En los últimos días del pasado verano, La Nucía ha dado un paso decisivo en la gestión de la seguridad ciudadana con la realización de su primer Simulacro de Emergencia por Inundación, coordinado por el 112 Comunitat Valenciana. El ejercicio recreó una hipotética rotura de la presa del pantano de Guadalest y sus consecuencias en el cauce del río a su paso por el municipio.
Pese a que ya ha transcurrido más de medio siglo desde el final de la construcción de ese embalse (1971), se trata de la primera vez que un municipio de la Marina Baixa lleva a cabo un ensayo de estas características y uno de los primeros en toda la provincia. La acción se enmarca en el Plan Territorial Municipal de Riesgo de Emergencias de La Nucía, que establece la necesidad de realizar pruebas periódicas para evaluar la eficacia de los protocolos de actuación.
Los vecinos recibieron mensajes de aviso y se desplegaron medios de evacuación
Una situación simulada
Fue un escenario planteado que consistió en la rotura de la presa del embalse de Guadalest, provocando una avenida hipotética en el río de ese mismo nombre y cuyo cauce atraviesa el término municipal nuciero. A partir de la notificación del 112 Comunitat Valenciana, el Ayuntamiento activó el nivel de Alerta 1 y se puso en marcha el plan de emergencias local.
El Puesto de Mando Avanzado (PMA) se instaló en la entrada de la urbanización El Tossal, junto a la carretera CV-760, punto estratégico y seguro cercano a las áreas potencialmente afectadas. Desde allí se coordinó la respuesta de todos los cuerpos participantes mediante el sistema de comunicaciones TETRA, integrado en la red autonómica COMDES.
Movilización de los cuerpos de seguridad
Además, el despliegue incluyó a Bomberos del Consorcio Provincial de Alicante, Guardia Civil, Policía Local, Protección Civil, la unidad USAR-13 especializada en rescates, ambulancias y la Brigada Municipal de Emergencias. También participaron autoridades locales, encabezadas por el alcalde, Bernabé Cano y los concejales de Emergencias, Seguridad Ciudadana y Urbanismo.
Uno de los elementos más destacados fue la comunicación con la población. Los vecinos residentes en las áreas inundables recibieron mensajes informativos que indicaban la conveniencia de confinarse o evacuar sus viviendas según la proximidad al cauce. Asimismo, se desplegaron ambulancias, un minibús de evacuación y retenes en los accesos rurales al río para cortar el tráfico y facilitar la salida de vehículos hacia la CV-760.
Participaron Bomberos, Guardia Civil, Policía Local, Protección Civil y servicios sanitarios
Ensayo de coordinación ejemplar
El suboficial jefe del Parque de Bomberos de Benidorm, Juan Carlos Torres, valoró muy positivamente la experiencia afirmando que “la coordinación ha sido perfecta”. Torres explica que “se ha simulado una inundación en el Riu Guadalest y todas las unidades han trabajado en un mismo espacio de mando. Este primer simulacro del Plan Territorial de Emergencias de La Nucía ha sido impecable y demuestra la importancia de poner a prueba estos planes de forma periódica”.
Sus palabras, por lo tanto, subrayan la necesidad de ensayar los protocolos y no limitarse a documentos teóricos.
Preparados para lo inesperado
Por su parte, el alcalde de La Nucía, Bernabé Cano, destacó el éxito del simulacro y la inversión municipal en seguridad y también quiso “agradecer la implicación de todos los cuerpos de intervención”. En opinión del primer edil, “este ensayo ha sido un éxito colectivo y nos permite comprobar que los protocolos funcionan. Contamos con un sistema de comunicación TETRA que garantiza la coordinación incluso si las líneas habituales se saturan. Nadie desea afrontar una emergencia real, pero es fundamental entrenar y estar preparados”.
En relación a ese sistema de comunicaciones, Cano resaltó que la adquisición del TETRA, conectado a la red autonómica, “permite la comunicación directa entre todos los equipos incluso en situaciones críticas”.
«Nuestro objetivo es estar preparados para una emergencia real» B. Cano
Relevancia para la Marina Baixa
El grado de importancia de este ejercicio trasciende más allá de La Nucía. En la Marina Baixa, donde existen otros cauces fluviales susceptibles de avenidas, este simulacro marca un precedente en gestión preventiva. Episodios de lluvias intensas en los últimos años han afectado a varios municipios de la comarca, reforzando la necesidad de planes territoriales actualizados y ensayados.
Las autoridades autonómicas han recomendado que todos los municipios realicen al menos un simulacro anual. La experiencia nuciera se convierte así en un modelo a seguir para localidades vecinas, demostrando que la planificación y la práctica son claves para proteger vidas y bienes.
Más que un simple ejercicio
La jornada evidenció que, en situaciones críticas, la coordinación y la rapidez de respuesta son esenciales. El simulacro sirvió no solo para probar infraestructuras y protocolos, sino también para detectar posibles mejoras en comunicación, logística y evacuación.
El Ayuntamiento se ha comprometido a repetir este ejercicio cada año, incorporando ajustes que aumenten el realismo. Para la ciudadanía, supone una inversión en tranquilidad y seguridad: la certeza de que, ante cualquier eventualidad, el municipio está preparado para actuar con eficacia.