Las fiestas Navidad, los cumpleaños familiares cuando caen todos en el mismo mes, las vacaciones de verano …siempre hay fechas en las que se come más de normal. Al final, esas comidas abundantes se traducen en kilos de más y malestar en el estómago. Por eso, cuando sabemos de antemano que viene una época llena de celebraciones, hay que preparar el cuerpo para llevarlo lo mejor posible.
De igual forma el estrés y la ansiedad juegan en nuestra contra, ya que muchas veces se gestionan mal, con atracones de comida y alcohol en exceso. Pero los picos de ansiedad son pasajeros y no hay que focalizarse en la comida.
Qué hacer las semanas previas a las comilonas
Para no engordar demasiado ni sentirse hinchado constantemente es importante realizar un trabajo previo. Alimentación saludable, ejercicio y contención, podrían ser algunos de los puntos fuertes.
- Tener una dieta sana en la que estén muy presentes las verduras, legumbres, hortalizas, frutas y cereales. En realidad, esta es la pauta de alimentación que debería primar siempre, dejando los caprichos (azúcares en exceso) para contadas ocasiones. No obstante, los días previos a grandes atracones se puede intentar ingerir menos calorías de las habituales y comer “más sano de los normal”.
- Preparar al organismo con alguna dieta depurativa, que incluya muchas verduras y frutas.
- Desayunar fuerte, con alimentos que sacien, pero que no engorden mucho, como los cereales integrales o la fruta. Gracias a la fibra, por ejemplo, evitaremos picar entre horas.
- Realizar ejercicio físico. Lo ideal es ser constante, plantearse una meta y realizar una rutina diaria. Si vienen días de mucho comer, no está de más aumentar el tiempo que le dedicas al deporte, para compensar. Y aunque sea fiesta, hay que buscar un hueco para hacer ejercicio.
- Saber parar de comer. Muchas veces, durante los días señalados, comemos más de lo que el cuerpo nos pide. Por eso es importante saber decir que no, saber parar.
Consejos durante los días señalados
Una vez metidos de lleno en las celebraciones, también hay algunos consejos que pueden ayudar a evitar coger esos kilos de más que luego cuesta tanto quitarse.
- Hay que recordar que los días de celebración o festivos son los que son, y no los de antes o después. Es decir, si hay que pasarse comiendo que sea solo los días puntuales, no todos. Fuera de esos días señalados, la dieta debe ser saludable y sin excesos. Yes bueno ponerse como objetivo no engordar, para no caer demasiado en la tentación.
- Hay que utilizar la báscula con frecuencia (pesarse todos los días, incluso), para poder llevar un control y saber si nos estamos excediendo.
- Intentar participar en los menús o la elección de ellos. De esta forma podemos incluir alimentos que sean saludables.
- Dedicar un poco más de tiempo a la cocina para hacer en casa los dulces. Tendrán menos azúcar y serán más sanos que si se compran ya elaborados.
- No tener en casa bandejas con dulces (turrones, bombones…). De esta forma es más fácil no picar entre horas.
- Seguir con la rutina diaria de ejercicio y entrenamiento.
- No acudir a comidas o cenas señaladas con el estómago vacío. Al final, como tenemos más hambre, terminamos comiendo más.
- No hay que probarlo todo, se debe ser selectivo y así no nos llenaremos tanto. Hay que intentar seleccionar los alimentos más saludables. Hacer lo mismo con la cantidad, coger de poco en poco. Las comidas, mejor en plato pequeño. No hay que intentar llenar el plato, no hay necesidad.
- Controlar el alcohol que se toma. Las copas de más, los chupitos, los licores…son muchas veces los culpables del aumento de peso. Por eso siempre es bueno tener en la mesa agua.
- Si comemos despacio nos saciaremos antes.