Entrevista > Javier Sánchez Pérez / Atleta (Alicante, 30-mayo-1986)
El canicross es un deporte tan apasionante como poco conocido. En esta disciplina derivada del atletismo los corredores compiten con un perro atado a la cintura. Habitualmente se practica en campo a través, sobre todo en parajes de montaña.
Precisamente uno de los mejores atletas a nivel mundial que compiten en dicho deporte reside en San Vicente del Raspeig. Hablamos de Javier Sánchez Pérez, quien se mudó hace tres años a nuestra localidad y en la pasada Gala del Deporte fue uno de los nominados a mejor deportista masculino. No en vano este jardinero, que aprovecha sus ratos libres para entrenar y competir, en el pasado otoño logró ser tercero del mundo junto a su inseparable perro ‘Alfa’.
¿Cómo te surgió lo de practicar atletismo y canicross?
Siempre he hecho deporte como senderismo, ciclismo o fútbol. Curiosamente empecé en el atletismo por una perrita de una amiga a la que sacaba a pasear. Como veía que tiraba mucho, busqué deportes donde pudieran participar los perros. Así descubrí el canicross.
Primero estuve corriendo en carreras durante algún tiempo simplemente por diversión, hasta que algunas personas vieron que se me daba bien y me animaron a tomármelo más en serio. Para ponerme en forma decidí meterme en el atletismo, empezando desde abajo. Al principio entrené con el atleta Miguel Ángel Barzola. Después estuve en varios clubs de la provincia y ahora he fichado por el Apolana.
¿Hay alguna competición que recuerdes con especial cariño?
En realidad todas tienen algo, especialmente cuando corro con los perros. Siempre se genera un gran vínculo con ellos por el que entras en un estado de ánimo muy especial.
Por supuesto recuerdo mucho el Mundial celebrado en Soria este pasado noviembre en el que quedamos terceros. Además he sido tres veces campeón nacional, he ganado dos veces la Copa de España y fui cuarto en el último Europeo.
«Empecé con el canicross paseando a la perrita de una amiga que tiraba mucho»
¿Con cuántos perros has competido a lo largo de tu carrera?
Empecé con ‘Llanda’, la perrita de mi amiga. Luego tuve una llamada ‘Delta’ a la que no le gustaba correr, así que no la quise forzar y practiqué otros deportes con ella. Después vino ‘Zeta’ con la que ya conseguí mis primeros logros deportivos, y ella fue la que enseñó a mi actual perro ‘Alfa’. Tampoco quiero olvidarme de mis jóvenes perros ‘Diana’ y ‘Eko’, con quienes hemos hecho ya algunas carreras.
¿Qué tal está ‘Alfa’ de forma actualmente?
La verdad es que este año ha pillado un pico de forma muy bueno. Ahora le toca estar unos meses de vacaciones porque el clima que tenemos en la provincia es demasiado caluroso y el canicross en realidad es un deporte de invierno. A partir de 16 grados no hacemos entrenamientos, simplemente lo llevo a la montaña para que paseé libremente o a hacer natación.
Lo complejo de este deporte es que hay que realizar tres tipos de entrenamientos distintos. Primero está el individual, luego entrenar al propio perro, tanto con acondicionamiento deportivo como con adiestramiento mental, y también debemos hacer entrenos en equipo los dos juntos.
«Es bastante duro encontrar dinero y tiempo para poder practicar un deporte minoritario»
¿Normalmente por dónde soléis entrenar?
Por todos los sitios. Soy muy obseso del clima y siempre estoy mirando lugares que tengan la temperatura y humedad idóneas para el perro. En invierno a veces tenemos buenas condiciones en puntos de la provincia como la Carrasqueta, Villena, Sax, Agost, etc.
En un deporte tan minoritario imagino que será difícil tener patrocinadores. ¿Cómo consigues la financiación y el tiempo necesarios para practicarlo?
Es bastante duro. Como te comentaba antes, para entrenar con los perros necesitas climas fríos y eso es complicado cuando estás trabajando. Tienes que entrenar muy pronto por la mañana o al anochecer. Afortunadamente mi jefe me ha ayudado en algunas etapas dándome días de vacaciones para que pudiera llegar a los objetivos fuertes de temporada. Esto por supuesto lo agradezco mucho.
También es un deporte que conlleva mucho dinero. Tienes que velar tanto por ti como por tus perros, que requieren la mejor comida y cuidados. Además, en temas de logística, cuando viajas, necesitas furgonetas para los caninos y es difícil encontrar hoteles donde los admitan. Prácticamente todo esto sale de mi bolsillo. De hecho te cuento como anécdota que hace un par de años me quedé tirado con mi furgoneta en Alemania, y tuvimos que vivir en un taller durante una semana.
Afortunadamente desde hace un tiempo fui seleccionado por méritos en el equipo oficial de la Real Federación Española de Deportes de Invierno. Esto ha sido de gran ayuda porque aquí cuento con algunas de las herramientas necesarias para competir.
«La nominación a mejor deportista de San Vicente es un mérito compartido con mis perros»
¿Qué supone para ti haber sido nominado a mejor deportista de San Vicente?
Es una alegría y una ilusión muy grande. Siempre digo que, aunque sea mi nombre el que figura, mis perros también están ahí detrás.
Además para mí es muy importante darle visibilidad a la palabra ‘canicross’. Me alegra que la gente en San Vicente lo conozca y sepa que hay alguien aquí que lo practica. Es un deporte minoritario, pero que puede ser muy interesante para gente con perro, ya que te permite hacer ejercicio y al mismo tiempo te aporta muchos valores.
¿Tienes competiciones próximamente?
Ahora en verano voy a entrenar sobre todo individualmente. Participaré en alguna carrera de atletismo en la zona para mantener la forma. Nuestro próximo objetivo con el perro es el Campeonato de Europa, que se celebrará en Finlandia este octubre.