Entrevista> Sandra Fernández / Fallera Mayor de Alfafar (Alfafar, 13-noviembre-1987)
Las Fallas vuelven, aunque nunca dejaron de estar con nosotros a menor escala por restricciones o simplemente en nuestras cabezas y corazones, porque nunca dejamos de mantener la esencia de lo que somos.
Pero este año han vuelto con todos sus actos, visitas, representantes, sonrisas y alegrías. Sandra Fernández está disfrutando de estos meses y los que restan hasta que lleguen los días clave, unas fechas para la que se prepara sin ocultar la responsabilidad que tiene sobre sus hombros.
¿Cómo te sientes al ser la Fallera Mayor o lo que podríamos decir que es la máxima representante de la sociedad para muchos ciudadanos de Alfafar?
Es un orgullo poder representar a mi pueblo y a toda la ciudad de Alfafar. Al principio tenía claro que me quería presentar, pero tenía alguna duda de que pudiera hacerse realidad y no me lo creía hasta que me llamó Juan Ramón. Hasta que no te llama el Alcalde y te lo dice no te lo terminas de creer.
«María y yo no necesitamos muchas palabras para saber lo que queremos la una de la otra»
Imagino que tendrías el apoyo de familia y amigos para lo que se te venía encima desde el día en que fuiste elegida, sabiendo que llegaba un año maravilloso pero de mucho trabajo.
He tenido el apoyo de familia amigos, mi falla, de todos… Además este año será aún más especial porque, aparte de compartirlo con María Ramón, se da la circunstancia de que la presidenta es mi hermana y para ella también ha sido muy especial.
Hablabas de María Ramón, la Fallera Mayor Infantil. Ambas compartís Comisión fallera, es decir, habéis hecho pleno en Parque Alcosa. Seguro que habrá sido muy especial ser compañeras de viaje durante tanto tiempo y hasta el final.
De comisión y reinado, estamos juntas desde la pandemia, desde el 2020 no nos hemos separado, es una ayuda para todo lo que viene.
¿En qué ha sido de más ayuda que llevéis tanto tiempo juntas?
Ayuda la confianza y que nos conocemos muchísimo, no necesitamos muchas palabras para saber lo que queremos la una de la otra. Eso es algo que en los actos es sirve mucho y se agradece.
¿Os han hecho comentarios o bromas por el hecho de que ese tándem y que ‘acaparéis’, en el mejor de los sentidos, las Fallas?
Nos han dicho que lo vamos a pasar muy bien las dos juntas, y nos dicen que nos gusta mucho el reinado y no queremos compartirlo, todo para nosotras (risas).
«Lo que más dolor de cabeza, en el buen sentido, me va a dar es la cridà»
Además se tratará de las primeras Fallas postpandémicas al cien por cien, ya que se vienen produciendo todos los actos desde junio con normalidad. ¿Es una responsabilidad a la par que un alivio? ¿Cómo se vive esta vuelta a las Fallas con normalidad?
Con ganas e ilusión. Cierto es que la ilusión nunca la perdimos, pero poder vivir ya bien de verdad unas Fallas como van a ser estas… las espero con muchas ganas.
¿Qué es lo que más echabas de menos y que ahora piensas ‘menos mal que sí lo voy a poder vivir’?
Hay tantas cosas… Realmente poder vivir una Cridà como antes, o la ofrenda también. Eso es lo que más, porque estar con nuestra gente sí hemos estado, aunque ahora se notará mucho más al no encontrarnos con la pandemia y se disfrutará todo mucho más.
¿Lo que de verdad faltaba este tiempo era poder abrirlo a mucha más gente?
Eso es lo que más se echaba de menos, sin duda.
¿Cómo han sido estos meses desde que fuisteis elegidas el pasado junio?
Lo he vivido muy bien, aunque es cierto que hasta que no llegó la proclamación he estado muy tranquila, estaba con calma, lo tenía todo asumido… pero todavía no había llegado realmente. A partir de septiembre es cuando ya dices, ahora sí que sí, ya es una realidad.
¿Son muchas las noches que cuesta dormir por pensar en todo lo que está por llegar?
Lo que más dolor de cabeza me va a dar es la cridà, es lo que más me va a quitar el sueño.
«Que la presidenta sea mi hermana es muy bonito y para ella también ha sido muy especial»
¿Por qué es eso lo que más te inquieta?
Es una responsabilidad muy importante que no tienen todas las falleras mayores de las fallas, y hablarle a todo el pueblo de Alfafar es lo que más me preocupa, lo que más respeto me da.
¿No será de esos momentos en que, pese a los nervios estos meses previos, cuando llegue la hora querrás que se pare el mundo y durase para siempre?
Ese es un momento muy emocionante y muy bonito, y pocas personas tienen la posibilidad de tenerlo, pero claro, hasta que llegue ese momento estás ahí con los nervios.
¿Qué dirías ahora mismo si estuvieras en el balcón, una ‘pre cridà’?
Les diría que disfruten al máximo porque el tiempo pasa volando, que no pierdan ningún momento.
Hablabas de esa relación especial con María Ramón, imagino que serás como su hermana mayor después de tantas experiencias vividas juntas. ¿Qué te gustaría decirle?
Que disfrute cada momento, que no deje de sonreír y soñar, como ella siempre me dice, y que recuerde que yo siempre estaré a su lado, no la dejaré. Nunca le soltaré la mano, como siempre le he dicho.
Todavía faltan unos meses para la gran cita, ¿de qué manera animarías a los vecinos de otros municipios para que vengan a las Fallas de Alfafar?
Les diría que prueben a vivirlas que seguro que les van a gustar y que las disfruten.