El grupo de Diseño en Ingeniería y Desarrollo Tecnológico (DIDET) de la Universidad de Alicante (UA) ha desarrollado un sistema que simula modelos anatómicos de redes arteriales de forma real y ‘a la carta’ de cualquier paciente mediante la impresión 3D. Esta tecnología ya se aplica para planificar y ensayar operaciones de aneurisma cerebral en el Servicio de Neurorradiología del Hospital General Universitario de Alicante Doctor Balmis.
El de Alicante es el primer centro hospitalario público de España que emplea esta innovadora tecnología para el entrenamiento quirúrgico en aquellos casos complicados en la especialidad de la neurorradiología intervencionista vascular por su mayor dificultad técnica o porque se desconoce de antemano el material que se tendrá que usar en la operación, sobre todo en aneurismas cerebrales (protuberancias en vasos sanguíneos del cerebro que pueden inflarse y reventar, lo que causa una hemorragia cerebral).
La preparación de la intervención da al cirujano una mayor seguridad a la hora de llevar a cabo más tarde la operación ‘en vivo’ al haber adquirido previamente una experiencia del caso durante el ensayo quirúrgico en el que ha manejado el simulador que imita el modelo real del sistema arterial del paciente.
El invento, cuya patente está ya registrada, es fruto de un año y medio de trabajo de ingenieros biomédicos vinculados a la Universidad de Alicante y el Instituto de Investigación Sanitaria y Biomédica de Alicante (ISABIAL). Este proyecto, de carácter multidisciplinar, ha propiciado que ISABIAL, del que forma parte el Departamento de Salud Alicante-Hospital General, y la UA pusieran en marcha recientemente la Unidad Mixta de Investigación en Diseño y Fabricación Biomédica (BIOFAB) para el desarrollo de innovaciones enfocadas a la planificación quirúrgica, la instrumentación médica, la simulación clínica, las órtesis y prótesis, y los productos de apoyo, a través de la impresión 3D.
«Los aneurismas no suelen dar ningún síntoma, pasan silentes, y, generalmente, no los podemos diagnosticar, salvo que el abultamiento en el vaso sanguíneo reviente o se detecte casualmente cuando a una persona, por ejemplo, le hacen una resonancia por otro motivo», según explica el jefe del Servicio de Neurorradiología del Hospital General Universitario de Alicante Doctor Balmis y miembro de BIOFAB, el doctor José Ignacio Gallego.
El doctor afirma que la mitad de las personas que sufren una hemorragia cerebral por aneurisma muere en el acto, un 25 % fallece en el hospital o queda con «graves secuelas», y el otro 25 % (una cuarta parte) «acaba aceptablemente bien» tras recibir asistencia hospitalaria y ser sometido a un tratamiento.
Para la neurorradiología intervencionista, los caminos naturales que todo ser humano tiene para acceder al cerebro son las arterias y las venas y la gran innovación del sistema reside en que es navegable, «trabajamos por dentro de las arterias y replica el camino que vamos a necesitar hasta llegar al aneurisma», señala Gallego.