El Ayuntamiento de Crevillent y la agrupación local de la Cruz Roja han puesto en marcha un nuevo servicio de teleasistencia, dirigido a personas mayores de 65 años o que padezcan una discapacidad superior al 65%.
Consiste en un dispositivo de transmisión que se instala en el hogar, pudiendo ir acoplado al teléfono móvil o al fijo. Así mismo el usuario recibe un colgante para el cuello (similar a una medalla) con un botón incorporado, para que pueda presionarlo en cualquier momento. El objetivo es que ante una situación de caída, accidente doméstico o enfermedad, la persona tenga una forma mucho más accesible de solicitar ayuda.
La asistencia telefónica está habilitada las 24 horas de los 365 días del año
Ayuda inmediata
“El problema de las personas mayores o impedidas que se sienten solas viene ya de antiguo, pero quizás se ha agravado todavía más con esta pandemia. Con la covid muchos se han tenido que quedar en casa a la fuerza sin poder ver durante muchos meses a sus hijos y nietos, e incluso todavía padecen miedo a salir por el riesgo de contagio. Ha sido una situación muy depresiva para ellos. Por eso hemos querido ayudarles para que se vean más arropados” nos explica Montserrat Pineda, concejala de Derechos Sociales y Mayores.
«Los mayores se han sentido muy solos durante la pandemia. Esto ayudará a que se vean más arropados» M. Pineda (Derechos Sociales)
Según nos explica la edil, este servicio de teleasistencia fue suprimido recientemente por la Diputación salvo para aquellas personas que están dentro del sistema de dependencia. Por ello desde el Ayuntamiento se decidió habilitar una partida en los presupuestos de 2021 destinada a ponerlo en marcha a nivel municipal.
Se trata de un servicio personalizado a cada usuario. En casos de personas que puedan ser propensas a desmayos que no puedan apretar el botón, el dispositivo también puede detectar si pasan demasiadas horas sin entrar en el baño. Para usuarios que toman medicamentos diarios, podrá funcionar como alarma recordatorio que suena a una determinada hora. Incluso es posible habilitarlo como detector de humo o gas.
Si el usuario aprieta el botón, rápidamente una operadora se pone en contacto a través de los dispositivos. En caso de no haber respuesta se procede a llamar a los familiares, a una ambulancia o incluso a una unidad móvil específica que también se ha establecido para este servicio. “El tiempo máximo de llegada desde que la persona aprieta el botón nunca excederá de los 30 minutos. Las 24 horas de los 365 días del año” nos asegura Pineda.
El dispositivo de transmisión se puede adaptar a las necesidades de cada persona
Mejora la vida
La adquisición de esta teleasistencia es totalmente gratuita, basta con solicitarlo al Ayuntamiento pidiendo una cita con la Técnica de Mayores en el Centro de Mayores Parc Nou. Según nos indica la concejala Pineda, el tiempo transcurrido desde que un solicitante aporta la documentación necesaria hasta que sea instalado en su domicilio no excederá de los siete días.
“Hemos querido poner unos requisitos poco exigentes para que más personas puedan adherirse. La única excepción es aquellos que sufran enfermedades mentales graves que les impidan entender el funcionamiento del dispositivo” nos explica la edil.
En total se han habilitado hasta 38 dispositivos, si bien desde la concejalía de Derechos Sociales y Mayores admiten que esta cifra probablemente pronto se quede corta. “Ya hemos tenido bastantes demandas, y eso que ahora por el verano muchos mayores acuden al campo con sus familias. Tenemos la certeza de que a partir de septiembre nos llegarán muchas más solicitudes, así que en el futuro a buen seguro tendremos que aumentar el número de dispositivos” nos indica la edil.
Según nos asegura Pineda, la clave del éxito que tendrá este servicio es su capacidad para mejorar la vida de mucha gente. “Esta teleasistencia permitirá reducir la sensación de aislamiento que sufren algunas personas, ya incluso desde antes de la pandemia, al tiempo que les posibilitará poder quedarse más en casa minimizando el riesgo de contagios. Además les dará una tranquilidad mayor, tanto a ellos mismos como a sus familiares y cuidadores” nos comenta.
Más autosuficiencia
En el año 2000 la esperanza de vida en España era de 79 años. Actualmente supera los 83 años. Cada vez vivimos más, pero es habitual que algunas personas al cumplir cierta edad se vean obligadas a abandonar su hogar para trasladarse con sus familiares o ser ingresados en alguna residencia.
La concejala Pineda espera que esta iniciativa sirva para que los mayores o discapacitados ganen una mayor autosuficiencia, y así poder retrasar ese momento de obligado abandono del hogar.
“Es duro para alguien que lleva muchos años en su casa tener que dejarla. Estamos hablando de una generación que nos ha dado muchísimo y que ahora con esto del coronavirus lo ha pasado realmente mal. Nunca vamos a poder devolverles todo lo que han hecho por nosotros, pero al menos espero que este servicio pueda ayudarles un poco. Si nos solicitan ayuda, siempre habrá alguien al otro lado que les responda” nos asegura la edil crevillentina.