Entrevista > Fernando Portillo / Concejal de Urbanismo, Cultura y Patrimonio
La concejalía de Urbanismo ha puesto en marcha una batería de ayudas para la adquisición y rehabilitación de viviendas y solares en el casco histórico de Petrer.
A través de esta estrategia de revitalización, impulsada por el ayuntamiento, se contemplan dos líneas específicas de actuación: una destinada a la compra de viviendas y solares, con subvenciones de hasta 18.000 euros; y una segunda encaminada a la rehabilitación, compatible y complementaria con la anterior, que puede alcanzar los 20.000 euros de ayuda.
Recuperar el esplendor
La intención es que estas ayudas se mantengan en el tiempo durante los próximos años y para ello se ha movilizado una partida económica inicial de 250.000 euros, ampliables hasta los 400.000. Además, para despertar el interés y acelerar el proceso, se contempla el pago del 40 por ciento de la subvención por anticipado en el momento mismo de presentar la documentación.
El objetivo es atraer habitantes al casco antiguo, una zona emblemática de Petrer que ha conocido décadas de declive por la pérdida de población y de conflictos continuos entre vecinos y cuartelillos, y que ahora quiere recuperar el esplendor de antaño de la mano de una iniciativa que promete revitalizar un barrio que en el tiempo a veces parece haberse detenido.
¿A quién está dirigido el plan de rehabilitación del casco histórico?
Está abierto a todo tipo de gente de cualquier edad y población, aunque lo que queremos es potenciar el perfil de público joven, porque somos conscientes de las dificultades que este grupo de edad tiene para comprar una vivienda puesto que los bancos cubren solo hasta el 80 por ciento del préstamo.
«Lo importante es que todas las viviendas del casco histórico las podamos tener en uso»
¿Por qué se actúa principalmente en el casco antiguo y no en otras partes de la localidad? ¿Qué problemática hay?
El casco antiguo tiene una calidad de vida enorme, pero también una serie de inconvenientes; empezando por el coste de unas reformas que son más caras que en el resto de Petrer ya que no está permitido meter maquinaria pesada por estas calles.
Lo mismo que ocurre con las fachadas y con las cubiertas, en las que hay que poner un determinado material que está regulado. Luego, te pones a cambiar un suelo y pueden salir restos arqueológicos, por lo que tienes que paralizar la obra y hacer una excavación que en muchos casos es bastante costosa.
¿En qué puede influir la presencia de los cuartelillos?
También está este tema de los cuartelillos que, aunque ahora está regulado, hace años provocaron una despoblación del casco antiguo y una burbuja inmobiliaria al subir en exceso el precio de las viviendas. Tampoco podemos olvidarnos de que muchas personas mayores difícilmente se van a comprar una casa en un lugar en el que no puedan tener acceso en coche.
A pesar de estos problemas, afortunadamente la tendencia está cambiando últimamente y se está empezando a ver a algunas familias jóvenes que están adquiriendo viviendas en la zona, porque esas incomodidades no les importan tanto.
«La relación entre vecinos y cuartelillos ha mejorado bastante en los últimos años»
¿Crees que esta iniciativa servirá para que la gente dé el paso de vivir en el casco antiguo?
Yo creo que sí. La idea inicial era rehabilitar nosotros mismos las viviendas para luego venderlas, pero la medida no la terminábamos de ver, así que hemos preferido hacerlo vía subvenciones.
Pensamos que de este modo puede venir más gente y se pueden rehabilitar más viviendas. De hecho, desde que el mes pasado lo anunciamos, no hemos parado de recibir llamadas de personas interesándose en cómo acceder a estas ayudas.
¿Qué porcentaje hay de viviendas no habitadas?
Es alto. Hay alrededor de un centenar de cuartelillos y unas setenta u ochenta viviendas más o menos que no están en uso, de las que la inmensa mayoría se pueden rehabilitar.
La mayoría de viviendas vacías se concentran en dos o tres calles
¿Cómo es la relación ahora entre cuartelillos y vecinos después de tantos años de desencuentro?
Desde 2005, como es sabido, no se pueden abrir nuevos cuartelillos en el casco histórico. Cuando en 2019 entró la nueva ordenanza y se implantó una comisión de mediación en la que estaban presentes la Unión de Festejos y la Asociación de Vecinos, la implicación entre las partes ha sido muy alta.
Hemos cerrado muchos cuartelillos, sobre todo los que no lo eran, que en realidad se trataba de locales utilizados por los jóvenes para hacer fiestas. A pesar de que la covid ha influido para calmar los ánimos, los casos de conflictos ya se habían conseguido reducir bastante en los últimos años.
Líneas de subvención
Existe una primera línea de subvención para la adquisición de viviendas y solares en el Casco Histórico Tradicional, compatible con la ayuda a la rehabilitación. Los requisitos son que sea para vivienda habitual y permanente y no tener otra vivienda en propiedad.
En esta línea la ayuda va del 25 por ciento con un máximo de 18.000 euros para quienes tienen un ingreso inferior a los 40.000 euros anuales, y del 20 por ciento con un límite de 15.000 para quienes superan esos ingresos.
La segunda línea de subvención está enfocada a la rehabilitación de viviendas y solares en la misma zona, y las ayudas van del 20 al 35 por ciento con un límite de 6.000 a 20.000 euros dependiendo de los ingresos del beneficiario y de si la vivienda es para uso habitual y permanente o no.