Entrevista > Antonia Moreno / Directora territorial de Presidencia de la Generalitat en Alicante (Orihuela, 2-octubre-1961)
Licenciada en Filosofía, Antonia Moreno Ruiz ha trabajado como profesora de Lengua y Literatura en el IES Gabriel Miró de su Orihuela natal durante la mayor parte de su vida profesional.
Militante del PSOE, desde 2006 ha desempeñado varios cargos políticos como el de teniente-alcaldesa de Orihuela, diputada provincial o directora general de Cooperación en la Conselleria de Transparencia. Cuando ya se había reincorporado a dar clases en su instituto, el president Ximo Puig ha querido ‘rescatarla’ como nueva directora territorial de Presidencia de la Generalitat en Alicante. Nos recibe en su nuevo despacho en la Casa de Brujas, para conversar sobre diferentes temas candentes que afectan a nuestra provincia.
Empiezo preguntándote sobre Transparencia, tu anterior cargo político. Hace un año publicamos un reportaje donde averiguamos que la mayoría de los ayuntamientos alicantinos no están realmente adaptados a la nueva Ley de Contratos del Sector Público. ¿Hemos mejorado al respecto?
La Generalitat también ha aprobado una ley autonómica para aumentar los controles en la función pública a iniciativa nuestra. Todo esto requiere un tiempo, y depende tanto de la voluntad política de cada ayuntamiento como del tamaño y recursos que tienen los diferentes municipios.
En realidad existe un clamor entre todos los alcaldes, ya sean de localidades grandes o pequeñas, de que hay demasiadas trabas administrativas para gestionar. Debemos encontrar el punto intermedio donde la transparencia sea un requisito pero no un frenazo a la gestión. Al final el ayuntamiento es la administración que atiende al vecino y le resuelve la urgencia. Lo hemos visto ahora con la DANA en la Vega Baja.
Hablemos de la DANA. Asumes tu nuevo cargo el pasado septiembre y a los pocos días… cae la gran riada.
Sí, a los tres días exactamente. Fue una entrada un poco traumática, aunque creo que el hecho de que yo sea de la Vega Baja facilitó mucho el trabajo. En todo lo que estuvo en mi mano, pude ayudar al president Puig para coordinar las labores.
¿Qué queda por hacer?
Mucho. Lo primero luchar contra el olvido, porque ya nos ha pasado otras veces que luego sale el sol y parece que perdemos la memoria. La parte positiva es que por fin hemos interiorizado que esto ya no ocurre cada 500 años, sino que el clima está cambiado y volverá a pasar pronto. Tenemos que levantarnos, recuperarnos y también blindarnos para paliar los efectos de la próxima.
Precisamente Orihuela, tu ciudad, es una de las peor preparadas para una riada. Además con el cauce del río Segura y la lejanía del mar el riesgo es aún mayor. ¿La Generalitat debería ayudar al Ayuntamiento para efectuar una gran obra antirriadas como sí se hizo en su día en Alicante?
El president Puig se está implicando de una manera personal en ello. Muy pronto vamos a anunciar el pistoletazo de salida del nuevo Plan Estratégico Antirriada territorial y medioambiental, ya no solo para Orihuela sino también para el conjunto de la Vega Baja.
Este nuevo Plan abarcará muchos sectores: economía, construcción, regadío, infraestructuras viarias, etc. Será realista, ambicioso y caro, así que habrá que buscar financiación en varias administraciones.
La Generalitat tiene que mostrar liderazgo para encontrar consensos y comprender de una vez que los intereses generales están por encima de los particulares, algo que no se ha hecho nunca en la Vega Baja y hemos visto muchos atropellos. Para salvar a un municipio no puedes olvidar a otro, pues el agua acaba arrasando todo lo que se encuentra a su paso.
«No es coherente que los agricultores que no han contratado seguro sean tratados igual que los asegurados»
El PP ha pedido que la Generalitat ayude también a los agricultores afectados que no tienen seguro.
Éste es un debate abierto. Ciertas voces piensan que es injusto tratar a todos igual, pues eso podría alentar a que en el futuro nadie contrate seguros. La Generalitat ha reforzado más que nunca el consorcio con fondos públicos para que los asegurados reciban la máxima cantidad.
¿Por qué hay gente que no se hace seguro? Ésta es la gran pregunta que catástrofes como la DANA ponen de relieve. No solo en la agricultura, también en la vida. Todos pensamos siempre que a nosotros no nos va a pasar, hasta que nos pasa.
Pedirle a una administración que equipare las ayudas a aquellas personas que han sido previsoras con las que no, yo creo que tiene una respuesta evidente. Defender políticamente lo contrario requiere una mejor explicación.
Además de todos los destrozos provocados por la DANA, lo frustrante es que apenas se pudo almacenar un 5 % del agua caída. El resto acabó todo en el mar. ¿No deberíamos de tener más infraestructuras destinadas a ello como el Parque La Marjal de San Juan?
Sí, La Marjal es un modelo de aprovechamiento de las lluvias torrenciales. Todos los expertos lo reconocen. En el Plan Integral Antirriada vamos a incluir este tipo de medidas, porque a la Vega Baja sí algo le falta y le sobra, es agua. Estamos siempre en el todo, o en la nada.
Por otra parte, los agricultores de la Vega Baja siempre se quejan de que la Confederación Hidrográfica del Segura tiene una visión demasiado murciana del tema del agua…
Detrás de esta catástrofe tan dañina, yo estoy empeñada en ver solo buenas noticias. La DANA ha vuelto a poner este debate sobre la mesa. Durante estos días hemos podido hablar mucho con los agricultores sobre los errores cometidos por la Confederación, los regantes, los promotores urbanísticos y las administraciones públicas.
Murcia debe admitir que el Segura también es un río de la Comunidad Valenciana, al mismo tiempo que en Valencia deben conocer que no solo tenemos el Júcar y el Vinalopó. Hasta ahora muchos ayuntamientos han tenido que gastarse sus recursos propios para limpiar los cauces del río, y encima la Confederación les ha multado por ello.
Ya te puedo anunciar que la Confederación va a abrir una sucursal en Orihuela. El local está listo. Por fin está entendiendo que existe un alejamiento entre ella y la Vega Baja. Además nosotros vamos a reunirlos por primera vez con todos los alcaldes alicantinos, de todo signo político.
Fuera ya de la Vega Baja, algunos agricultores del Medio Vinalopó están bastante molestos con la Generalitat por haber asumido la gestión del embalse del Toscar. ¿Se va a garantizar su acceso al agua?
El president Puig desea eso más que nada. Él siempre se ha posicionado al lado de los agricultores incluso contra ciertos mandatos de las Cortes Generales, como en el caso de los trasvases Tajo-Segura y Júcar-Vinalopó. En este caso concreto, la Conselleria de Agriculutura está en proceso de resolver este conflicto.
«Vamos a evitar la instalación de los depósitos en el Puerto de Alicante haciendo buena política»
¿Qué va a hacer la Generalitat para evitar que el Puerto de Alicante contamine más de lo debido y que se instalen los macrodepósitos de combustible?
La ciudad de Alicante aún no ha resuelto la cuestión de su propia fachada, seguimos sin saber si queremos un puerto como el de Algeciras o el de Venecia.
Sí que tenemos una foto fija: El rechazo absoluto tanto político como social a los depósitos. De hecho ya se ha formado una comisión mixta entre ayuntamiento y Generalitat para este fin. El president Puig y yo compartimos la misma opinión: Si los vecinos no quieren depósitos, no deben instalarse en el Puerto.
Sin embargo existen ciertos procedimientos administrativos que parecen imparables, venidos de los planes generales y portuarios aprobados en los años 90 los cuales obligan a cumplir con los lucros cesantes de las empresas que se amparan en sus contratos o concesiones previas adquiridas. Así pues, ¿cómo lograr que predominen los intereses ciudadanos sin conculcar los derechos millonarios de las empresas para que los políticos implicados no comentan posibles delitos administrativos? La respuesta se llama política, y política de la buena. En ello estamos y éste es mi compromiso.
«Abrir una sede de À Punt en Alicante no es una prioridad, antes debemos consolidar el medio»
¿Se va a abrir una sede de À Punt en Alicante?
Toda televisión pública busca hacer país, o en este caso comunidad. Pero hasta que À Punt no acabe de consolidarse como un proyecto de comunicación sólido, es mejor ser prudente. Venimos de una experiencia televisiva muy traumática y no debemos ponernos a aumentar los costes de producción y mantenimiento de forma inmediata.
¿Qué va a pasar con la Ciudad de la Luz? ¿Cuándo estará funcionando el Distrito Digital?
El director de Proyectos Temáticos está dando pasos importantes. Lo que pasa es que si la burocracia española es complicada, ni te cuento la europea. Nuestro objetivo es darle contenido cuanto antes, y el proyecto de Distrito Digital e Inteligencia Artificial es una gran apuesta.
De hecho ya se ha llevado allí la nueva Conselleria de Innovación, para que los ciudadanos sepan que este edificio es una referencia de Generalitat. También estamos abriendo sus puertas para celebrar grandes eventos.
La Ciudad de la Luz es otra de las grandes inversiones que se hizo en aquella época que parecía que el dinero era como el ‘maná’ y llovía del cielo. Este Govern ha tenido que terminar de pagarlos, acabarlos y hacerlos útiles. Como olvidar el famoso Aeropuerto de Castellón, aquel juguete al que le faltaban los aviones.
«En 2020 el Centro Cultural de Benidorm ya tendrá capacidad para acoger congresos de hasta 600 personas»
Hablando de grandes inversiones faraónicas del pasado. ¿Cuándo estará terminado el Centro Cultural de Benidorm? Hosbec se ha quejado públicamente de que la ciudad pierde 42 millones de euros al año por no tener un sitio donde albergar congresos.
Perdimos millones en la época en la que se planificaban grandes cosas que no se terminaban o no servían para nada. Ahora nuestra ‘conselleria invisible’ que acapara más presupuesto es la deuda pública.
Es evidente que Benidorm necesita este edificio que alguien soñó alguna vez, se hizo las fotos pertinentes pero luego nos dejó el esqueleto a medio hacer. Las obras ya se han recomenzado en octubre. Para 2020 queremos tener habilitada una primera fase con un auditorio de casi 600 plazas. Todo lo demás ya se irá añadiendo, no sé si será en esta legislatura.
«Elche cobrará la deuda histórica de la Generalitat por las expropiaciones de la UMH, aunque esto irá despacio»
Respecto a Elche. ¿Abonará la Generalitat durante esta legislatura la deuda histórica de 47 millones de euros que mantiene con el Ayuntamiento por los terrenos expropiados de la UMH?
Esta cuestión la están viendo el president Puig y el alcalde de Elche. Lo más probable es que la devolución se haga presupuestariamente poco a poco, porque es una cantidad muy grande. Si hay voluntad de todos, seguro que la negociación llega a buen puerto. Los temas que solo son dinero no nos generan ningún conflicto, solo necesitan de tiempo.
«Es cierto que existe centralismo hacia Valencia, pero la Vega Baja también siente que Alicante no le escucha»
¿Existe demasiado centralismo hacia Valencia en nuestra comunidad?
Al respecto pienso tres cosas a la vez: Sí existe, es inevitable, y ahora se está descentralizando más que nunca. En realidad cada uno de nosotros sentimos que los demás están lejos, pero sin darnos cuenta también alejamos a otros. La Vega Baja cree que Alicante no le escucha, Alicante lo cree de Valencia, Valencia lo cree de Madrid, y Madrid lo cree de Bruselas.
Dicen que Alicante es el sur, pero yo como vegabajera siempre me he sentido que soy del ‘sur del sur’. Puig ha sido el presidente que más veces ha ido a la comarca, no solo ahora por la DANA, ya lo hacía antes. Que me haya nombrado a mí para este cargo también ha sido en parte por esto. Él es de Morella, y sabe bien lo que es ser del ‘norte del norte’.
Cuando visitamos los pueblos de montaña de l’Alcoià enseguida nos damos cuenta de las diferencias que existen respecto a la Vega Baja. Ellos me suelen hablar en castellano, y yo les respondo que lo pueden hacer en valenciano si quieren. Esto es hacer comunidad. Todo lo demás son frentismos y demagogia política que no nos lleva a ninguna parte. Saber lo que nos une y que el habitante de Pilar de la Horadada sepa que es igual de valenciano que el que vive al norte de Castellón.
Recientemente Inspección de Trabajo ha detectado que Presidencia está empleando falsos becarios que en realidad son trabajadores sin cotizar como tales en la Seguridad Social. Me ha sorprendido escuchar al president Puig declarar que va a suprimir las becas. ¿No sería una mejor solución dar de alta a estos becarios?
Que yo sepa, lo que ha dicho que es que va a suprimir las becas para que en su equipo solo haya personas que estén bien remuneradas y la dignidad laboral permanezca por encima de todo. Si serán becarios o no dependerá de las reivindicaciones sindicales. Personalmente yo creo que el president ni siquiera estaba enterado de esta circunstancia.