Entrevista> María García / Concejala de Comercio y Turismo (Orihuela, 18-febrero-1983)
De profesión periodista, nuestra colega María García Zafra era una cara conocida antes de su incursión en política, tanto por su labor en la televisión comarcal como por haber presentado numerosos eventos y galas. Fue además la primera presidenta mujer y la más joven de la Cofradía de la Flagelación.
En las pasadas elecciones municipales de 2019 concurrió en la lista electoral del PSOE y ahora es la nueva concejala responsable de varias áreas del ayuntamiento como son Comercio, Turismo, Educación, Modernización, Protocolo, Comunicación y Residentes Internacionales. Conversamos con ella para conocer su visión sobre estos temas y por donde irán sus próximas iniciativas en estos meses que aún quedan de mandato.
¿Cómo te surgió lo de meterte en política?
He estado muy involucrada desde hace años en la vida de Orihuela y creo que ya tenía una imagen bastante hecha en la sociedad local. Antes de las elecciones Carolina Gracia me llamó para ofrecerme formar parte de su candidatura y aportar en temas relacionados con el sector del ocio, el turismo y el comercio para dinamizar esta zona; que es lo que a mí más me gusta. Al final dije “¿y por qué no? Esto no deja de ser programar y organizar”.
Es cierto que la política tiene otras vertientes menos bonitas, pero a mí me hacía mucha ilusión hacer cosas por mi pueblo. Al final éste es mi objetivo, poder dejar algo de huella en la ciudad donde nací y resido. Desde luego te puedo asegurar que no tengo mayores ambiciones más allá (risas), yo siempre me voy a quedar en el plano local.
«El turismo no tiene mucho sentido si no repercute en el comercio y la hostelería»
Has dicho que quieres fomentar el turismo en Orihuela, sobre todo para que repercuta más en el comercio y la hostelería locales. ¿Cómo se consigue esto?
La realidad es que en Orihuela tenemos pocas plazas hoteleras. Nos vienen muchos visitantes que no pernoctan, aunque pasen todo el día aquí. Así que si no se quedan a dormir, necesitamos que al menos coman y compren para que la ciudad se beneficie. ¿Por qué sino al final de qué nos sirve el turismo? Si nos dedicamos al sector servicios, necesitamos que se note.
Por eso desde la Oficina de Turismo, a través de las rutas, intentamos mostrar lo típico de la zona a los visitantes. Por ejemplo les indicamos los comercios donde pueden comprar alcachofas confitadas o recuerdos de Miguel Hernández. O si quieran comer arroz con costra pues les indicamos qué restaurantes lo sirven los martes, los miércoles, etc.
«Queremos dinamizar el centro histórico para que vuelvan a abrir comercios en esta zona»
Al final lo que busca el turista muchas veces son las particularidades de cada sitio.
Sí. Por eso en definitiva lo que hacemos desde la Oficina es dirigirlos y orientarnos hacia aquello que a nosotros nos diferencia como los monumentos, la figura del poeta, los productos de la huerta, etc. Así es como se consigue que la ciudad note realmente que viene el visitante.
Tenemos muchos monumentos, pero invertir en este patrimonio para conservarlo y mejorarlo nos cuesta mucho dinero. Así que necesitamos obtener beneficios, porque sino el turismo no tiene mucho sentido.
¿En qué consisten los talleres turísticos que se están organizando?
Son talleres y degustaciones en las rutas. Por ejemplo para flores preservadas que luego la gente se lleva a sus casas, para hacer chapas con trozos de las poesías de Miguel Hernández y dibujos que pintan los niños, para fabricar objetos artesanales con espiga y esparto, para degustar la típica cerveza artesanal Segura, etc.
Al final es una experiencia. Cuando uno visita un sitio no solo se acuerda de lo que ve, sino también del producto que probó o de aquello que tocó con sus propias manos. Es una forma de que la gente mantenga el recuerdo de Orihuela por más tiempo. Porque iglesias y fiestas de moros y cristianos hay en muchos pueblos, por supuesto con sus diferencias, pero esto es una forma de distinguirnos.
«Desde la Oficina de Turismo orientamos a los visitantes para que encuentren los productos locales»
¿Los talleres son gratuitos?
De momento los estamos haciendo gratuitos para introducirlos, pero el paso siguiente posiblemente sea cobrar un precio simbólico. Soy consciente de que algunas personas son detractoras a que se cobren, pero hay que entender que cuando son gratis mucha gente reserva plaza y luego no viene… lo cual provoca que algunos interesados se acaben quedando fuera. Pagando solo tres o cinco euros ya existe un mayor compromiso para que todos acudan. Y además así podemos aumentar la calidad de lo que ofrecemos.
Orihuela tiene una huerta y un término municipal enormes. ¿No se deberían organizar más rutas de turismo rural?
Estoy de acuerdo que es algo que tenemos aún por explotar. De hecho nuestros huertos urbanos son una cosa que llama muchísimo la atención a nuestros residentes extranjeros. Y es verdad que actividades como ir a una plantación para, por ejemplo, coger una naranja y comérsela en ese mismo momento o pelar unas alcachofas y echarlas un chorro de limón son un nicho turístico muy interesante.
Desde la concejalía de Deportes ya se están organizando rutas ciclistas por el campo, y recientemente recuperamos las visitas al Castillo que estaban suspendidas desde la pandemia. Y no descartamos realizar rutas agrícolas en el futuro para llevar el turismo a nuestras pedanías como Barbarroja, Molins, Desamparados, etc. Porque además cada vez hay más gente que está alquilando sus casas en el campo oriolano para fines de semana o puentes.
Además en nuestro campo tenemos un sistema de azarbes y regadío con mucho valor histórico. ¿Cómo está el tema del Patrimonio de la Humanidad?
Sí, esto es algo que quizás a los que hemos crecido por aquí no nos llama tanto la atención, ya que los azarbes y las acequias rodean prácticamente todas las pedanías de la huerta. Sin embargo a la gente de fuera sí les suele cautivar muchísimo. Igual que las norias de Moquita y Pando. Es también un buen nicho para hacer rutas tanto en bici como andando.
El expediente de Patrimonio de la Humanidad para la UNESCO todavía está por finalizar. Mientras tanto queremos impulsar un contrato para reformar todas estas estructuras y mantenerlas en las mejores condiciones.
«Tenemos un gran nicho de turismo rural por explotar en nuestras pedanías»
De todas formas supongo que nuestro principal reclamo turístico sigue siendo Miguel Hernández, ¿no?
Tenemos un casco histórico repleto de monumentos y una catedral de las más pequeñitas de España, pero muy bonita, con un órgano que es uno de los grandes reclamos en Semana Santa porque se toca mucha música sacramental. También un museo artesano que contiene un Velázquez, la iglesia de Santiago o el Colegio de Santo Domingo que tiene una iglesia espectacular. Todos estos son aspectos que nos diferencian de otros municipios.
Pero es cierto que la casa natal y museo de Miguel Hernández es el sitio por el que más preguntan en nuestra Oficina de Turismo. Nos vienen muchísimos interesados para conocer la higuera donde escribía, su lecho en su habitación y en definitiva a conocer cómo vivía en la época. Es un lugar donde te diría que la gente acude incluso a reflexionar, porque tiene un halo muy sentimental para impregnarse con la figura del poeta. Recibimos especialmente a muchos visitantes de Hispanoamérica ya que allí se hace una gran divulgación de su poesía.
«Vamos a reformar los azarbes y norias de la huerta para ponerlos en valor»
¿Qué actividades culturales se van a realizar en este otoño hernandiano?
Se realizarán recitales de poesía en distintos lugares de la ciudad donde surgieron momentos importantes, como en la plaza Ramón Sijé o en la de las Cadenas. Es una actividad que gusta porque la propia gente participa. Es bueno no solo visitar los lugares donde vivió Miguel Hernández, sino también recordarlo a través de su legado literario.
Quizás otro reto pendiente del turismo de Orihuela es conseguir que los numerosos visitantes de la Costa visiten también la ciudad…
Existe un trasporte regular, aunque es cierto que son casi 40 kilómetros de distancia, lo cual se traduce en viajes de unos 50 minutos. Desde el Ayuntamiento intentamos conectarlos sobre todo en momentos como las fiestas de Moros y Cristianos o la Semana Santa poniendo autobuses gratuitos. Este año incluso organizamos una ruta por el museo de la Reconquista y los lugares simbólicos de la fiesta, así como un taller de maquillaje.
Tratamos de acercarlos a nuestras tradiciones. Ellos están en un país ajeno en el que a lo mejor no comparten la cultura, pero queremos hacerlos partícipes de todo aquello que para la ciudad es importante. En la playa existen otro tipo de actividades más enfocadas al deporte y la náutica, mientras que en el núcleo urbano tenemos un ocio más festivo y gastronómico. Por eso intentamos enseñarles las dos partes de la ciudad, tanto la del sol y playa como la monumental.
Hablemos también de comercio. ¿Cómo se podría incentivar a este sector en la ciudad?
Ahora en los cascos históricos de las ciudades cierran muchos locales y nosotros queremos cambiarlo. Por eso en octubre realizamos la iniciativa ‘Orihuela, un comercio de historia’ con actuaciones de zarzuela y actores que interactuaban con la gente para recordar esa época de esplendor en los siglos XIX y XX. Nuestro objetivo es dinamizar la zona trayendo a más gente hasta los comercios tradicionales. Ha sido muy satisfactorio y los comercios de la calle Mayor nos han pedido repetir esta actividad.
Con ideas así podemos conseguir atraer sobre todo a los jóvenes hasta aquí, e incluso convertir el casco histórico en una zona atractiva para alguien que esté pensando en abrir una tienda en Orihuela.
«Este otoño se realizarán varios recitales de poesía hernandiana por la ciudad»
Sería un cambio importante de tendencia porque en el casco antiguo se han perdido comercios en los últimos tiempos.
Sí, normalmente las nuevas tiendas se van a otras zonas digamos más modernas, como la plaza Nueva, la calle San Pascual o Calderón de la Barca. Por eso pienso que nuestro centro histórico necesita de una revitalización.
Recientemente se han sacado Bonos Consumo, una iniciativa que se había puesto en práctica en otras localidades durante la pandemia pero aún no en Orihuela.
Ha sido la primera vez y ha costado por que supone una inversión de mucho dinero. Nosotros además lo pusimos a disposición de todos los comercios que se quisieran adherir, incluidos los de la Costa.
En la tarde del primer día se agotaron todos los disponibles online, y la venta física también se agotó enseguida. Los comerciantes nos han dicho que están muy contentos y que quieren que en Navidad se repita. Así que nos toca ponernos a trabajar en la concejalía para hacerlo posible. Creo que es una actividad que les beneficia tanto a ellos como a los clientes en estos tiempos que corren de inflación, para ayudar con las compras en casa y ahorrarnos un dinerillo a todos. Hay quien lo ha usado para comprar comida, material escolar, caprichos, etc.