Entrevista > Sonia Terrero / Secretaria general de la FAPA Gabriel Miró (Salamanca, 15-diciembre-1976)
La Federación provincial de Asociaciones de Padres de Alumnos de Alicante (FAPA) ‘Gabriel Miró’ cumple 40 años representando a las familias de la escuela pública en la provincia y reivindicando que nuestros pequeños reciban una educación de calidad. Por ello, coincidiendo con el mes de la vuelta al cole, hemos querido entrevistar a su actual secretaria general.
Sonia Terrero es salmantina, pero lleva 21 años viviendo en Torrevieja. Trabaja como reponedora de máquinas y tiene dos hijos. La mayor ya terminó los estudios hace años, pero el pequeño empieza ahora tercero de Primaria.
“Hace un tiempo mi hijo vivió una experiencia muy negativa en su colegio. La FAPA Gabriel Miró me ayudó a solucionar la situación. Hoy en día él está ya en otro centro, y es muy feliz allí. Desde entonces decidí unirme a la organización y luchar por una Educación pública mejor. Invito a todos los padres a hacer lo mismo. No basta con dejarlos en la puerta del colegio, las familias tenemos que preocuparnos también de lo que ocurre dentro” afirma Sonia Terrero.
En términos generales, ¿cómo valoras la Educación en España?
Si nos fijamos en los informes PISA estamos más o menos en la media de Europa, pero básicamente solo en matemáticas y lengua. El problema es que no tenemos un sistema educativo en España, sino más bien un conjunto de escisiones. Por eso nosotros abogamos siempre por un pacto nacional por la Educación. Para que no hayan diferencias entre un alumno de Extremadura y uno del País Vasco.
¿Crees realmente que es posible que los partidos políticos se pongan de acuerdo en un pacto por la Educación? Ni siquiera tenemos aún gobierno…
Casi me da la risa pensarlo. Desgraciadamente lo veo muy lejano. Da mucha pena que los políticos no sean capaces de ponerse de acuerdo ni siquiera en un tema tan sensible como es la Educación. Esperemos que algún día lo consigamos, y que cuenten con las familias para ello.
Algunos padres se quejan de que la escuela repite los mismos conocimientos cada año y no enseña otras cosas muy útiles para la vida. ¿Debería cambiarse la metodología con los alumnos?
Tenemos alumnos que terminan la secundaria sabiendo mucho de matemáticas o de física, pero que no saben poner en marcha un negocio o su futuro. Necesitamos un sistema que se base más en competencias, y no tanto en articular conocimientos.
Hablando ya de la Comunidad Valenciana. ¿Qué os parece el nuevo sistema de plurilingüismo impulsado por el conseller Vicent Marzà?
Las lenguas es una de esas materias donde tenemos que cambiar la metodología más urgentemente. Porque es cierto que algunos alumnos terminan la secundaria sabiendo leer o escribir una lengua extranjera, pero luego son incapaces de hablarla o entenderla. Para dominar realmente un idioma, hay que saber desenvolverse en las cuatro competencias.
Tenemos que valorar que lenguas suponen más posibilidades al hablante. Es incomprensible que el español sea estudiado en muchísimos países del extranjero, mientras que en la Comunidad Valenciana lo estamos echando atrás.
En Cataluña hemos visto como un sistema supuestamente trilingüe acaba convirtiéndose en monolingüe. Y desgraciadamente nuestro conseller quiere imitarlo para la Comunidad Valenciana.
«Los padres hemos perdido nuestro derecho a elegir la lengua vehicular en la que estudian nuestros hijos»
Entonces, ¿deberíamos volver al sistema de líneas castellana y valenciana?
Sí. Nuestro lema es ‘Castellano sí y valenciano también’, pero los padres nos merecemos tener el derecho de elegir la lengua vehicular de nuestros hijos. No queremos imposiciones, eso al final causa un rechazo hacia el idioma. Y por desgracia es lo que está pasando.
¿Esta política lingüística de la Generalitat está favoreciendo que más padres matriculen a sus hijos en colegios privados?
No solamente está favoreciendo a la privada, sino que también nos llegan familias a las AMPAs diciendo que se quieren ir a Murcia para que a sus hijos no les impongan idiomas. Cuando la Generalitat se dedica a dificultar la enseñanza a los niños, al final crea estas situaciones.
Con el anterior sistema los niños estudiaban muy bien la lengua y cultura valenciana, las familias no estaban enfrentadas y había muy poquitas exenciones. Ahora el conseller ha creado un problema donde no lo había. Este tema se ha convertido en una batalla, algo que nunca debía haber ocurrido.
¿Debería actualizarse el mapa de las zonas castellano y valenciano-parlantes?
Desde luego. La geografía lingüística actual de la Comunidad Valenciana tiene poco que ver con la de principios de los 80, cuando se aprobaron el Estatuto de Autonomía y la Ley de Uso y Enseñanza del Valenciano.
Hay zonas como la ciudad de Alicante que hoy son castellano-parlantes. Sería positivo hacer una actualización del mapa, siempre con consenso. Por el contrario, parece ser que la intención de este conseller es quitar incluso las pocas zonas castellanas y que todos seamos valenciano-parlantes.
«Cuando una familia pide la exención de valenciano, arrinconan al alumno en el aula para hacerle cambiar de idea»
Sin embargo, en las zonas castellanas como la Vega Baja o Villena aún se puede solicitar la exención de valenciano…
Sigue existiendo, pero es complicadísimo conseguirla. Incluso cuando ya la obtienes, cogen al alumno, le ponen delante de sus compañeros y le explican que está cometiendo un gran error. Al final intentan machacarlo y que se sienta marginado para que desista de acogerse a este derecho suyo. No es ético hacerlos sentir inferiores al resto.
«Permitir a los alumnos consensuar algunas reglas está reduciendo el acoso escolar»
Cambiando de tema, ¿cómo se podría luchar mejor contra el acoso escolar?
Lo que ocurre en la escuela es un reflejo de la sociedad. El acoso está presente en muchos entornos sociales y la mejor herramienta para combatirlo es la educación en el respeto, la diversidad y la igualdad.
Aquí las familias tenemos la mayor responsabilidad, enseñando todos estos valores desde casa. Pero los colegios no están exentos, deben trabajar esta problemática desde los primeros cursos y no esperar a que los chavales se hagan más mayores. Es horrible sufrir un acoso día a día. Estamos viendo como en algunos casos incluso se está llegando al suicidio. Toda la comunidad educativa debemos unirnos para acabar con esta lacra. No obstante, las familias vemos cómo cada vez nos marginan más en estos temas.
Suele funcionar muy bien otorgar la capacidad a los propios alumnos de elaborar algunas reglas del centro. A veces los niños son de “me han dicho esto, pues hago lo contrario”. Sin embargo, si entre todos los estudiantes logran llegar a un consenso sobre ciertas normas, suelen hacerse más responsables de cumplirlas.
«Es muy injusto que los mejores profesores cobren lo mismo que los peores»
Da la sensación de que parte del profesorado se siente muy desmotivado. ¿Deberían ofrecerles más incentivos? ¿Tiene sentido que el mejor profesor de la Comunidad Valenciana esté cobrando lo mismo que el peor?
Esa es una de nuestras reivindicaciones más históricas. Siempre hemos estado en contra del sueldo lineal. Los profesores deberían cobrar en virtud del rendimiento y su implicación, no del cargo.
Hay algunos docentes que se implican muchísimo en el día a día, pero otros que no lo hacen. Es muy injusto que cobren lo mismo y tengan todos los mismos privilegios. Y esto no se aplica solo a los profesores, habría que cuidar mucho mejor también a todos los profesionales del ámbito educativo.
«Los profesores cada vez cogen más bajas por depresión, y la Conselleria no siempre proporciona sustitutos»
Cuando yo estaba en el instituto tuve una profesora de biología que se cogió una baja por depresión para librarse de ser jurado en una oposición. La Conselleria fue incapaz de mandar un suplente y no dimos biología durante el resto del curso. ¿Esto sigue ocurriendo?
Desgraciadamente sí, tenemos muchos problemas así. Cada vez se cogen más bajas, sobre todo por depresión. Reclamamos continuamente nuevos profesores suplentes, que a veces vienen y otras no. Algunos alumnos incluso se tienen que adaptar a tres o cuatro tutores diferentes en un curso.
La Conselleria no ha conseguido ni agilizar estos temas burocráticos ni tener realmente satisfecho al profesorado para que no haya tantas bajas. Al final los perjudicados siempre son los alumnos. Curiosamente este curso pasado hemos tenido muchos problemas de falta de profesores de valenciano. Habría que preguntarle a Marzà por qué hace leyes que no es capaz de cumplir.
¿Qué os parece todo el asunto de los pleitos legales de la educación concertada contra la Conselleria por el cierre de aulas?
Nosotros defendemos la escuela pública, ese no es nuestro tema. Pensamos que, por supuesto, las familias tienen el derecho de elegir siempre el centro educativo que quieran para sus hijos. El propio TSJCV se ha pronunciado y ha dado la razón a la concertada. En esta legislatura todo se ha judicializado demasiado. Marzà es el conseller que más veces ha estado en el juzgado, y también quien más veces ha perdido. Debería de plantearse que algo no está haciendo bien.
¿Están demasiado sobreabarrotadas de alumnos las aulas de los colegios públicos?
Sí, algunos centros se están saturando. Ocurre especialmente en el litoral, donde a veces se llegan a matricular unos 300 o 400 alumnos extra en septiembre. En Torrevieja, por ejemplo, puede haber institutos con estudiantes de unas 100 nacionalidades distintas.
Por un lado esto es una noticia positiva, significa que están naciendo más niños. Por otro lado, hay que plantearse de nuevo reducir la masificación y los ratios.
«XarxaLlibres nos está ahorrando mucho dinero, pero en algunos colegios estafan a las familias»
¿Qué tal está funcionando XarxaLlibres?
Este proyecto empezó a principios de la legislatura anterior y todavía se está consolidando. Nosotros siempre hemos reivindicado la gratuidad de los libros y nos hemos reunido varias veces con Marzà para ayudar a coordinar esta red. Estamos contentos, porque realmente está ayudando a reducir el gasto. Ahora sobre todo compramos material escolar, que por cierto también debería ser gratuito.
Lamentablemente en algunos centros todavía están timando a las familias con la XarxaLlibres. Quiero recordar a las familias que si entregan todos los libros, tienen que recibir todos los libros. Y si no entregan un libro, tendrán que quitarle un libro del lote. Pero no dos. ¡No valen engaños!
¿Por qué en la provincia de Alicante hay dos asociaciones de padres de la escuela pública, la FAPA Gabriel Miró y la FAPA Enric Valor? ¿Se supone que vosotros sois la de derechas y la otra la de izquierdas?
La FAPA Gabriel Miró va a cumplir este año su 40 aniversario. Nosotros agrupamos a más de 500 AMPAs en Alicante y defendemos la escuela pública, gratuita, libre, de calidad, aconfesional, compensadora de desigualdades, que no discrimine, integradora, humanista, científica, con un sistema educativo solidario y con equidad. Si alguien quiere pensar que todo esto es solo de derechas, allá él (risas).
Somos 21 personas en la junta directiva, en la que hay gente de todas las ideologías políticas. Así es la escuela pública, y es la diversidad en la que nosotros creemos. No pedimos ningún carnet para entrar, solo el DNI. Otros no pueden decir lo mismo que nosotros.