La Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio ha activado la tercera y última fase del Plan de Residuos de la Generalitat, en el marco del ‘Pla Recuperem València’, puesto en marcha tras las inundaciones con el objetivo de vaciar totalmente los espacios habilitados para albergar enseres y voluminosos de los municipios que sufrieron los efectos de las riadas del pasado mes de octubre.
Así lo ha anunciado el conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Vicente Martínez Mus, durante la presentación en el punto de acopio intermedio Manises-Quart de Poblet de la tercera fase de este plan de residuos, “con la que se pretende vaciar de manera progresiva los puntos de acopio local (PAL) y los puntos intermedios de transferencia de las áreas afectadas”.
Martínez Mus ha explicado que este proceso, que se ha confiado a empresas especializadas para garantizar el correcto manejo de los residuos, ya ha comenzado con la retirada de los puntos de transferencia situados en Catarroja y de los PAL de zonas más sensibles, “priorizando aquellos puntos ubicados cerca de centros educativos de Paiporta y polígonos industriales”.
En este sentido, se ha encargado el cierre del punto de transferencia de Catarroja, garantizando que los enseres sean derivados a su vertedero de Villena y los vehículos a un Centro Autorizado de Tratamiento (CAT). Mientras tanto, los puntos de transferencia de Picassent y Manises permanecerán abiertos para facilitar una retirada organizada y progresiva, “disponiendo siempre de un punto final de destino” ha indicado el conseller.
La segunda acción se llevará a cabo en Picassent, donde se procederá al vaciado de enseres para trasladarlos a su vertedero en Xixona, mientras que los vehículos también serán dirigidos a un CAT autorizado. Por último, se procederá al cierre de Manises, manteniendo abierto el punto de Hornillos donde hay habilitado un vertedero ordinario. El de Alfafar fue el primero en ser vaciado debido a su cercanía a los municipios.
Martínez Mus ha destacado que la finalidad es “restablecer la normalidad en las zonas afectadas, lo que implica la retirada gradual de enseres, objetos voluminosos y lodos, así como el cierre de los centros de tratamiento”.
En esta tercera fase, ha señalado el conseller, “se contará con empresas especializadas en el ciclo integral de la gestión de residuos, desde la recogida, el tratamiento y la eliminación final en vertederos autorizados para su correcto tratamiento”.
A medida que se avance en esta fase, se pretende que los servicios municipales, que operaban a través de contratas para la recolección de residuos, retomen su funcionamiento habitual en estas poblaciones, tal como lo hacían antes de la riada.
Balance del plan
Una vez activada la tercera fase del plan, Martínez Mus ha insistido en la importancia de las etapas previas. Durante estos 50 días de intensa labor “se han retirado 400.000 toneladas de residuos de las zonas afectadas, lo que representa un esfuerzo significativo por parte de los equipos de trabajo”.
El operativo habilitado por la Conselleria de Medio Ambiente ha logrado evacuar una media de 15.000 toneladas diarias, lo que ha permitido despejar 767 viales obstruidos, mejorando así la movilidad y la seguridad en las áreas afectadas.
El plan de gestión de residuos se configuró con una treintena de Puntos de Acopio Local (PAL) y se activaron cinco Puntos de Transferencia a vertederos, asegurando la salud pública de los vecinos.