Entrevista > Gema Pérez Ruiz / Deportista de alto rendimiento (Orihuela, 27-febrero-1991)
Gema Pérez empezó a jugar al rugby hace cinco años en el equipo de la Universidad de Alicante. Tras un algún parón deportivo fruto de una lesión, fichó por el vallisoletano Club de Rugby El Salvador. Formaron parte de la élite del rugby nacional, pero la temporada anterior descendieron de categoría. Aunque el rugby es su principal prioridad, está terminando la carrera de Arquitectura y confiesa querer seguir formándose en otros ámbitos como la Psicología.
Empezó hace cinco años en el equipo de la Universidad de Alicante
Este año arranca tu tercera temporada en el Club de Rugby El Salvador, ¿cómo está siendo la experiencia?
Me siento segura y feliz de formar parte de esta gran familia que decidió acogerme. En este momento nos encontramos en la segunda categoría nacional; competir a estos niveles marca la diferencia entre un ‘hobby’ y una posible profesión, ya que es mucho más exigente, en cualquier aspecto, respecto a jugar en regional o en territorial.
Un deporte que a día de hoy sigue teniendo numerosos prejuicios en nuestra sociedad.
La realidad es que este deporte es de mucho contacto, pero no es agresivo. Obviamente el contacto implica fuerza; de ahí que sea básico ir al gimnasio… ¡pero no para hacer daño, sino para que no te lo hagan a ti! Un buen placaje técnico puede resultar muy espectacular, pero no tiene por qué ser lesivo.
Todos los años se actualizan las normas para que sea más seguro para el jugador. De ahí que los placajes, por ejemplo, tengan que ser por debajo de la línea de los hombros.
¿Cómo se ha desarrollado la temporada deportiva?
Ha sido un poco rara porque empezamos en enero cuando normalmente suele ser en octubre. Destacaría la mejora que hemos hecho como equipo. Nosotras descendimos la temporada pasada; la meta por parte del club era mantenernos arriba en la tabla, y es algo que hemos conseguido… pero además siempre hemos ido a ganar, y solo hemos perdido dos partidos, por un punto, en toda la liga. Hemos conseguido consolidarnos como equipo y eso para mí es lo más importante.
«Llevo tres años formando parte de la selección autonómica»
Durante esta corta pero intensa trayectoria deportiva has llegado a formar parte de la selección autonómica.
Llevo tres años en selecciones autonómicas. El primero fue con la Comunitat Valenciana: ganamos la liga B del Campeonato de Selecciones Autonómicas, saliendo victoriosas de todos los partidos, y esa experiencia marcó un antes y un después en mi vida profesional.
De lo que más orgullosa me siento es de que me nombraran capitana de las delanteras; es una responsabilidad que nunca había llegado a tener y que hizo de mí una mejor jugadora.
¿Y los demás años?
Los otros dos he sido seleccionada con Castilla y León. Aunque el año pasado no se pudo jugar por la covid, esta temporada hemos ido a por todas. Hemos conseguido un equipo que ha merecido la pena, luchando todas por un mismo objetivo, dentro y fuera del campo. Eso, en un deporte como este, donde la confianza en la compañera de al lado es tan importante, nos ha hecho finalizar en segunda posición en el Campeonato Autonómico de España.
«Sería un sueño poder representar a mi país en unas Olimpiadas»
Después de que el rugby haya vuelto a ser olímpico tras 92 años de ausencia, ¿te ves como miembro del equipo nacional?
Aún no he tenido el placer de jugar en el equipo nacional. Pienso que es porque empecé muy tarde a practicar este deporte, y, aunque soy bastante buena en lo mío, primero tengo que mejorar un par de ‘skills’, que ya estoy en ello.
Para mí sería un sueño hecho realidad representar a mi país y llevar mis colores haciendo lo que más me gusta, ya sea en unas Olimpiadas, en los Europeos o en los Mundiales, ya que juego tanto a 7 como en 15.
Pero ya has tenido tus primeras experiencias internacionales…
He jugado contra otros países como Portugal en varios torneos de rugby 7. Recientemente he estado en Polonia representando a España en el ‘Couching Rugby 7 for Girls’, un proyecto subvencionado por Erasmus+ para mejorar el rugby 7 femenino en Europa. He tenido la oportunidad de entrenar con el equipo polaco, una experiencia muy grata y divertida para todas.
Una visita que lo cambió todo
Hace seis años salió con unos amigos de La Vila que habían practicado este deporte anteriormente. Un día, entrenando para una carrera de atletismo, el entrenador de rugby femenino le propuso entrenar en su equipo, a lo que Gema respondió que no. Sin embargo, un año después se fue a estudiar a Alicante, buscó un deporte que cuadrase con su horario lectivo y se decidió a probar el rugby en el equipo universitario.