Entrevista > Diego Naser / Director de orquesta (Uruguay, 10-agosto-1981)
Este mes el Festival Internacional de Guitarra José Tomás Villa de Petrer celebra su veinticinco edición con la creación de una orquesta sinfónica, con la que se pretende impulsar la música de orquesta del municipio.
El uruguayo Diego Naser, muy vinculado al festival desde hace siete años, será el director artístico de dicha orquesta, que hará su estreno oficial este 23 de julio, junto al guitarrista y compositor brasileño Yamandu Costa como solista.
¿Cómo ha surgido que seas la persona encargada de la dirección musical de esta orquesta de reciente creación?
Desarrollo una relación artística con el festival que se remonta al año 2015, cuando realizamos la ópera Telemaco nell’isola di Calipso, del compositor Fernando Sor, junto a la Sinfónica de Murcia. El resultado fue muy bueno y la buena química fue inmediata, así que continuamos colaborando hasta la fecha.
Desde entonces hemos hecho ópera, grabamos un disco junto al guitarrista Álex Garrobé y la Sinfónica de Murcia, actuamos junto a Ricardo Gallén con la participación de Leo Brower, hicimos un Aranjuez junto a Tomatito y ahora festejaremos con otra estrella de la guitarra, Yamandu Costa.
Naser colabora con el Festival de Guitarra de Petrer desde 2015
¿Qué ha llevado a crear esta orquesta?
Entre tantas colaboraciones tuvimos oportunidad de planear y soñar, junto a mi querido y admirado Pepe Payá, una orquesta propia del festival. La primera conversación al respecto fue hace más de cinco años.
Valorando la cantidad de bandas de alto nivel en la zona, el interés que despierta semejante festival y considerando la seriedad con la que se trabaja, todos los caminos conducían a festejar estos veinticinco años ininterrumpidos fundando la Orquesta Sinfónica del Festival Internacional de Guitarra de Petrer, de la cual estoy seguro que se convertirá en un símbolo de Petrer y se conocerá en muchos otros lugares.
¿Cuáles son tus expectativas ante este nuevo reto?
La expectativa es que la orquesta contribuya a la ya notoria expansión internacional del festival, lograr mantener cierto nivel de actividad durante el año en el medio plazo y que se convierta en una valiosa atracción cultural de la ciudad. Fundar una orquesta representa una apuesta cultural valiosa, que profundizará la tendencia existente de Petrer a ser una potencia cultural regional para todos.
Respecto a la orquesta, ¿cómo será?
Estará compuesta por los instrumentos habituales como son los de viento, cuerda, percusión y piano. Participarán músicos de bandas de la zona, así como instrumentistas de cuerdas de diferentes lugares sumados a la colaboración de la Filarmonía Hispánica de Valencia.
La orquesta estará compuesta por instrumentos de viento, cuerda, percusión y piano
¿Qué tipo de obras interpretarán?
En esta ocasión obras del guitarrista Yamandu Costa, que además es un genial compositor, pero es una orquesta que no tendrá muchos limitantes de repertorio. Esa puerta debe quedar abierta, sin olvidar que el foco está en la guitarra.
Hablando de tu faceta como músico, te inicias desde muy joven en el violín. ¿Qué te llevo a la música?
Nací en una familia muy musical, eso me impulsó a elegir primero el violín y luego la viola.
A lo largo de los años has tocado el violín con grupos como la Filarmónica de Kiel, Camerata de Hamburgo, Orquesta de la radio NDR de Hamburgo, la Filarmónica de Cámara de Viena, entre otros. ¿Cuál destacarías?
La experiencia de tocar en elencos alemanes y austríacos fue muy importante, moldearon mi concepción del sonido de una orquesta, me ayudaron a buscar una calidad de sonido específica y a entender el manejo de una orquesta.
Uno de los momentos más trascendentes fue mi primera participación en la West-Eastern Divan Orchestra, del maestro Barenboim. Fue mágico, actuamos en los Proms de la BBC de Londres, en el Royal Albert Hall, así como en los festivales de música de Salzburgo, Lucerna y Waldbühne de Berlín.
«Es una orquesta que no tendrá muchos limitantes de repertorio»
¿Cómo acabas en la dirección de orquesta?
Comencé por accidente en Alemania. Siendo profesor de violín y viola en un conservatorio de música organicé un cuarteto de cuerda con alumnos, y luego fueron sumándose otros. Así, al cabo de un año, ya teníamos una orquesta juvenil de 80 integrantes y eso me obligó a aprender, a estudiar y me hizo conocer otra faceta de la música.
Tras años de esfuerzo y dedicación, ahora estás considerado como uno de los directores latinoamericanos más destacados de tu generación, ¿qué es lo que hace falta para ser un buen director de orquesta?
Mucho estudio y tocar profesionalmente un instrumento. No puedes pretender dirigir algo que tú mismo no conoces en profundidad.
Reconocimiento transfronterizo
Paralelamente es director musical asociado de la Camerata Internacional de Barcelona, con sede en la Sagrada Familia. También ha sido director artístico de la Sinfónica Nacional de Uruguay y director invitado residente de la Orchestra of the Americas en Washington.