Entrevista > María Milagros Serna / Delegada del Comité de Árbitros de la Vega Baja (Albatera, 20-agosto-1981)
María Milagros Serna lleva 23 años dedicándose profesionalmente al mundo del arbitraje en la comarca, es una apasionada del fútbol y eligió esta opción porque, por aquel entonces, era difícil ser mujer y participar en los partidos de fútbol de otra manera.
Tras una larga trayectoria donde ha demostrado su valía y entrega, en febrero se convirtió en la primera mujer delegada del Comité de Árbitros en la Comunidad Valenciana. AQUÍ en la Vega Baja ha hablado con ella para que nos pueda contar más detalles sobre su carrera profesional.
¿Cuándo empezaste a interesarte por el arbitraje?
A mí me apasionaba ese mundo, mi padre era aficionado y siempre nos lo transmitió. Por aquel entonces, estamos hablando de aproximadamente el año 95 o 96, no había equipos de fútbol femeninos como ahora, y el arbitraje era una manera de poder estar en el terreno de juego y participar en el fútbol.
Finalmente me decidí a presentarme en la delegación e hice el cursillo para formarme como árbitra.
¿Cómo ha transcurrido tu carrera en el arbitraje?
Debuté en un partido de fútbol 8 a principios de octubre, era un Rafal-Horadada de alevines que recuerdo perfectamente. A partir de ahí, como todos mis compañeros, poco a poco fui subiendo. Llegué a arbitrar en primera regional masculina, mis partidos siempre han sido en masculino, por razones obvias, apenas existían equipos femeninos.
También hice de asistente en preferente y cuando dejé de arbitrar con categoría pasé a ser informadora en el Comité. Durante los últimos diez años compaginé el arbitraje en el fútbol base con los informes, y también era profesora de reglamento en la delegación de Orihuela, formando a los nuevos árbitros en el cursillo.
¿Cuál es el funcionamiento de tu puesto actual como la primera mujer delegada del Comité de Árbitros en la Comunidad Valenciana?
En febrero de este año, el actual presidente Pepe Enguix, me propuso hacerme cargo de la delegación, confió en mí para su proyecto y, desde el 15 de febrero, he pasado a coordinar los partidos de futbol base.
Ahora me encargo del nombramiento de los árbitros, gestionar cualquier incidencia que pueda haber, controlar que los partidos se desarrollen correctamente, etc. Siempre en coordinación con la sede del Comité que está en Valencia; hay que tener en cuenta que en Orihuela somos la delegación de la Vega Baja.
«Siempre conté con el apoyo y respaldo de mis compañeros, de la organización y del Comité de Árbitros»
¿Ha sido difícil hacerte un hueco en el arbitraje?
Yo y unas pocas compañeras fuimos pioneras en la comarca en el arbitraje. Respecto a mis compañeros, a la organización y al Comité de Árbitros, siempre tuve su respaldo y su apoyo. Siempre he sido una más dentro de mi colectivo, nunca me he sentido extraña ni diferente y todo me lo he ganado con esfuerzo, como el resto de mis compañeros.
Ha sido difícil para nosotras, igual que para el resto de árbitros. Donde más he sentido que tenía que demostrar que merecía estar ahí porque tenías los conocimientos necesarios, era en el campo. Estamos hablando de una época (finales de los 90 y principios del 2000) donde era extraño ver a una mujer en el terreno de juego. La gente quedaba sorprendida por aquel entonces. Ahora es normal ver a compañeras arbitrando.
«Hace 20 años, cuando empezaba, yo decía que era árbitra de fútbol y todos se sorprendían»
¿Crees que es más fácil ser árbitro para un hombre que para una mujer?
Yo creo que a fecha de hoy es igual porque ahora es normal. El otro día una mujer valenciana hizo de asistente en la final de la Copa del Rey en Telecinco.
Ahora es normal, pero hace 20 años no era normal, en mi día a día, en la universidad o cuando empezaba, yo decía que era árbitra y me preguntaban ¿de qué?, se sorprendían cuando les decía que de fútbol.
«Me enorgullece el ver que cada día más mujeres quieren ser árbitras»
¿Entonces crees que se va normalizando el hecho de que las mujeres sean árbitras de fútbol?
Sin duda, la evolución se ve tanto en equipos de fútbol femenino, en la comarca tenemos cuatro, como en árbitros. En la Comunidad Valenciana tenemos una chica en Primera División, una asistente internacional, chicas jóvenes que vienen pisando muy fuerte… Yo me siento orgullosa al echar la vista atrás y ver que ahora hay muchas mujeres y con muchas ganas.
«Los árbitros pasan pruebas técnicas y físicas dos veces al año»
¿Cómo ha cambiado el arbitraje durante todos estos años?
Donde más se ha notado es en la profesionalización, a todas las escalas, de los árbitros. Se nos exige mucho a los árbitros, física y técnicamente tenemos que estar muy preparados porque hay competencia.
Los árbitros de Primera División son atletas que trabajan muchísimo físicamente y, aparte de conocer las reglas del juego, son personas que tienen conocimientos de informática, de idiomas, etc. Y esto no solo ocurre en Primera División, mis compañeros, desde Segunda Regional a todas las categorías, pasan pruebas físicas y técnicas dos veces al año.
Hay una exigencia que hace que la calidad sea mejor y que sea más bajo el margen de error. El error es el factor humano, no somos máquinas y nos equivocamos, pero sí que es verdad que cuando más exigencia hay más se puede corregir y mitigar esos errores.
¿Qué balance haces sobre tu trayectoria profesional como árbitra?
Cuando iba a un partido siempre me encontraba un poco con las dos vertientes, una que te miraba pensando ¿dónde va ésta?, y la otra que te apoyaba y valoraba tu trabajo y tu valentía por estar ahí.
Tiene su lado bueno y su lado malo, pero al final creo que el lado negativo se difumina un poco con todas las cosas buenas. A nadie le gusta que le insulten, pero eso es un poco en general, sea chico o chica, el árbitro es en muchas ocasiones objeto de crítica. Al final las cosas buenas consiguen sobreponerse a las malas: los ascensos, el compañerismo…
Si yo me plantara otra vez en 1995 y tuviera que decidir si volver a hacer lo mismo, lo haría.
¿Nos quieres contar alguna anécdota curiosa de tu vida profesional?
Recuerdo una con cariño que me sucedió en Santa Pola, que tiene en su castillo el Museo del Fútbol. El hombre que se ha encargado de montar ese museo, y que dedica ese espacio a jugadores tan importantes como Iniesta, fue a un partido mío de Primera Regional a pedirme mis tarjetas firmadas, para ponerlas también en el museo porque yo era la primera mujer que pitaba en Santa Pola. Claro, yo cuando lo vi entrar y me lo dijo, me quede un poco alucinada.
Se enteró que iba a arbitrar una mujer en el Manolo Maciá de Santa Pola y fue a explicarme que quería documentar ese hecho, que consideraba destacable en la historia del fútbol de la localidad. Quería tener un recuerdo de ese partido.
¿Cómo es tu vida profesional actual?
Siempre he compaginado el ser árbitra con mi profesión como profesora de instituto, pero hace dos años que dejé de arbitrar en los partidos. Mi último partido fue unos días antes de enterarme que estaba embarazada.
Arbitrar, salvo en fútbol base, ya sería difícil, tanto por edad como por cargas familiares, etc. Yo sólo me planteo empezar la temporada que viene y hacerlo lo mejor posible. Llevo 23 años en el Comité y siempre he estado al servicio del Comité, mi intención es seguir aquí.
«Todo el que quiera ser árbitro en la comarca tiene que hacer nuestro cursillo que empieza el 20 de Septiembre»
¿En qué consiste el cursillo para formarse como árbitro?
El cursillo de la temporada que viene empieza el día 20 de septiembre. En él les preparamos en cuanto a reglas del fútbol para poder arbitrar, también les preparamos físicamente para pasar unas pruebas físicas, y se hacen unas prácticas con equipos de fútbol base que se prestan a ello.
Una vez que se supera el cursillo se empieza a arbitrar en fútbol base y, dependiendo del nivel, se va subiendo progresivamente de categoría. El cursillo dura unos dos meses; a finales de octubre o primeros de noviembre se hacen los exámenes.
¿Qué les dirías a los jóvenes que se estén planteando la posibilidad de arbitrar?
Animo tanto a los chicos como a las chicas a que vengan al cursillo que empieza en septiembre, es una experiencia muy buena que además es retribuida y hacemos deporte. Hay un grupo joven muy bueno que son muy buenos compañeros.
Cualquiera al que le guste el fútbol, incluso teniendo ficha de futbolista, se puede compaginar con el fútbol base. Cualquier interesado que se acerque a le delegación a pedir la información sobre el próximo curso.
Datos
Dirección de la delegación del Comité de Árbitros de Orihuela: C/ López Posas, 12, entresuelo.
Teléfono: 965 306 796
Redes sociales
Facebook: Delegación de árbitros de Orihuela.
Instagram: @delegaciondearbitrosorihuela