En las páginas de esta misma edición de AQUÍ en l’Alfàs, el concejal de Turismo y Medio Ambiente, Luis Miguel Morant, muestra su preocupación por el hecho de que el modelo de turismo alfasino, centrado en la puesta en valor del Parc Natural de la Serra Gelada pueda, en sus propias palabras, “morir de éxito”.
El edil alfasino hace referencia al complicado equilibrio existente entre la explotación turística de ese entorno y su necesaria protección. Dos términos casi opuestos que, sin embargo, parecen haber sabido convivir, al menos hasta el momento, en el municipio.
Un total de 43 playas
Pero no es sólo el ayuntamiento el que persigue la cuadratura del círculo. Así lo demuestra la decisión de la Conselleria de Política Territorial que, en su recién publicado estudio ‘Valoración del interés geomorfológico, medioambiental y patrimonial de la costa valenciana’ , elaborado y coordinado por la catedrática de Geografía Física de la Universitat de València, Eulalia Sanjaume, la mayor autoridad en esta materia que existe en la Comunidad Valenciana, ha estimado que la cala del Metge y la cala de la Mina deben preservarse tal y como están, junto a otras 43 playas de la Comunidad Valenciana.
Pese a ser un gran atractivo turístico, l’Alfàs del Pi es consciente de la necesidad de evitar que el Parc Natural de la Serra Gelada «muera de éxito»
40 años de investigación
Se trata de dos calas ubicadas dentro del territorio del Parc Natural de la Serra Gelada y en el término municipal de l’Alfàs del Pi. El estudio, impulsado por la dirección general de Política Territorial y Paisaje, se ha realizado como complemento del Plan de Acción Territorial de la Infraestructura Verde del Litoral (Pativel), en vigor desde el 11 de mayo de 2018, pero que recientemente fue tumbado -aunque ante esta decisión cabe recurso de casación ante el Tribunal Supremo- por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).
Más allá de esos vericuetos legales, este trabajo ha permitido catalogar los 474 kilómetros de costa de la Comunitat Valenciana en función de sus características geomorfológicas, medioambientales y patrimoniales. De esta manera, el litoral valenciano ha quedado dividido en “36 sectores: 34 continentales y 2 insulares, que incluyen tramos identificados y divididos por hitos geomorfológicos como desembocaduras fluviales, o tómbolos”, en lo que supone la culminación a 40 años de investigación.
Catalogación por importancia
Los tramos entre hitos geomorfológicos son los que se han clasificado en categorías, tal y como explica la propia Eulalia Sanjaume, “del dos al diez y organizado en fichas para que simplemente leyéndolas se pueda conocer la importancia que tiene cada sitio”.
En ese sentido, cabe destacar que “el grado diez de una zona de litoral supone que es enteramente natural y de valor excepcional, como los acantilados bajos del norte de Vinaròs, o playas y costas prácticamente vírgenes”, tal y como añade Julián Soriano García, responsable junto a Sanjaume del equipo técnico que ha elaborado el estudio.
«Una mejor comprensión del territorio permitirá relanzar el modelo turístico cuando se supere la pandemia y mitigar los efectos del cambio climático» A. España
Mejor comprensión turística
La provincia de Alicante concentra la mayor parte de los 45 tramos catalogados con esa máxima categoría de grado diez que, tal y como refleja el estudio, deberían preservarse a toda costa. Unas conclusiones que todos los ciudadanos pueden ya consultar a través del documento publicado en la web de la dirección de Política Territorial y Paisaje.
En la misma línea de preocupación que mostraba el responsable local del área de turismo, Arcadi España, Conseller de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, considera que el trabajo permitirá “una mejor comprensión del territorio para relanzar el modelo turístico cuando se supere la pandemia, así como para mitigar los efectos del cambio climático”.
El estudio recalca que deben mantenerse tal y como están en la actualidad
Protección asegurada
Aunque la realidad pandémica impidió que l’Alfàs del Pi celebrara en 2020 la mayor parte de los actos previstos por el 15º aniversario de la declaración del Parc Natural de la Serra Gelada, la inclusión de las dos calas alfasinas en las conclusiones de este estudio permiten volver a poner en valor la gran importancia que este paraje tiene no sólo para el turismo local, sino también en el ámbito de la concienciación social sobre la importancia de la defensa del medio ambiente.
Tal y como se destaca desde el consistorio alfasino, la cala del Metge y la cala de la Mina, que ahora son objeto de recomendación de una protección, “ya la tienen asegurada por el hecho de pertenecer al Parc Natural de la Serra Gelada, pero también por los muchos esfuerzos que a nivel local se realizan para la preservación de nuestro entorno”.
Así, tanto los autores del estudio como los responsables locales coinciden en destacar ambas calas y su entorno como “algo muy especial. No en vano, son áreas preservadas de masificaciones y que están enclavadas en el único parque marítimo terrestre de la Comunidad Valenciana”.