El conflicto por un vertedero ubicado en el polígono 21 de Fontcalent desde 2018 no tiene visos de solucionarse pronto. La empresa propietaria de los terrenos, Llegando a la Cima S.L., ha llevado el asunto a los juzgados, mientras que los vecinos se muestran cada día más hartos por la situación y los políticos guardan silencio alegando que el asunto está judicializado.
Montaña de basura
Durante casi tres años llegaban camiones diarios hasta aquí para arrojar residuos de todo tipo. A simple vista vemos escombros, colchones, tuberías, podas, etc. Los vecinos pronto denunciaron ante el Ayuntamiento que la empresa estaba operando sin licencia municipal y causando un daño medioambiental considerable.
La montaña de basura supera los 20 metros de altura e incluso algunos residuos invaden la parcela lateral propiedad de la ganadera Encarna Navarro. Todo y a pesar de que las Normas Urbanísticas de Alicante dictaminan un alto máximo de 6 metros y un retranqueo mínimo de 10 metros con los terrenos colindantes para los vertederos privados, así como la obligatoriedad de un cordón verde de árboles alrededor y un camino circular.
Dado al incumplimiento de todas estas cuestiones, cuando hay ráfagas de viento la basura incluso se esparce hacia zonas residenciales. “Yo tuve que limpiar los plásticos que cayeron en mis terrenos pagándolo de mi bolsillo, porque encima el Ayuntamiento me amenazaba con multarme” nos cuenta Encarna.
El plazo para que la empresa valorizara los residuos finalizó el 30 de noviembre
Cierre de la actividad
La Policía Local precintó estas instalaciones, pero la empresa siguió operando. Al menos eso manifestaron tanto los vecinos como el propio Ayuntamiento, quien presentó una denuncia en la Fiscalía en 2019 por este hecho.
En marzo el Consistorio acabó decretando el cierre de esta actividad aduciendo que ‘Llegando a la cima’ no había aportado los informes de impacto ambiental de la Dirección General de Medio Ambiente y la Confederación del Júcar que le habían sido requeridos. Por lo tanto, la montaña ha dejado de crecer.
A instancias de la Generalitat, ‘Llegando a la cima’ se comprometió a restaurar el terreno afectado a su estado original y valorizar la basura acumulada en un plazo de seis meses (luego demandó una prórroga de otros tres más). Esto es separar los residuos por tipos y cederlos a otras tres empresas con licencia de gestión para que sean tratados pertinentemente en plantas especializadas.
Versión de la empresa
Sin embargo ‘Llegando a la cima’ consideró este cierre como “evasivo y obstruccionista”, acusando al Ayuntamiento de tener “una especial animosidad en contra de la mercantil”. Por ello se querelló contra Adrián Santos (concejal de Urbanismo) y tres técnicos municipales.
La sociedad privada se ampara en una resolución del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), la cual reconoce su Declaración de Interés Comunitario (DIC) para valorizar residuos. Sin embargo, para los servicios jurídicos municipales esto no significa en ningún caso que pueda operar en Fontcalent sin la licencia correspondiente.
Además, según la empresa este obligado cierre le ha hecho perder al menos 450.000 euros de beneficios.
El acto de conciliación previo al juicio se celebrará en enero
Pleitos con vecinos y concejales
Paralelamente, ‘Llegando la cima’ también ha emprendido acciones legales contra las asociaciones Trekrural, Ecologistes en Acció y El Salar de Fontcalent; así como contra varios vecinos particulares y los concejales Lara López y Raúl Ruiz del PSOE y Pepe Bonet de Vox. La mercantil considera que todos ellos han realizado acusaciones públicas atacando su honor y afectando a su viabilidad.
En concreto la firma niega que esté utilizando residuos tóxicos como amianto, que trabaje con materiales peligrosos, que emita gases a la atmósfera con efectos cancerígenos, que haya contaminado acuíferos, que haya interrumpido el cauce de las ramblas de Fontcalent o que cause ningún impacto sobre la salud. Por ello pide a los demandados que rectifiquen y admitan todos estos puntos.
De hecho la compañía considera que en la decisión administrativa de su cierre “pesaron más las presiones y movilizaciones de los vecinos que el auto emitido por el TSJCV».
Así mismo se cree perjudicada por la Generalitat, pues desde 2019 “la planta espera el informe previo de la Dirección General de Calidad Ambiental en relación al proyecto de obra, cuya ejecución es necesaria para obtener el permiso de gestión de residuos”, y asegura que esta “inacción o retraso” les ha ocasionado la denegación de la licencia municipal.
Próximas fechas
El plazo para “restaurar los terrenos a su estado original” finaliza el 30 de noviembre. Lo cierto es que la montaña de basura no parece haberse reducido en estos nueve meses, sino simplemente se ha cubierto con grandes cantidades de arena por encima. Aún así muchos residuos siguen a plena vista.
“La empresa tiene autorización para la valorización pero no para el almacenamiento, cuando en realidad una cosa es inviable sin la otra. Si se acaba la vía administrativa, pues tendremos que ir por la judicial” declaró el director autonómico Joan Piquer sobre este vertedero de Fontcalent en el reportaje ‘El negoci del fem’ que À Punt emitió el 15 de noviembre.
El acto de conciliación, paso previo necesario para la querella, entre el demandante y todos los demandados por difamación está fijado para el 21 de enero. Respecto a la denuncia contra el concejal Santos y los técnicos municipales, un juzgado de Alicante ya ha abierto diligencias previas.
‘Llegando a la cima’ niega haber trabajado con materiales tóxicos ni emitido gases cancerígenos
Abandonados por el Ayuntamiento
“Todo este conflicto se podría haber evitado si el Ayuntamiento hubiera intermediado entre vecinos y empresa desde el principio. Nosotros nos hartamos de mandar escritos y quejas. La Concejalía de Medio Ambiente nunca nos ha contestado a nada y el PP es el único partido que jamás ha venido a ver esta montaña de residuos, aunque se lo hemos pedido al alcalde Barcala decenas de veces. Nos han dejado totalmente abandonados” nos asegura Cayetano González, miembro del El Salar de Fontcalent (una de las asociaciones demandadas).
Los vecinos nos afirman, además, que recientemente la empresa ha comenzado a realizar los mismos tipos de vertidos en un terreno ubicado en La Serreta a escasos 3 kilómetros. “Han visto que la Administración tarda tres años en cerrarles un vertedero sin licencia, así que les sale a cuenta repetirlo. Hay 16 industrias operando en Fontcalent y ésta es la única que genera problemas” nos asegura Encarna.