Todos los que vivimos en la Comunitat Valenciana somos conscientes de la importancia de un buen almuerzo, no solo por la calidad del producto, sino por la compañía y el poder desconectar del día a día. Y nada mejor que realizar una ruta de los mejores locales donde degustar los bocadillos típicos de cada localidad.
Eso es lo que debieron pensar tres jóvenes de la comarca de La Ribera -Joan Ferrús, Pelaio Andreu Mañez y Arnau Clari- hace cuatro años, cuando crearon ‘La Ruta dels Esmorzars’, para “recorrer los mejores bares y probar allí la mejor comida del mundo, el almuerzo”. Lo hacen con su uniforme, un polo negro, y su logo representativo del ‘cremaet’, una especie de carajillo de ron quemado.
El origen de la idea
Los tres coincidieron en el Instituto Joan Fuster de Sueca y en el propio municipio siempre se juntaban en el mismo local. Pero durante la vuelta de un viaje pensaron en comenzar a visitar diferentes bares o restaurantes de la zona para posteriormente plasmarlos en las redes sociales, con el objetivo de que la gente los conociera mejor.
El reto inicial era ir descubriendo cada sábado algún local diferente de nuestra gastronomía, hasta que llegó una pandemia que les obligó a cambiar de planes. “Durante el confinamiento preparamos un listado de bares que hacían almuerzos para llevar o los elaborábamos nosotros mismos en casa, haciendo directos”, recuerda Arnau.
Sus seguidores en un primer momento se limitaban a amigos o gente de los alrededores de Sueca, pero poco a poco se fue extendiendo, hasta superar los 53.000 en Instagram y más de 40.000 tanto en Facebook como en TikTok.
‘La Ruta dels Esmorzars’ permite descubrir nuevos lugares para degustar los mejores almuerzos
Un buen almuerzo
El grupo reconoce que, sin un buen almuerzo, el valenciano no sería lo mismo, porque “implica el ‘comboi’ (término valenciano que puede traducirse como ‘ilusión’) y la amistad disfrutando de cosas sencillas”. La comida, obviamente, es importante, pero igualmente la compañía y el momento de charlar sobre cualquier cosa.
De vuelta a casa es Arnau el que se encarga de editar los vídeos, que siempre empiezan con la frase de “bon dia, esmortzadors, hui estem a…” (buenos días, almorzadores, hoy estamos en…). “En ocasiones debemos hacer muchas tomas para que salga una buena y los vídeos falsos son muy divertidos”, explican con una sonrisa.
Factores a la hora de puntuar un local son: bocadillo, picada, servicio, ‘cremaet’ y relación calidad-precio
Nuevos locales
La forma de descubrir nuevos locales es triple: investigando, siguiendo las recomendaciones de la gente o los propios dueños de los bares que les llaman para degustar sus almuerzos, “porque después tienen una gran difusión”.
El pasado verano, por ejemplo, un vídeo que hicieron en Torrent se convirtió pronto en viral y la gente acudió en masa al lugar, que decidió renunciar a dar almuerzos al sentirse sobrepasados.
Llega entonces el momento de puntuar el local, valorando el bocadillo, la picada, el servicio, la relación calidad-precio, las instalaciones en conjunto y, por supuesto, el ‘cremaet’, que no debe faltar, como señala su lema. “Sabemos que el precio de los almuerzos está subiendo por la inflación y por eso nosotros nos fijamos mucho en el equilibrio”, exponen.
Cuentan con miles de seguidores en las redes sociales que les recomiendan sitios para visitar en un futuro
El ‘boom’ de Instagram
En redes sociales o plataformas llevan ya varios años, con miles de seguidores en cada una. El crecimiento ha sido exponencial, apuntan, “y en ocasiones nos reconocen por la calle”. La novedad en los vídeos actuales es que aparecen subtítulos en castellano, “para que lleguen a más personas”.
Otros grupos realizan rutas parecidas, pero en castellano. “En valenciano únicamente nosotros y creo que es positivo porque nuestro público, mucho más concentrado, es casi todo de la Comunitat Valenciana y es más beneficioso para los propietarios”.
Ranking
Por supuesto, queremos conocer los mejores lugares donde degustar un buen almuerzo en nuestra comunidad. Nos indican que en muchos han disfrutado, aunque especialmente satisfactorias fueron las visitas a Sagra (Alicante) -gracias a sus sorprendentes cocas-, Almassora (Castellón) y Tavernes de la Valldigna (València), sin olvidarnos de los bares de Sueca, que bien conocen, con una excelente relación calidad-precio.
Intentan apreciar también los rincones más turísticos de los municipios a los que acuden, aunque es cierto que muchas veces se quedan comentando qué les ha parecido el local con el dueño. No descartan, asimismo, visitar otras provincias, como Tarragona, “donde nos han dicho que se come muy bien, sobre todo almuerzos de ‘forquilla’ (tenedor)”, pero primero prefieren acabar de recorrer los numerosos municipios de nuestra comunidad que todavía les falta.
Pueblos sí han repetido, pero no bares, porque cada uno es una nueva aventura por desvelar. La última, Fallas, para introducirse en las novedades de la gastronomía de València ciudad.