Entrevista> David Rubio Valero / Maestro de Primaria y de Música (Albatera, 18-junio-1983)
El 27 de noviembre se homenajea en España a las maestras y maestros. Por este motivo, desde este medio hemos hablado con David Rubio, profesor con casi quince años de experiencia que ha trabajado en diferentes centros educativos de la comarca.
Por las tardes ejerce como maestro en una escuela de música, por lo que pasa todo el día rodeado de niños. Él responde, desde su perspectiva, a las cuestiones planteadas sobre la educación hoy en día.
¿Por qué decidiste ser maestro?
Diría que no lo decidí. Es algo que siempre me ha gustado, que me llena y motiva. Trabajar con niños hace que ir a trabajar sea algo nuevo cada día, son impredecibles.
Por otro lado, cuando ves que alguien ha aprendido una cosa que tú le has enseñado hace que te sientas bien, satisfecho, es difícil de describir esa sensación.
«Es importante enseñar al alumnado a hacer un buen uso de las tecnologías»
¿Dirías que ser docente es una profesión mucho más vocacional que otras?
Pienso que la vocación reside en cada persona y despierta interés para dedicarse a una cosa u otra. Creo que en cualquier profesión te tiene que gustar lo que haces.
Para ser un buen docente tienes que sentir vocación, pues es una profesión en la que cientos de vidas pasarán por tus manos y tu experiencia les servirá de inspiración.
Has trabajado en diferentes colegios, ¿dirías que los valores del centro influyen en la forma de enseñar? ¿O tiene libertad el profesor para dar sus clases?
Cada colegio es un mundo y cada centro tiene su propio proyecto, en el que se citan unas pautas a seguir para llevar a cabo la enseñanza y crear una unión entre el profesorado, el centro y las familias. El documento es redactado por los mismos profesores y aprobado en el consejo escolar, lo que da un poco de libertad a la hora de cómo trabajar, pero intentando guiar en una misma metodología a seguir.
Diría que el centro orienta, pero la enseñanza es flexible y se adapta a las necesidades del alumnado.
«Cada centro tiene su propio proyecto redactado por los mismos profesores y aprobado en el consejo escolar»
¿Apoyas el uso de la tecnología en la enseñanza?
Sería un ignorante si en la época en la que estamos no hiciese uso de ella. Las nuevas tecnologías ofrecen gran variedad de recursos que hacen de la enseñanza algo más dinámico y motivador para nuestro alumnado.
Hoy disponemos de pizarras digitales, acceso a internet, aulas de informática, tablets… Herramientas con las que podemos desde crear contenido para nuestras clases, adaptar la enseñanza a las necesidades del alumno e incluso mantener contacto con las familias.
Aunque también considero muy importante enseñar al alumnado a hacer un buen uso de ellas.
Valorando desde tus inicios hasta la actualidad. ¿Ha cambiado el valor que tiene la figura del maestro en las aulas?
El profesorado vive en una constante adaptación para afrontar las necesidades que se le presentan en cada curso.
Respecto al valor que se le da al profesor siempre depende de las familias y la implicación que éstas tengan en la educación de sus hijas e hijos. Hay quienes valoran nuestra labor y quienes piensan todo lo contrario.
¿Qué cualidades debe tener a tu parecer un buen maestro?
Principalmente debe saber transmitir su pasión por la enseñanza, despertar el interés por aprender, la curiosidad, debe ser creativo, innovador y ofrecer infinidad de recursos para hacer del aprendizaje algo divertido.
Destacaría la empatía como una cualidad importante para transmitir valores y conocimientos, además de ofrecer seguridad y confianza. Pero, sobre todo, debe ser amable, cariñoso, tener mucha paciencia y mostrar entusiasmo por su vocación.
«El profesorado vive en una constante adaptación para afrontar las necesidades que se presentan cada curso»
El papel de las familias es muy importante. ¿Se implican los padres en colaborar con los profesores en su etapa escolar?
Cuanto mayor sea su implicación en el aula más efectivo será el aprendizaje, pero dicha implicación depende de muchos factores como la disponibilidad, el horario o incluso el interés.
Personalmente, he podido observar que las familias se implican en mayor o menor medida dependiendo del centro o del profesorado, pues he trabajado en colegios donde los familiares colaboran dentro del aula diariamente, y otros donde los padres solo saben de la educación de sus hijos cuando la maestra les convoca a la reunión trimestral (si se presentan).
Es importante la implicación de las familias dentro y fuera del aula. Quiero aprovechar para felicitar a las asociaciones de madres y padres que trabajan codo con codo en dicha educación.
¿Algún consejo para los profesores que se inician en la escuela o aquellos que se están formando?
Animarlos a participar de esta experiencia y concienciarles de toda la paciencia que deben acumular. Si aman este trabajo, ¡adelante!
Y que no se desanimen, pues llegar al aula es un camino difícil pero, una vez dentro, la aventura comienza y podrán experimentar lo que se siente al ser docente y ver la sonrisa de un niño agradecido.