Agosto es un mes fuerte en Alicante. Miles y miles de turistas llegan a la ciudad desde todas partes de España, Europa y el mundo. Basta con darse un paseo por el centro para percatarse de todo el gentío que transita por nuestras calles.
Como es lógico, la ciudad también aumenta sus actividades de ocio durante este mes. Repasamos algunos de los principales entretenimientos y diversiones para todos los gustos. Si aún no sabes qué hacer en agosto, seguro que aquí te damos unas cuentas ideas.
Las playas de Postiguet, San Juan, Urbanova, Albufereta y Tabarca han logrado la Bandera Azul
Cinco Banderas Azules
Empezando por las playas, este verano Alicante no solo ha conseguido mantener sus cuatro Banderas Azules (Postiguet, San Juan, Albufereta y Urbanova) sino que ha sumado incluso otra más (Tabarca).
“La Federación Europea de Educación Ambiental ha recompensado la calidad de los servicios que se prestan en la arena y en el agua, la gestión medioambiental, la accesibilidad, seguridad y limpieza de las playas” presumió el alcalde Luis Barcala en el acto oficial de izada de las Banderas Azules, celebrado a principios de julio.
En total son más de seis kilómetros de playas laureadas con Bandera Azul los que existen en el término municipal de Alicante.
Postiguet
Por supuesto, la playa más céntrica y emblemática de Alicante (y por tanto siempre la más abarrotada) sigue siendo el Postiguet. Recibió su nombre hace siglos por un antiguo postigo (puerta exterior) que se ubicaba aquí para acceder a la villa amurallada.
En sus poco más de 600 metros de longitud desde la Puerta del Mar hasta su fin en una bonita semicala conocida como ‘el Coco’, el Postiguet cuenta con todo tipo de servicios como chiringuitos, atracciones acuáticas, tumbonas, motos de agua, redes de vóley, etc.
San Juan y el Cabo
Mucho más amplias, y normalmente con más espacio entre cada toalla, son las playas de San Juan y Muchavista. También cuentan con todos los servicios propios de una playa turística, e incluso en el paseo marítimo encontramos una amplia oferta de tiendas y restaurantes.
Algunos aficionados al running aprovechan este paseo para practicar su deporte favorito, especialmente en la zona donde termina la playa de San Juan y comienza el Cabo de las Huerta.
Sin duda este cabo es uno de los lugares más bonitos de Alicante. Si tenemos la valentía de adentrarnos por sus caminos más difíciles de transitar, acabaremos encontrando algunas bellísimas calas donde apenas llegan los turistas e incluso se practica mucho el nudismo.
La Albufereta
Pasado el Cabo de la Huerta en dirección hacia el centro de Alicante, llegamos a la Albufereta. Una curiosa playa con forma de ‘U’, muy diferente a las anteriores. Debido a su especial geografía, el agua aquí suele estar más templada.
A su costado se ubica la diminuta playa de la Almadraba, compuesta por rocas y arena oscura. Un río subterráneo desemboca en ella, razón por la que tiene una composición especial que es particularmente apreciada por algunos bañistas.
El baño nudista se practica en la playa de Urbanova y en el Cabo de la Huerta
Urbanova y Aguamarga
En la parte sur del término municipal de Alicante también hay curiosas playas que merecen la pena visitar. Urbanova-Los Saladares es la más famosa, con sus casi dos kilómetros de arena que conectan con la playa de los Arenales. Se trata de una zona de humedales que guarda gran interés medioambiental, con curiosas dunas de arena que suelen divertir especialmente a los niños.
Este barrio separado de la urbe está muy animado en verano, cuando multiplica su población. Paseando por estas calles encontramos muchos bares, restaurantes, heladerías, tiendas e incluso lugares LGTBI.
En Urbanova también hay una zona habilitada para el baño nudista, bastante más fácil de acceder que las calas del Cabo de la Huerta. Cerca de aquí está Aguamarga, una playa canina.
Tabarca
No podemos olvidarnos de la isla de Tabarca, cuya playa este año ha sido galardonada con una nueva Bandera Azul. Para llegar hasta aquí debemos coger un barco que parte diariamente, varias veces, desde el Puerto de Alicante.
En esta preciosa isla no encontraremos grandes urbanizaciones ni rascacielos, sino solo pequeñas casas blancas y mucha naturaleza. Todo este encanto virginal no quita para que Tabarca también tenga una gran oferta gastronómica de restaurantes, y varias tiendas donde comprar productos típicos.
Conviene, eso sí, prestar mucha atención en el baño y no separarse demasiado de la costa, pues es una zona donde soplan fuertes vientos y el litoral está lleno de rocas. No en vano, este verano ya hemos tenido que lamentar una triste desgracia.
Monumentos
Alicante no es ni mucho menos solo playa, y una prueba de ello es la gran riqueza que tiene su Casco Antiguo. Perderse por sus calles es adentrarse en siglos de historia medieval y moderna. Algunos de sus mejores rincones son las plazas Quijano, del Carmen, Santísima Faz o la calle Toledo. También sobresalen varios edificios como la Concatedral de San Nicolás, la iglesia de Santa María, el Palacio del Portalet o el Ayuntamiento.
Para gusto de quien escribe, el lugar más bonito de todo Alicante es el barrio de Santa Cruz. Ubicado justo al costado del Casco Antiguo, lo ideal es acceder subiendo por la calle San Rafael. Son apenas dos o tres calles llenas de casas típicas mediterráneas, flores y privilegiados miradores que dan hacia el mar. Un pueblo tradicional que sobrevive dentro de toda una gran ciudad moderna, como si el tiempo se hubiera detenido aquí.
Desde Santa Cruz se puede continuar hacia el Parque de la Ereta, que también ofrece algunas de las mejores vistas de la ciudad. Un lugar ideal para sentarse y refugiarse del calor.
Por supuesto, una visita a Alicante no estaría completa sin subir al Castillo de Santa Bárbara ubicado en la cima del monte Benacantil. Es nuestra gran fortaleza, que lleva ya más de mil años vigilando la ciudad. Se puede ascender tanto andando desde la Avenida de Alfonso el Sabio, como en ascensor desde la Playa del Postiguet. En cualquiera de los dos casos (sobre todo en el primero) recomendamos no hacerlo a las horas de mayor calor.
Todos los días se organizan visitas guiadas a los refugios de la Guerra Civil
Explanada y refugios
Saliendo del centro más histórico de Alicante, muchos turistas y locales también aprecian pasear, tomarse algo o comprar productos artesanales por la Explanada de España. Su emblemático suelo de colores es uno de los mayores símbolos de la ciudad. A un costado tenemos el Paseo Marítimo, mientras que al otro observamos varios edificios antiguos entre los que destaca la bella Casa Carbonell.
Para aquellos que no teman las emociones fuertes, es una experiencia impactante visitar los dos refugios aéreos de la Guerra Civil ubicados en la Plaza Séneca y en la Plaza Balmis. Solo se pueden conocer contratando una visita guiada por teléfono o email. Los guías explican cómo se protegían los vecinos durante los tres años que duró la guerra en los que Alicante sufrió más de 70 bombardeos por parte de la aviación franquista. Además esta visita incluye la exposición ‘Alicante ha caído. Aquí termina la guerra’ en la Casa de Máquinas.
Por primera vez en cinco siglos ha habido relevo en la congregación de monjas que custodian la Santa Faz
Lucentum y Santa Faz
Los grandes amantes de la arqueología tienen una cita imprescindible con el yacimiento Lucentum, el lugar donde nació la ciudad. Está ubicado en el Tossal de Manises, en la zona de la Albufereta. Se trata de una de las mejores muestras de una ciudad romana que se puede encontrar en el Mediterráneo español.
El Monasterio de Santa Faz contiene la mayor excepcionalidad religiosa que existe en Alicante. Situado en la zona de la Huerta de San Juan, aquí descansa uno de los pliegues de la tela que la mujer Verónica le cedió a Jesucristo para que se secara la cara cuando cargaba con la cruz en Jerusalén. Precisamente este verano se ha producido un relevo histórico, pues las monjas Clarisas que custodiaban la reliquia desde hacía cinco siglos han cedido su tarea a las monjas de la Sangre.
Los ‘triunfitos’ Aitana y Manuel Carrasco actúan en la Plaza de Toros
Conciertos
El buen tiempo y la presencia masiva de turistas provocan que el número de actividades culturales siempre se incremente durante el verano en Alicante. Una buena muestra de ello son los conciertos, pues siempre suelen visitar la ciudad destacados cantantes de primer nivel.
El primer gran concierto de este agosto llega el sábado 3, con un evento en la Plaza de Toros protagonizado por Los Sabandeños, Pedro Guerra y Tamara. El viernes 9 los nostálgicos de los años 80 tienen cita en los Jardines de Abril de Sant Joan con Danza Invisible y Nacha Pop en el 80’s Summer Party.
Al día siguiente, el sábado 10, la popular cantante Aitana actúa en la Plaza de Toros dentro de su gira Play Tour. Otro formado en la academia de OT, Manuel Carrasco, llegará al coso taurino el martes 16 de agosto en su gira ´La cruz del mapa`.
Todos los viernes por la noche hay conciertos de jazz en Las Cigarreras
Música alternativa
Aquellas orejas amigas de una música menos comercial, no se pueden perder los viernes del Verano de Jazz en Las Cigarreras. Son cuatro conciertos, uno por cada viernes de agosto, protagonizados por la banda Le Hot Jazz Quarter y por músicos como Peter Gun, Vira León o Quique Simón.
Los amantes de la música electrónica tienen una cita en Los Jardines de Abril de Sant Joan el día 11
Los Jardines de Abril de Sant Joan acogerán el Music of the Garden el domingo 11. Se trata de un curioso formato que dará comienzo a las 12 horas y durará hasta la noche. Los asistentes podrán disfrutar de música electrónica en directo mientras que ven obras de arte, se relajan en los jardines, toman un brunch o asisten a varias performances.
El Castillo de Santa Bárbara se convierte en otro escenario de lujo para albergar conciertos, dentro del ciclo Live the Roof. Para el viernes 2 está programada la actuación de Zenet y el viernes 30 será el turno de la cantautora Carmen Boza.
Aunque el Teatro Principal y el ADDA cierren sus puertas en agosto, numerosas orquestas y grupos salen al aire libre para actuar en la Concha de la Explanada. La Banda Sinfónica Municipal actúa aquí los jueves por la tarde.
Parques
Los parques y jardines de Alicante constituyen otra forma ideal de pasar un día agradable y refrescante. A lo largo de la ciudad existen varios puntos verdes como el Parque Canalejas, Lo Morant, de San Blas o La Marjal (junto a la playa de San Juan).
Quizás el más destacado sea el Palmeral de San Gabriel. En la salida de la ciudad hacia Elche, está ubicado en una privilegiada situación frente al mar. Fuentes, columpios, riachuelos, lagos e incluso una curiosa cascada por la que se puede pasar por debajo. Y por supuesto, muchas palmeras. Un lugar realmente acogedor, propicio para ir con niños o incluso tener un romántico paseo en pareja.
A partir de las ocho de la tarde se producen obras teatrales muchos días en algunos de estos parques como El Palmeral, Lo Morant o La Marjal. Normalmente suelen ser de temática familiar, dirigidas especialmente hacia los niños.
Moros y Cristianos
Uno de los momentos más especiales del agosto alicantino es el ya célebre desembarco de Moros y Cristianos en la playa del Postiguet del domingo 4. Una tradición medieval recuperada hace solo tres años, que culmina con la recreación de una batalla épica en la arena.
Antes de este esperado momento, para el viernes 2 también hay programado un desfile conjunto de los Moros y Cristianos de San Blas, Altozano, Villafranqueza y Rebollado por las calles del centro urbano.
Si se quedan con ganas de más Edad Media, el segundo fin de semana de agosto se celebran los Moros y Cristianos de Altozano. Unas fiestas con unos desfiles muy especiales, en los que es habitual incluso ver comparsas de piratas, bailaoras de flamenco, ninjas, etc.
Exposiciones artísticas
Otro punto fuerte de Alicante son sus museos, que en agosto permanecen todos abiertos salvo en el caso del MUBAG (aún en obras). En el Museo Arqueológico de Alicante (MARQ) además de una gran repaso por la historia de la ciudad, también se puede visitar ahora la exposición internacional ‘Irán, cuna de civilizaciones’. Conviene hacerlo ahora o nunca, pues en septiembre todas estas maravillas iranís volverán a su país.
También recomendamos la exposición ‘Titanic, the reconstruction’ disponible en la Lonja de Pescado. Han pasado ya 117 años desde el hundimiento del célebre barco, y todavía se siguen descubriendo nuevos detalles desconocidos sobre esta histórica y desgraciada travesía marina.
En el Museo de Arte Contemporáneo de Alicante (MACA) actualmente está expuesta la muestra artística temporal ‘Antes del arte’, que viaja hasta los años 60 de la mano de varios pintores y músicos de la época tales como Eusebio Sempere, Francisco Sobrino, Eduardo Sanz, Jordi Teixidor, José María Yturralde, Joaquín Muchavila, Ramón de Soto, Tomás Marco, Francisco Llácer y Vicente Aguilera.
Si se quiere hacer todo un recorrido por la provincia en tan solo una sala, el sitio ideal es el Museo de la Universidad de Alicante donde está disponible la exposición ‘Cuarenta visiones y versiones de Alicante y provincia’. Y si la pretensión es recorrerse el mundo entero, entonces el lugar es el Centro Imaginalia y la exposición ‘Miradas del mundo’ del pintor murciano José Luis Gómez.
Otros museos que también merece la pena visitar en Alicante son el Museo de Aguas de Alicante, de Belenes, de Hogueras, de la Volvo Ocean Race, el virtual del Bolso o el Taurino.
Fiestas patronales y toros
Por otra parte la Virgen del Remedio, patrona de la ciudad, celebra su fiesta el 5 de agosto. Cuenta la tradición que tal día del año 1648 esta citada virgen libró a los alicantinos de una cruenta epidemia de cólera. Para conmemorar aquel suceso milagroso cada año se organiza una procesión, que parte desde la Concatedral de San Nicolás para transcurrir por el Casco Antiguo y la Rambla. También se le dedica una Alborada en la plaza del Ayuntamiento, con música de bandas y pasodobles.
Además, la tradicional novillada de toros de la Virgen del Remedio este año se celebra el domingo 4. Los seis novillos de Montealto serán para el rejoneador José Rocamora y los diestros Alfredo Bernabéu, Adrián Velasco, Borja Ximelis, Borja Collado y Miguel Polope.
No podemos olvidar las fiestas de San Roque, dedicadas al patrón del barrio. Durante la última quincena del mes están programados varios actos entre los que destacan la banyá en la plaza del Puente, la procesión del santo y el concurso de paellas.
El Circo de los Horrores llega a Alicante a partir del 28 de agosto
Espectáculos alternativos
Desde el 28 de agosto hasta el 9 de septiembre llega a Alicante otro espectáculo, bastante difícil de describir. Se trata de ‘El Circo de los Horrores. Apocalípsis’. La ópera rock se fusiona con el teatro y el circo en este show, basado (al menos nominalmente) en la famosa película británica de terror clásico. El lugar escogido es el Recinto Ferial de Rabasa.
Una experiencia gastronómica puede combinarse con artes circenses, acrobacias aéreas y flamenco. Si no lo creen, pueden comprobarlo cada sábado por la noche en las cenas-espectáculo Gravity que se organizan en La Fundición de Alicante (cerca del centro comercial Gran Vía).
Por otra parte, en agosto no es extraño encontrarse numerosos eventos al aire libre en las plazas y calles de la ciudad. El buen tiempo lo convierte en un mes propicio para que asociaciones locales o comisiones de hogueras organicen sus actos culturales. Una de las más animadas suele ser la Plaza Gabriel Miró.
Compras
Hacer turismo o asistir a actividades culturales no está ni mucho menos reñido con dejarnos alguna tarde para ir de compras. La calle comercial por excelencia es la Avenida de Maisonnave. Aquí podemos encontrar las principales marcas de ropa nacionales y extranjeras.
En la calle San Francisco (conocida popularmente como ´la calle de las setas`) descubriremos tiendas más pequeñas y locales, aunque igual de modernas y estilosas. Para aquellos con un gusto más clásico, en las calles San Vicente y Calderón de la Barca se encuentran las boutiques de ropa que llevan toda la vida vistiendo a los alicantinos.
Si buscamos pasar el día en un centro comercial, las opciones son variadas. El Plaza Mar 2 está ubicado cerca del Postiguet. Más hacia las afueras, el Puerta de Alicante se encuentra hacia el sur, mientras que el Gran Vía está en dirección hacia San Juan.
Ya fuera de la ciudad, tiene especial éxito The Outles Stores en San Vicente del Raspeig. También en la carretera que nos lleva hacia Benidorm hallaremos multitud de grandes tiendas de marcas que todos conocemos.
Ocio nocturno
El fenómeno del tardeo sigue estando muy vigente en la ciudad de Alicante, desde que se pusiera de moda hará ya una década. Para aquellos foráneos que desconozcan su significado, dícese del acto de salir a tomar copas y pegar bailoteos cuando aún no se ha puesto la luz del sol.
Habitualmente, el tardeo suele comenzar fuera del Casco Antiguo. La zona más típica es la calle Castaños y su entorno, donde además de varios pubs también podremos encontrar fácilmente sitios donde cenar. El Mercado Central y sus alrededores también es otro habitual lugar donde ´tardear`. Incluso algunos optan por tomarse algo en el centro comercial Panoramis, que ofrece unas vistas espectaculares del Puerto de Alicante al atardecer.
Una vez caída la noche, la fiesta suele centrarse en el centro histórico (más conocido como ‘el Barrio’). La oferta es bastante amplia: discotecas, pubs deportivos, garitos de rock, locales retro, de música alternativa, con actuaciones en directo, LGTBIQ, etc.
El Puerto es el otro gran epicentro del ocio nocturno alicantino. Además de bares y locales varios, aquí está ubicado el gran Casino del Mediterráneo.
Saliendo de la ciudad hacia la Albufereta, de camino también nos encontramos algunas de las discotecas más reconocidas de Alicante. La playa de San Juan es otro lugar con una gran concentración de ocio nocturno, especialmente en verano, en torno al campo de golf.
El último fin de semana se celebran las Fiestas de las Urbanizaciones
Las fiestas de las ´urbas`
Por si ya tuviéramos poca fiesta en Alicante, cerramos el mes con las Fiestas de las Urbanizaciones. Durante el último fin de semana de agosto, el Ayuntamiento da permiso a los residentes para montar barracas y poner música hasta altas horas de la madrugada.
Estas fiestas suelen tener un carácter más privado, pero si se conoce a algún vecino que viva en una urbanización es muy habitual que los de fuera también se apunten a la juerga.