Cuando escuchamos enfermería escolar, solemos pensar en una enfermera de un colegio que solo puede atender traumatismos leves y heridas. Nada más lejos de la realidad. La enfermera escolar cuida, cura, apoya, arropa, refuerza, enseña y acompaña. El Departamento de Salud de Torrevieja lo sabe, por ello apuesta por integrar esta figura habilitando una consulta de enfermería para la atención inmediata y seguimiento de los niños en el Centro de Atención al Discapacitado ALPE de Torrevieja.
La enfermera escolar es, la figura socio-sanitaria que mantiene el enlace entre los diferentes profesionales sanitarios que se encargan de ayudar a mantener el bienestar físico, mental y social de los niños y adolescentes. Pero también de los profesores y familias. Es una más del personal docente. Mª José Martínez, enfermera escolar del departamento, ha desarrollado unos talleres de reanimación cardiopulmonar y primeros auxilios para profesores con el objetivo de que el personal docente tenga unas pautas claras para actuar en un primer momento ante una situación de emergencia. Además, la consulta de atención inmediata del centro escolar ha diseñado también talleres sobre alimentación, higiene personal y primeros auxilios para los alumnos.
La enfermera escolar de Torrevieja Salud no sólo realiza tareas de formación sino que actualiza el calendario vacunal de los alumnos en época estival, lleva el control de las pautas de medicación, de alimentación, aspiración de secreciones o seguimiento bucodental.
Por otro lado, conscientes de la importancia de crear espacios cardiosaludables, el Departamento de Salud de Torrevieja ha proporcionado al centro escolar un desfibrilador semiautomático DESA.
El Desfibrilador Externo Semiautomático (DESA) es un aparato electrónico portátil que trata la parada cardiorrespiratoria cuando es debida a la fibrilación ventricular. El DESA está pensado para ser utilizado por personal no sanitario, siendo éste formado previamente, de tal forma que siguiendo sus instrucciones, se colocan los electrodos en el paciente, y el aparato, tras determinar el tipo de ritmo cardíaco, aconseja a los asistentes separarse para emitir la descarga eléctrica, o bien, recomienda realizar compresiones torácicas.
Estos dispositivos se encuentran ubicados en lugares de alta concentración de personas, tales como aeropuertos, estaciones de tren y autobús, estadios de fútbol, grandes superficies comerciales, etc. ya que es en estos espacios, fuera del ámbito sanitario donde se producen alrededor de las 30000 paradas al año, alrededor de las 100 al día, y es donde pueden evitarse las mayores situaciones luctuosas posibles gracias al uso de desfibriladores y junto a la adecuada formación de las personas que lo utilicen.