Mediante una inversión de 3,7 millones de euros, Alcoy quiere emprender un atractivo proyecto con el que ‘renaturalizar’ una considerable parte de su término municipal. La estimación del consistorio es que sean más de 420.000 los metros cuadrados donde se actuará, repartidos todos ellos en diferentes zonas vinculadas a parques, barrancos y riachuelos.
El objetivo del Ayuntamiento es que la recuperación de estas áreas sirva para mejorar la conexión entre el núcleo urbano y los parques naturales de Mariola y la Font Roja.
Actuaciones en ocho zonas
Los trabajos de restauración medioambiental tendrán lugar en el Barranc del Cint, la zona de la Vaguada, el Barranquet de Soler, diferentes tramos del cauce del río Barxell, el estanque de Buidaoli, el parque donde se ubicaba el antiguo vertedero de Cotes Baixes, el camí de Solsides y el parque de la Uixola.
A todas estas acciones se sumarán otras de carácter puntual en diferentes zonas de la ciudad, y con las que se restituirá el arbolado en mal estado, además de plantarse árboles en todos aquellos alcorques que se encuentren vacíos.
De manera paralela, el proyecto también persigue la consolidación de algunos barrancos y taludes de la ciudad, en muchos de los cuales se han registrado desprendimientos tras los temporales de lluvia de los últimos meses.
«Este proyecto responde a nuestra lucha decidida contra el cambio climático» T. Francés
Plazo de ejecución: 2025
El gobierno local costeará algo más de 3,5 millones del coste total del proyecto mediante fondos europeos, conseguidos a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno. Todas estas acciones de renaturalización deberán materializarse antes del 2025.
En palabras del primer edil de Alcoy, Toni Francés, estamos ante una “apuesta decidida por algo que ya venimos haciendo” y que se fundamenta en la estrategia de “lucha contra el cambio climático; recuperando espacios para la ciudadanía donde la naturaleza tenga un papel fundamental”, logrando de esta manera “ciudades más habitables”.
El concejal de Transición Ecológica, Jordi Silvestre, asegura por su parte que las actuaciones persiguen “un reverdecimiento urbano” así como el “aumento de la densificación” en diferentes zonas verdes repartidas por la ciudad.
Todas las actuaciones deberán estar ejecutadas antes de que finalice el año 2025
Una de las pocas ciudades elegidas
Tanto el alcalde como el edil señalan la importancia de haber conseguido financiación para este proyecto, siendo la de Alcoy una de las candidaturas elegidas entre un máximo de veinte para todo el país, y donde solo han podido optar ciudades de más de 50.000 habitantes.
A su vez, se trata del proyecto de mayor cuantía hasta la fecha de cuantos se han concedido en el marco del Plan de Recuperación de la Unión Europea. Cabe recordar que son ya seis las solicitudes aprobadas, las cuales suponen un total de 10 millones de euros procedentes de Europa y una inversión global de 12’5 millones.
Una de las acciones afecta a la cuenca del Serpis, en la zona anexa al barrio de la Zona Norte. Allí se mejorará la conectividad natural y peatonal de la ciudad con el lecho y con los barrancos de los ríos Barxell y Cint. Para ello se habilitarán sendas que den acceso al cauce del río, así como un mirador.
En el Barranquet de Soler se habilitará una zona de educación medioambiental, y se consolidarán y recuperarán los taludes existentes mediante la restauración de la vegetación de ribera. También se pretende generar un bosque urbano que pueda ser frecuentado por los vecinos, especialmente por los usuarios del centro asistencial ubicado en el propio barranco.
Se habilitarán instalaciones de educación ambiental en diferentes emplazamientos de la ciudad
Instalaciones de educación medioambiental
En el tramo que conecta el nacimiento del Barranc del Cint con la Vaguada se restaurarán los puntos de agua del Xorrador, y se creará una zona de educación medioambiental. También se restaurará la vegetación y fauna con especies autóctonas, recuperando la continuidad natural a lo largo del lecho del río.
Por su parte, en la Vaguada se creará una zona de visibilización de la biodiversidad, y se mejorará la conexión del tramo que la conecta con el barranco del Barxell.
Para el estanque de Buidaoli se propone cortar la aportación directa del río y nutrirle de agua a través de un manantial. Además, se eliminará la presencia de especies invasoras de tortugas y carpas, que se sustituirán por otras de carácter autóctono.
Incorporación de especies autóctonas
A lo largo del cauce del río Barxell se prevén diversas acciones, entre ellas la de conectar sus dos márgenes mediante una pasarela entre el entorno peatonal del colegio Santa Ana y la calle Caldera de Gas. A lo largo del cauce se incrementará la cantidad de arbolado, incorporando diversidad de especies autóctonas.
En el polígono de Cotes Baixes se aumentará la superficie vegetal del parque que ocupa los terrenos de un antiguo vertedero, todo ello para ampliar las zonas de sombra y estancia. Respecto al parque de la Uixola, se instalará una cubierta verde para incrementar su área de sombra y reducir así el efecto isla de calor.
Por último, en el camí de Solsides, se prevé un vial en tres ejes: uno para el tráfico rodado, otro para viandantes y ciclistas, así como una vía verde paralela.