Los datos publicados por el Portal de Información ARGOS de la Comunitat Valenciana relativos al paro en Altea no podían dejar una peor noticia para los vecinos de la Villa Blanca. El parón causado por la crisis sanitaria de la covid-19, y su consiguiente contagio a la economía internacional, ha elevado las cifras del desempleo hasta unos guarismos para los que hay que viajar muy atrás en el tiempo para encontrar una situación similar.
En concreto, 2020 se despedía, según los datos de la propia Generalitat Valenciana, con 1.999 personas en situación de desempleo en Altea, una cifra que sólo se vio superada en el trienio 2012-2014 cuando se superaron los 2.000 desempleados en cada uno de esos ejercicios que, recordemos, coincidieron con los años más duros de la crisis económica surgida del estallido de la burbuja de la construcción.
Sin embargo, y aunque los datos oficiales todavía no ofrecen una foto real de esta situación, la realidad puede ser todavía mucho más dramática si tenemos en cuenta la gran cantidad de personas que han despedido el año incluidos en un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), muchos de ellos en esa situación desde marzo.
El turismo, devastado
Como decimos, por el momento no existen datos definitivos sobre el número exacto de personas que se encuentran en un ERTE en la Villa Blanca, pero la imagen general de España no da muchos motivos para ser optimistas ya que el sector del turismo, la principal industria de la comarca de la Marina Baixa y, por lo tanto, también de Altea, es, con diferencia, el peor parado en términos globales.
Según los datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, los servicios de alojamiento, la hostelería y la restauración concentran, a nivel nacional, más de un cuarto de millón de personas adscritas a un ERTE. Si a esas cifras se añaden los trabajadores del comercio mayorista y minorista que no han vuelto a sus puestos de trabajo, la cifra alcanza los 374.815. Según estos datos, comercio, hostelería y turismo representan el 46% del total de ERTE en España.
Cerrando el objetivo al entorno más cercano que permiten los datos ya publicados, la provincia de Alicante ha registrado en 2020 (a falta de los datos de diciembre) un total de 26.758 expedientes que afectan a 138.940 trabajadores. Pero estos fríos números guardan en su interior una bomba de relojería en forma de un problema mucho mayor: el enorme riesgo de que, cumplidos los plazos de prórroga, muchos de esos ERTE se conviertan en ERE y, por lo tanto, un alto porcentaje de esas personas se sumen, hablando ya a nivel local, a esos 1.999 desempleados que cuenta Altea al despedir el año.
Altea despidió el año 2020 con una tasa de desempleo superior al 13% según los datos oficiales
Tasa de paro nunca conocida
Pero la cantidad de personas que, pudiendo y queriendo hacerlo, no pueden trabajar es sólo una parte de la complicada ecuación que refleja la realidad laboral de la Villa Blanca. De hecho, el dato más preocupante –insistimos, sin poder contar a las personas adscritas a un ERTE– lo arroja la tasa de desempleo, es decir, el porcentaje de personas en edad laboral que no tiene acceso a un puesto de trabajo.
En ese sentido, Altea despidió el último año con un desempleo que alcanzaba, siempre según los datos más recientes de ARGOS, el 13,71 por ciento de su población activa, la cifra más alta de este siglo superando el 13,4 por ciento registrado en el año 2012 y el 13,02 por ciento de 2013, los dos ejercicios más cercanos al de 2020.
En el caso de las mujeres la tasa de paro roza el 55% en Altea
Con nombre de mujer
Pero si hay un sector poblacional con el que el desempleo se está cebando de forma más enconada es con las mujeres. En el caso de Altea, el 54,88 por ciento de sus mujeres en edad de trabajar no pueden hacerlo. Curiosamente, en este caso la cifra es ligeramente más baja que antes del estallido de la crisis sanitaria (55,42 por ciento), pero ese pequeño espejismo no esconde el drama que supone que desde 2013 nunca se haya bajado del 50 por ciento en la serie histórica.
Por primera vez desde 2008 más del 11% de los menores de 25 años no encuentran un empleo en la Villa Blanca
Otro grupo que ha sufrido una importante ‘cornada’ en el ámbito del empleo es el de los menores de 25 años, que entre el mes de marzo y el final de año de 2020 han pasado de registrar un 7,13 por ciento de tasa de desempleo a un muy preocupante: 11,21 por ciento.
Cabe destacar que Altea jamás había presentado una tasa de doble dígito en lo referido al paro entre los menores de 25 años desde el año 2008, cuando el ‘crack’ del ladrillo elevó esa cifra al 10,53 por ciento, llegando a situarse, a finales de 2018, por debajo del 6 por ciento, momento en el que, aunque ligeramente, comenzó a aumentar hasta ahora que ha explotado de forma definitiva.
El paro en Altea en 2020
Población Activa en Altea: 12.115
Ocupados: 7.735
Tasa de actividad: 64,01%