El sistema nervioso es una red compleja de nervios y células especializadas (neuronas) que envía señales eléctricas desde el cerebro y la médula espinal hasta las distintas partes de nuestro cuerpo. Está compuesto por el cerebro, la médula espinal y el conjunto de todos los nervios del organismo. Además, se considera que está dividido en dos partes: el sistema nervioso central y el sistema nervioso periférico.
El sistema nervioso central está formado por el cerebro, la médula espinal y los nervios. Por otra parte, el sistema nervioso periférico está compuesto por neuronas sensoriales, ganglios (un tipo de neuronas) y nervios que conectan con el sistema nervioso central.
Asimismo, debemos diferenciar entre el sistema nervioso voluntario y el sistema nervioso autónomo. El sistema nervioso voluntario es el encargado de captar información del exterior a través de los sentidos para dar una respuesta en forma de movimiento o acción, mientras que el sistema nervioso autónomo controla la acción de las glándulas y las funciones del sistema respiratorio y circulatorio entre otros.
Este sistema es el encargado de regular ciertos procesos corporales como la presión arterial y la frecuencia respiratoria. Además, también conecta el cerebro y la médula espinal con los músculos y los receptores sensoriales de la piel.
Funcionamiento del sistema nervioso
Los nervios son las estructuras conductoras que comienzan en el cerebro y se ramifican a todas las partes del cuerpo. Las neuronas (que son las células del sistema nervioso) envían señales a otras células a través de fibras delgadas (axones) que liberan una sustancia química conocida como neurotransmisor.
Según Sebastian Seung, profesor de Neurociencia Computacional en el Massachussets Institute of Technology, los seres humanos poseemos más de cien mil millones de neuronas y más de mil millones de conexiones neuronales en el cerebro, aunque el número exacto y la ubicación pueden variar.
Por otra parte, un estudio publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences ha concluido que los cerebros de las personas altamente creativas tienen más conexiones entre tres regiones específicas del cerebro que los pensadores menos creativos.
Cuando las neuronas sensoriales reaccionan a estímulos físicos como el sonido, la luz o el tacto, estas envían retroalimentación al sistema nervioso central sobre el entorno alrededor del cuerpo. Al mismo tiempo, las neuronas motoras que se encuentran en el sistema nervioso central o en los ganglios periféricos transmiten señales para activar los músculos o las glándulas.
También podemos encontrar en el sistema nervioso a las células gliales que, según el Instituto de Salud y Ciencias de la Universidad de Oregón, son las encargadas de apoyar, proteger y nutrir a las células nerviosas.
Rocío Sánchez Montilla