Entrevista > Fran Castell / Pastelero y docente en cocina (Elche, 6-julio-1967)
Por tercera vez Fran Castell ha viajado a Senegal para colaborar con su trabajo en una misión ideada por la ONGD ilicitana Toubabs Team, en la que participan diferentes profesionales con un mismo objetivo: ayudar.
Sus actuaciones se centran en Sam Sam y Sangué, en una zona cercana a Dakar donde las condiciones de vida son muy difíciles, especialmente para las mujeres. La falta de alcantarillado, de higiene y la mala alimentación, son motivo de enfermedades que afectan seriamente a su salud.
«Las mujeres lo tienen todo muy difícil en África»
Educación sanitaria
En este tiempo han conseguido poner en marcha un modesto dispensario médico, que cuenta de forma permanente con una enfermera que trabaja y comparte sus conocimientos con el poblado.
Con ello han logrado no solo aportar mediante la atención sanitaria más salud a las personas de este barrio tan pobre, sino dinamizarlo y promover la educación sanitaria.
«Saber hacer pan facilita a esas mujeres un medio de vida para sobrevivir»
Elaborar pan y repostería
Fran Castell tiene como misión enseñar a las mujeres a elaborar pan y repostería, de manera que no solo conozcan como elaborarlo sino que les sirva como medio de vida vendiéndolo en pequeños mercados.
En la maleta ha llevado todo tipo de utensilios de cocina desconocidos para estas mujeres, tales como ralladores, pelapatatas o pasapurés, que les van a servir para mejorar y facilitar su trabajo.
En el anterior viaje les instalaron un horno para cocer sin dificultades este pan, al que algunos llaman con razón, el pan de la vida.
¿Cómo empezó todo?
Un buen día me llamaron y me propusieron ir con ellos a enseñar a las mujeres a hacer pan para facilitarles un medio de vida y no me lo pensé, hice la maleta y me fui con ellos.
La idea era que pudieran no solo comer, sino salir a los pequeños mercados a vender su pan o hacer trueque con él.
El objetivo principal de todos los profesionales que participamos es no solo colaborar con nuestro trabajo, sino formarles para que ellos también puedan actuar en la medida de lo posible cuando no estamos. Viajo con profesionales de la salud principalmente.
¿Qué encontraste cuando llegaste?
La primera sensación es impactante, ya que aquello no tiene nada que ver con nuestras vidas rodeadas de comodidades.
Allí conocí a sor Regina, una monja española que tiene una pequeña escuela donde enseña oficios y una casa de acogida para mujeres. Una leonesa con mucho carácter; una mujer que vive en el barrio desde hace 10 años y en África más de 40.
Ella es la directora del Centro de Mujeres, muy próximo al solar que fue cedido para la construcción del dispensario. En el primer viaje las dotamos de un horno y durante toda una semana las enseñé a hacer pan y algunos productos de bollería.
Como docente tengo que decir que son de las mejores alumnas que he tenido en mi vida. Aprecian lo importante que es para ellas, y saben que de eso puede depender su medio de vida.
«La vida se ve muy distinta desde allí y aprendes a valorar lo que tienes»
¿Se ve la vida distinta desde allí?
Muy distinta. Te das cuenta de lo superficiales que podemos llegar a ser en ocasiones, y lo poco que valoramos todo lo que tenemos.
El simple hecho de abrir un grifo y que corra agua es algo a lo que estamos acostumbrados, y no pensamos en los millones de personas que no pueden hacerlo.
Toubab es como llaman de manera no despectiva a los blancos en Senegal. Nos gustaba como los niños nos llamaban así cuando íbamos por las calles y empezamos a llamarnos así entre nosotros.
¿Cómo se puede colaborar con vosotros?
Las personas interesadas en colaborar con nosotros pueden entrar en la página web de la ONG: tubabsteam.org
Ahí pueden encontrar toda la información acerca de lo que hacemos, e informarse de la forma en la que pueden colaborar o formar parte de la organización e incluso viajar con nosotros a África.
Es un proyecto que implica a muchos profesionales…
Entendiendo que la salud no es sólo la cura de la enfermedad, sino una forma de luchar contra la pobreza y la desigualdad, y desde el espíritu colaborativo que desde sus orígenes ha sido uno de los motores de Toubabs Team, en diciembre del año pasado 2018 se inició la colaboración entre Toubabs Team y la Fundación Salud Infantil.
A raíz de la visita de la Fundación se detectó la necesidad de avanzar hacia la detección precoz de la discapacidad en la infancia.
Lo abordan desde dos frentes: la formación a las familias en prevención y el seguimiento de la evolución de los niños del barrio que presenten algún tipo de déficit de desarrollo físico o cognitivo.
Salvar a Mame
Otro de los retos de Toubabs team fue salvar la vida de ´Mame`, una niña africana que necesitaba urgentemente un corazón nuevo ya que le quedaba poca vida. “Dejar morir a una persona sabiendo que puedes hacer algo más por ella es algo que no podemos permitir”, apuntaba Fran.
La esperanza de vida de Mame, en el momento en que la conocieron, era de unos seis meses aproximadamente. La ONG puso en marcha toda su capacidad y compromiso personal, profesional y social hacia un solo objetivo: traer a Mame Fatou a España para que fuera operada del corazón.
Lo consiguieron después de superar toda una serie de obstáculos que encontraron en su camino. Pero lo importante de esta historia es el final; un final feliz que ha logrado que Mame esté operada y recuperada.