A lo largo del verano las tres bibliotecas públicas ubicadas en el término municipal de Santa Pola (la central, la infantil y la de Gran Alacant) prestan entre 150 y 200 libros diferentes. Unas cifras que superan con creces a las habituales del resto del año.
“Es evidente que en julio y agosto nuestro municipio triplica su población, pero también ocurre que los propios santapoleros tienen más tiempo libre para ponerse con lecturas pendientes. Por eso ahora tenemos más intensidad que nunca” nos comenta Mirián Sempere, jefa del Negociado de Bibliotecas.
Algunos martes y jueves por la tarde hay sesión de cuentacuentos para niños
Lecturas fresquitas
Por ello, desde las bibliotecas se ha lanzado la campaña veraniega ‘Lecturas fresquitas’, la cual consiste en una selección de libros especialmente apropiados para esta época vacacional. “En vacaciones la gente quiere distraerse. Los lectores no vienen aquí buscando ensayos, información o manuales de autoayuda como en invierno, sino libros que llevarse a la playa o al campo para relajarse” nos explica Rafael Pla, archivero bibliotecario jefe.
Así pues la lista de ‘Lecturas fresquitas’ está compuesta casi exclusivamente por novelas, que se exponen en mesas para que sean fácilmente visibles cuando se accede a la biblioteca. Según nos indican, el éxito de público está siendo tal que los bibliotecarios se ven obligados a reponer los libros cada dos o tres días.
“Suelen triunfar mucho las de género policiaco o las románticas. También interesan las que han ganado premios literarios, y las sagas o trilogías. En general buscan cosas agradables que se leen rápidamente. Poco importa si son libros nuevos o de hace años, la gente se los lleva” nos indican.
Cada lunes hay un nuevo enigma por resolver en la Biblioteca Infantil
Locales y foráneos
Para sacar un libro de las bibliotecas de Santa Pola en calidad de préstamo tan solo basta con poseer un carnet expedido en cualquier biblioteca de la Comunitat Valenciana. Por ello son muchos los veraneantes ilicitanos o de otros municipios del interior de la provincia que acuden.
En el caso de los visitantes de Santa Pola que proceden de otras regiones de España o el extranjero, también tienen la posibilidad de obtener un carnet temporal para unas semanas, previo pago de una fianza.
Libros electrónicos
La Biblioteca Central, ubicada en la calle de Elche, está abierta de lunes a viernes con horario de mañana (9:30-13:30 h) y de tarde (17:00-20:30 h), así como los sábados por las mañanas. Mismos horarios que en la Biblioteca Infantil de la calle Castaños y la de Gran Alacant de la avenida Escandinavia, solo que éstas cierran los miércoles y sábados.
Aún con todo ya no es ni siquiera necesario acudir presencialmente a las bibliotecas para tomar un préstamo, pues cuentan con su propia plataforma de libros electrónicos. Para los usuarios es tan sencillo como recibir una contraseña en el momento que se dan de alta y utilizarla para acceder al libro que desean, del cual disponen durante un periodo limitado de tiempo que puede renovarse.
“Mucha gente desconoce que tenemos este servicio, pero desde la pandemia está aumentando bastante. Algunos dudan de si es ilegal, pero nada más lejos. De hecho esta iniciativa viene del propio Ministerio de Cultura” nos aduce Sempere.
Si bien la mayoría de los usuarios de libros electrónicos son gente joven, también hay mayores que se están animando a probarlos. “Es cierto que los jubilados suelen preferir tocar el papel como se ha hecho siempre, pero algunos están un poco limitados porque padecen problemas de vista y solo pueden leer libros con la letra grande. Precisamente en los electrónicos están encontrando una solución a este problema, porque aquí es muy fácil ampliar el tamaño de la fuente” nos explica Pla.
‘Lecturas fresquitas’ es una selección de novelas propicias para leer en verano
Un verano de enigmas
En verano las presentaciones y demás actividades públicas propias de las bibliotecas de Santa Pola cesan… pues son los niños quienes se convierten en los grandes protagonistas.
“Durante el curso escolar están más liados con el colegio o las extraescolares, pero ahora tienen meses de vacaciones. Además Santa Pola es un destino muy familiar por lo que vienen muchos críos de fuera. Nosotros tratamos de proponerles entretenimientos con los que pasen un verano divertido y a la vez aprendan” nos explica Sempere.
Por esto, desde la Biblioteca Infantil y la de Gran Alacant se ha impulsado la iniciativa ‘Un verano de enigmas’ con el objetivo de agudizarles el ingenio. “Cuando entran les damos varias pistas para que adivinen un enigma. Es un juego muy divertido, como si fueran detectives. A veces hasta sus padres o abuelos que les acompañan se animan a jugar… aunque no siempre los adultos son capaces de resolverlo antes que los críos” nos cuenta Pla entre risas.
Los niños reciben un paquete de chucherías como premio cuando consiguen resolver el citado enigma, el cual se renueva al principio de cada semana. “Tenemos niños que el mismo lunes por la mañana ya están en la biblioteca para tratar de resolver el nuevo misterio” nos aseguran.
Las bibliotecas municipales disponen también de libros electrónicos
El juego de lectura
Además desde la red de bibliotecas de Santa Pola se ha organizado un verano más ‘El juego de lectura’. Hasta el 30 de agosto los niños tienen de plazo para leerse cuantos libros quieran a elegir de una lista redactada por los propios bibliotecarios. Cada tres libros leídos reciben un premio como recompensa.
“Siempre seleccionamos lecturas muy divertidas que sabemos que les van a gustar. Son además muy variadas, hasta hay cómics. De hecho algunos llegan a leerse 15 o 20 libros de esta lista durante el verano” nos asegura Sempere.
El concurso está abierto a chavales de entre 5 y 12 años, y hay lecturas específicas para cada tramo de edad. La lista de ‘El juego de la lectura’ se puede consultar en la biblioteca, e incluso a través de códigos QR impresos en carteles. También se reparten entre los colegios y las AMPAs de la localidad antes del final de curso.
Por cada tres libros leídos de ‘El juego de lectura’ los niños perciben un premio
Cada tres libros… premio
Para demostrar que efectivamente se han leído tres libros, los infantes deben contestar a varias preguntas sobre cada obra, ya sea presencialmente en la biblioteca rellenando un cuestionario en papel o incluso desde su casa mediante Google Doc. Si las respuestas son correctas, perciben regalos cuyo valor aumenta conforme los libros leídos lleguen a seis, nueve, doce, quince, etc.
“En realidad son objetos que se pueden comprar normalmente en papelería. Lo que más ilusión les hace es el valor de recibir un premio porque te lo has ganado. De hecho me consta que hay muchos piques entre ellos por quien consigue llevarse más premios” nos cuenta Pla.
Segunda generación de lectores
‘El juego de la lectura’ se organizó por primera vez en Santa Pola hace ya unas dos décadas. En aquel momento fue creado con el fin de diversificar las lecturas para que no todos los niños del municipio leyeran las mismas obras una vez llegado el verano.
“Nos solía ocurrir que sus profesores les mandaban un libro para las vacaciones, y nos encontrábamos a finales de junio que venían veinte chavales a la biblioteca pidiendo todos el mismo. Y como no teníamos tantos ejemplares, pues la mayoría se quedaban sin él. Era muy frustrante, así que decidimos cambiar el chip y pasar a ser nosotros quienes les recomendáramos las lecturas. Aunque nos suponga una trabajo extra” nos explican.
Dado el éxito que tuvo la iniciativa, desde entonces lleva organizándose ininterrumpidamente y cada verano participan alrededor de 200 niños. “El objetivo no es solo fomentarles el hábito de la lectura, sino también el de venir a la biblioteca. Es una manera de fidelizar futuros clientes. De hecho algunos de los primeros niños que participaron ahora son padres que se traen a sus hijos, porque quieren que ellos vivan también esta experiencia” nos comentan los bibliotecarios.
Asimismo, en la Biblioteca Infantil se ha colocado un gracioso photocall literario ambientado en el crimen de un gato chafado con su silueta para aquellos jóvenes (y no tan jóvenes) que se quieran sacar una divertida foto de recuerdo de su visita.
Cuentacuentos
Más allá de todas estas iniciativas para fomentar la lectura, aprovechando el buen tiempo también se han organizado varias actividades de exterior igualmente dirigidas a los más pequeños.
Por ejemplo, un cuentacuentos les entretiene relatando historias en algunas tardes veraniegas. “Contratamos a una compañía distinta cada semana para que cambie el formato y que los niños siempre se diviertan aún repitiendo. Es una actividad que nos agradecen mucho los padres y abuelos, porque por la mañana suelen ir a la playa con los críos pero luego a la tarde a veces no se les ocurren planes” nos comenta Sempere.
Por el momento los eventos de cuentacuentos que se han realizado en julio están teniendo un gran éxito de público. Normalmente duran alrededor de una hora, y se relatan varias historias literarias. En ocasiones incluso los niños (y hasta algunos padres) son invitados a subir al escenario para participar en la función.
Las próximas citas serán los martes 2 y 16 de agosto frente a la Biblioteca de Gran Alacant; y los jueves 4, 11 y 18 en el Castillo. Siempre a las 20 horas.
La Feria del Libro estará en la Glorieta hasta el 15 de agosto
Talleres creativos
Además en la plaza de la Glorieta se están organizando talleres infantiles al aire libre. Aquí el monitor les enseña a realizar manualidades tan variadas como a fabricar vidrieras, elaborar mosaicos, diseñar objetos voladores, etc.
Hay quince plazas por taller y las inscripciones se pueden realizar en cualquiera de las bibliotecas. Es necesario abonar una pequeña cuota de entre 2 y 5 euros para costear los materiales utilizados.
“Para los niños suele ser una oportunidad muy bonita de socializar. Porque aquí conocen a otros críos que no son del colegio. Surgen unas relaciones muy chulas entre ellos” nos aseguran los bibliotecarios.
Cabe recordar que en la propia Glorieta es donde están ubicadas las casetas de la Feria del Libro de Santa Pola hasta el 15 de agosto. De hecho muchos padres que acompañan a sus hijos a los cuentacuentos o los talleres suelen aprovechar la ocasión para comprar algún libro.
Vuelta a la normalidad
A partir de septiembre la red de bibliotecas de Santa Pola recuperará sus actividades habituales del resto del año dirigidas al público adulto, tales como las presentaciones de nuevos libros, el club de lectura o los recitales de poesía.
De igual forma se volverán a impartir los talleres de ‘Biblioteca Espacio Digital’ para enseñar a realizar gestiones administrativas por internet. “Queremos convertirnos en un espacio de alfabetización digital, porque hay un porcentaje muy grande de población que se enfrentan a la Administración electrónica y no consiguen sacarse el certificado digital o la vida laboral. Estamos recibiendo muchas solicitudes de interesados en participar” nos asegura Marián Sempere.
La bibliotecaria nos confirma también la intención de recuperar las clases de español a refugiados ucranianos, que se han dado durante esta primavera en la Biblioteca Central por parte de voluntarios del club de lectura.
Por otra parte, cabe señalar que recientemente el Ministerio de Cultura y la Federación de Municipios y Provincias han otorgado a las bibliotecas municipales de Santa Pola, por segundo año consecutivo, el Premio María Moliner. Se trata de una subvención de 2.000 euros que se entrega a 300 municipios con menos de 50.000 habitantes como recompensa a las campañas de animación lectora impulsadas.