El pasado 30 de abril se presentó oficialmente el Programa de Actuación Integrada (PAI) para la ampliación del Parque Empresarial de Elche, ubicado en las inmediaciones de Torrellano. Un nuevo trámite necesario para seguir avanzando en esta actuación que lleva proyectada desde hace ocho largos años, y que ahora por fin parece llegar al final del túnel burocrático que conecta con el comienzo de las obras urbanísticas.
“Estamos ya en la última fase de este proyecto que es crucial para el futuro de Elche. No hay espacio mejor en la provincia; junto a un aeropuerto, la A-7 y cerca del Puerto de Alicante. Vamos a correr todo lo que podamos, pero siguiendo unos pasos” manifestó el alcalde Pablo Ruz en la presentación.
Se calcula que podrán instalarse unas 150-200 empresas nuevas
Nuevas empresas
El citado PAI establece que la superficie de expansión abarcará 570.000 m2 en el sector E-49, todo ello con un presupuesto de 45 millones de euros. Un 50% será para suelo industrial y la otra mitad para la implantación de oficinas. La empresa pública Pimesa será la encargada de ejercer como agente urbanizador tal y como ya ocurrió en anteriores ampliaciones.
“Hablamos de una superficie bastante notable que nos permitirá disponer de una gran oferta de suelo de calidad para el sector empresarial. En total serán hacia una treintena de parcelas, pero en principio contamos con que se instalen un número bastante mayor de empresas dependiendo del tamaño que ocupen sus naves” nos comenta Antonio Martínez, gerente de Pimesa.
En la actualidad ya operan aquí unas 750 sociedades en una superficie de 2,7 millones de metros cuadrados. Se calcula que este próximo aumento de suelo permitirá la implantación de entre 150 y 200 nuevas compañías.
Reducción de costes
Por otro lado, se han introducido una serie de cambios respecto al proyecto original con el fin de abaratar los costes, y por lo tanto el precio del suelo disponible. Concretamente se ha conseguido un ahorro de seis millones de euros, a pesar de la subida de los precios de los materiales de construcción padecida en los últimos años.
“Hemos visto algunas posibilidades de disminuir el coste sin bajar la calidad del parque empresarial. Por ejemplo, hemos suprimido una partida para redes de agua depurada, dado que este suministro actualmente no llega hasta aquí. Igual que se ha eliminado una pasarela que no era tan necesaria para cruzar, se ha rediseñado la zona verde y se han minimizado los movimientos de tierra” nos cuenta Martínez.
Otro de los cambios más importante es que no habrá una gran manzana central de 200.000 m2 tal y como se proyectó en un primer momento. “Hay que hacer una reparcelación y para generar un terreno tan grande necesitaríamos a un gran propietario. Esto es imposible de realizar con muchos pequeños propietarios implicados. Por eso preferimos urbanizar dos viarios que darán lugar a tres parcelas grandes de 80.000, 40.000 y 60.000 m2” nos comenta el gerente de Pimesa.
«Contamos con empezar las obras en 2025» A. Martínez (Pimesa)
Casa de la Mina
De igual forma se actuará sobre el complejo histórico de la Casa de la Mina, donde se encuentra la Torre Ibarra, para rehabilitar sus inmuebles que datan del siglo XIX o principios del XX.
“Por el momento aún no se ha decidido que uso se le dará a este complejo en el futuro. Tal vez tenga fines turísticos, de restauración u otro. De momento vamos a efectuar una rehabilitación estructural ya que está en un proceso de deterioro importante, pero sin dotarle de contenido en su interior. Es una pieza muy relevante desde el punto de vista patrimonial y paisajístico” nos comenta Martínez.
Reparcelación y obras
Si bien ahora se ha dado un paso muy importante, todavía habrá que esperar algún tiempo para ver empezar las obras. El siguiente proceso será la aprobación de la reparcelación en el pleno municipal, lo cual se hará tras el verano.
“Por desgracia el urbanismo es muy lento y llevamos ocho años solo con los trámites. Entiendo que la gente tenga ganas de verlo terminado. Ya estamos trabajando a nivel técnico con la reparcelación, pero por ley tenemos que dar un plazo a los propietarios para que decidan si sumarse o no. Cuento con que las obras comenzarán en 2025” nos indica Martínez.
Una vez den comienzo los trabajos, el plazo oficial que se ha estimado en el proyecto es de tres años. No obstante en Pimesa confían en poder reducir esta duración.
La Generalitat ha anunciado que el futuro E-TRAM conectará Elche con el Parque Empresarial y el aeropuerto
Capacidad de adaptación
El Parque Industrial de Elche nació dedicado casi exclusivamente a la industria del calzado, pero en sus últimos tiempos se han sumado aquí empresas de muchos más sectores tan variopintos como los frutos secos, el ciclismo, la estética o la tecnología espacial.
“Muchas empresas han evolucionado desde su función original y ahora se dedican a otra actividad bastante diferente. La clave no es intentar adivinar qué sectores de compañías van a venir. En un mundo tan cambiante como éste, lo que debemos hacer es ofrecer siempre un urbanismo capaz de adaptarse a las futuras necesidades que tengan para su actividad. El futuro de este parque lo decidirán los empresarios” opina el gerente de Pimesa.
Futuras conexiones
Por otra parte, desde el ayuntamiento se espera que esta ampliación proyectada venga acompañada de una importante mejora de la conectividad. No en vano desde hace tiempo se viene reclamando al Estado una parada del Cercanías para el Parque Empresarial de Elche, y que a su vez dichos trenes lleguen también hasta el aeropuerto.
Precisamente este abril Salomé Pradas, consellera de Infraestructuras, anunció públicamente el proyecto de la Generalitat para construir una línea E-TRAM que unirá el núcleo urbano de Elche y la UMH con el Parque Empresarial, Torrellano y el aeropuerto.