Después están Frank Zappa, Talking Heads e Eels. En literatura tengo en un altar a Benito Pérez Galdós y a Luis Landero. En pintura, aunque me conmueve Goya, mi referente es Picasso e Ibañez. Y no es una boutade, mi estilo pictórico pretende ser el eslabón perdido entre las señoritas de Avignon y Mortadelo.