Hasta el próximo 28 de enero se podrá visitar en el espacio expositivo de Palau Altea, la exposición “De temor y seda. Las torres de vigilancia de la costa”, que se inauguró ayer con la presencia de la concejala de cultura del Ayuntamiento de Altea, Pepa Victoria Pérez; Ignacio Beltrán, coordinador municipal de Cultura; Luis Arciniega, director de la Cátedra Demetrio Ribes y comisario de la exposición; y Rubén Pacheco, coordinador de exposiciones de la Cátedra Demetrio Ribes.
La muestra se adentra en las torres de vigilancia que se distribuyen a lo largo de los cerca de 500 km de costa de la Comunitat Valenciana. Estas atalayas formaron un sistema coordinado de control del territorio desde mediados del siglo XVI. Como sugiere el título de la exposición, su construcción fue impulsada por el temor a piratas y corsarios; la solución fue la financiación por parte de la Generalitat a través de un impuesto sobre la seda. En su tiempo, el procedimiento se consideró modélico en los reinos hispánicos.
Se trata de un patrimonio vinculado al mar, a la vigilancia y a la seguridad en la navegación, y a la de los habitantes próximos a la costa. Este patrimonio conforma un paisaje cultural de gran valor y con relevantes elementos patrimoniales. El proyecto aporta resultados y materiales con una orientación atractiva como recurso cultural, de ocio y turístico. El estudio que respalda la exposición se sustenta en el rigor científico, mientras que su presentación a la sociedad se realiza de manera didáctica, con un enfoque gráfico y audiovisual. La información se presenta en valenciano, español e inglés.
La exposición es de carácter multidisciplinar y está viajando por diferentes localidades de la Comunitat Valenciana. En Palau Altea se podrá visitar martes y jueves, de 16:30 a 19:30 horas, o en horario de apertura del auditorio por algún espectáculo.