L’Alfàs ha acudido al encuentro internacional ‘Posidonia Erosion’ celebrado en Cerdeña, donde han participado los representantes más importantes en materia de gestión y conservación de las praderas de Posidonia en el litoral mediterráneo. Un foro de trabajo que ha contado con la participación del Ministro de Medio Ambiente de Cerdeña; la Gestora de Biodiversidad Marina de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, UICN; la Ministra chipriota de Agricultura y Desarrollo Rural; el Viceministro de Turismo de Chipre; los directores de áreas protegidas de Grecia, Francia, Croacia e Italia y en representación de España, Baleares, Altea, y el concejal de Playas y Medio Ambiente de l’Alfàs del Pi Luis Morant.
En dicho foro todos los asistentes se han adherido a la carta de compromiso, explica el concejal de Playas de l’Alfàs, Luis Morant para desde el Ayuntamiento: Proporcionar los recursos para financiar y utilizar las técnicas de gestión que promuevan la gestión sostenible y la conservación de los ribazones de Posidonia, y los ecosistemas del litoral Mediterráneo; desarrollar estudios de base que nos permitan entender las técnicas de gestión que promocionen la conservación de los ribazones de Posidonia y de los ecosistemas costeros antes de decidir que técnicas operativas se vayan a utilizar. A desarrollar e implementar actividades educativas entre los usuarios y usuarias de la playa, referente a los ribazones de Posidonia y sus praderas, y a promocionar y financiar actividades de estudio que aumenten el conocimiento sobre nuestras relaciones con Posidonia Oceánica y los sistemas del litoral.
El pasado 6 de mayo, ha recordado Luis Morant, l’Alfàs acogía el I Encuentro de Trabajo en la Costa Blanca, para la promoción del valor turístico y ambiental de las playas de posidonia, y la secretaria autonómica de Emergencia Climática y Transición Ecológica, Paula Tuzón, anunciaba el decreto aprobado por la Generalitat para regular los usos que puedan afectar las praderas de posidonia oceánica, y convierte a la Comunitat Valenciana en la segunda comunidad autónoma en aprobar una norma específica de protección de lo que se considera el bosque del Mediterráneo. Una extensión de más de 30.000 hectáreas de esta especie de fanerógamas marinas endémica de la zona, que tiene un importante valor ambiental. Para ello, el decreto aprobado contempla mapear la presencia de praderas de posidonia con una cartografia actualizada, así como elevar la vigilancia sobre las amenazas, como los fondeos incontrolados, las fuentes de contaminación o los cambios de salinidad. Lo cierto es que esta planta marina, que no un alga como comunmente se piensa, es un aliado contra el cambio climático, ya que son captadores de CO2. Además, suponen una barrera natural frente a la regresión de la costa, son bioindicadores de la buena calidad de las aguas y fuente de una rica biodiversidad marina que acoge a más de 1.000 especies de fauna y 400 de plantas. A partir de ahora, los ayuntamientos deberán solicitar una autorización previa para proceder a su retirada. Según el director del Instituto de Ecología del Litoral, Gabriel Soler, estas hojas secas de posidonia que recalan en la orilla poseen sedimentos naturales de la playa. Cuando se eliminan el 80% es arena y, por tanto, su eliminación contribuye a la erosión y la pérdida de calidad de la playa.