Después de años de progresiva despoblación, el centro histórico comienza poco a poco a recuperar habitantes y a mirar al futuro con esperanza.
La huida de residentes de tan emblemática zona de Petrer, había traído consigo una evolución habitacional negativa en el barrio que parecía no tener vuelta atrás. Sin embargo, las medidas económicas impulsadas por el ayuntamiento en los últimos tiempos, para intentar revertir esta situación y atraer gente a vivir a esta parte de la ciudad, parece que han surtido efecto y han conseguido dar un giro de 180 grados a este mal endémico.
Ayudas a las viviendas
Hace tres años, la Concejalía de Urbanismo puso en marcha unas ayudas destinadas a la compra y rehabilitación de viviendas en el casco histórico. La iniciativa consistía en otorgar una subvención de hasta un 25% del precio de la compra del inmueble con un máximo de 18.000 euros, y hasta un 35% para la rehabilitación hasta un máximo de 20.000 euros.
En el caso de que se solicitaran ambas ayudas, es decir, compra y rehabilitación, la cifra tope subvencionada ascendería hasta los 35.000 euros.
Desde 2021 se han impulsado 43 proyectos para la compra y rehabilitación de viviendas en el centro histórico
Recuperar el casco histórico
Para el concejal David Morcillo, la intención era clara: por un lado, “intentar revertir la pérdida de población que se estaba dando en el casco histórico, y por otro, que los inmuebles no se deterioraran irreversiblemente”. Hasta ahora, destaca, ambas fórmulas se han cumplido, porque se ha conseguido que el número de habitantes se incremente en más de un 10% durante todo este tiempo.
Según datos oficiales, en el periodo comprendido entre 2018 y 2020, antes de la llegada de las subvenciones, se registraron 74 altas y cambios de domicilio en la zona, mientras que de 2021 a 2023 la cifra subió considerablemente alcanzando las 153 altas.
Este 2024 se lanzará una nueva línea de ayudas para las viviendas
Casi medio centenar de proyectos
Morcillo destaca muy positivamente estos datos, recordando que en las tres convocatorias lanzadas para la compra y rehabilitación de viviendas (2020, 2021 y 2023) se han impulsado un total de 43 proyectos y un aporte municipal de alrededor de 600.000 euros, que han supuesto una transformación “significativa” para esta zona histórica e identitaria de nuestra ciudad.
Se van a destinar 50.000 euros para favorecer la reapertura de locales en la zona
Pros y contras
La tormenta perfecta para la huida de habitantes de esta parte de la población se explica por múltiples motivos: por una parte, la antigüedad de los inmuebles, algunos con alrededor de un siglo, que piden a gritos una reforma que se antoja elevada y difícil de asumir por sus propietarios, y que además obliga a respetar una determinada estética en fachadas y cubiertas con el sobrecoste que eso implica.
Pero también las calles y cuestas empinadas, que juegan en contra de las personas con movilidad reducida o de avanzada edad; la falta de determinados servicios en la zona; o la existencia de cuartelillos, que, aunque llevan años regulados, provocaron en su momento una huida de habitantes. Todo ello sumado al envejecimiento y fallecimiento de los dueños, fueron echando paulatinamente el cerrojazo definitivo a las viviendas.
Por otro lado, el casco histórico ofrece unos atractivos indudables y una calidad de vida en la que parece que se respira a otro ritmo: práctica ausencia de tráfico; posibilidad de residir en una zona tradicional y con encanto; tener a escasos minutos a pie todos los servicios necesarios; o disfrutar de una tranquilidad imposible de encontrar en otras partes de la ciudad más saturadas de coches, ruidos y personas, excepto, eso sí, en época de Moros y Cristianos.
Subvenciones para reabrir locales
Por otra parte, paralelamente, y en sintonía con las ayudas a las viviendas, la Concejalía de Urbanismo va a activar próximamente otra línea de subvenciones, esta vez destinadas a favorecer la apertura de locales comerciales y de hostelería en el casco histórico y zona centro.
Una iniciativa, aún en fase de estudio, que vendrá de la mano juntamente con la Concejalía de Comercio y Consumo para fomentar la compra, rehabilitación y alquiler de negocios.
“Además de la compra y rehabilitación, estamos barajando la posibilidad de subvencionar también el alquiler, porque, a diferencia de una vivienda, un alto porcentaje de negocios optan por esta modalidad, aunque aún estamos viendo cómo hacerlo”, nos explica el edil, quien nos adelanta que las primeras ayudas que se van a entregar alcanzarán una cifra de 50.000 euros, que “podrán ampliarse dependiendo de cómo funcionen”.
“Estas ayudas las queremos también extender a la zona centro, porque un comercio afecta a un área de actuación mucho más grande. Siguiendo el mismo espíritu de lo que se está haciendo con las viviendas, queremos darles subvenciones a los comercios para que vuelvan a abrir y ahora es el momento, porque estamos viendo que, con la llegada de la urbanización de Luvi y el aumento de población en el casco histórico, se hace necesaria la apertura de negocios nuevos”, concluye David Morcillo.